Serena Williams, la actual número uno del ranking WTA, hizo confesiones interesantes en una entrevista al sitio Dujour.com. La estadounidense admitió que cuando era chica le costaba asumir su cuerpo.

"No siempre me sentí segura de mí misma. Me empecé a sentir cómoda conmigo hace seis o siete años, no fue fácil. Crecí con muchas hermanas, yo era la más joven y un tanto ancha. Mi hermana Venus era tan alta y delgada... y se hace difícil en una sociedad en donde mucha gente es delgada. Sobre todo como deportista", contó, y no tuvo problema en sentenciar: "Ninguna deportista tiene los pechos que yo tengo".

Además, habló de cómo lleva ser una figura pública. "No puedo ir a lugares como Starbucks, tengo que mandar a alguien. La verdad que no me gusta decile que no a las fotos, así que siempre termino aceptando. Pero si le decís que sí a una, después hay 20más esperando, y después 30. Es una locura, por eso estoy mucho en mi habitación. Durante los torneos casi nunca salgo del hotel", expresó la tenista.

También se declaró una fanática de la moda y la ropa. "Cuando era chica hacía ropa para mis muñecas. Mi madre me enseñó a coser cuando tenía dos o tres años", recordó.