Omar De Felippe asumió como técnico en Independiente tras la salida de Brindisi, la hinchada del Rojo esperaba un milagro, esperaba que el ex técnico de Quilmes llegara y cambiara en una semana lo que no se pudo cambiar en años. El choque con la realidad era evidente, Independiente no pudo vencer a su par mendocino (Independiente Mendoza) y se hunde en el fondo de la tabla.
 
Es que el juego de los de Avellaneda sigue siendo el del semestre pasado, a las apuradas, sin elaboración de juego, un equipo que no es un equipo. Y los rivales en la B Nacional saben que enfrentar a Independiente es tener la posibilidad de ser vistos, por eso dan ese plus, mayor esfuerzo que el normal. Abundan aquellos que señalan que es complicado para un equipo de Primera jugar en la B porque el estilo de juego es otro, la realidad es que jugando bien se puede ganar en la B, en la C, en la D.
 
Hoy Independiente se encuentra a 12 puntos del puntero del campeonato que es Defensa y Justicia (que lidera con puntaje perfecto), al ser un campeonato largo (42 fechas) esto no es grave, sin embargo el Rojo debe reaccionar rápido ya que no puede darse el lujo de retrasar mucho más su primer victoria. El desafío en la próxima fecha será frente a Huracán que viene bastante bien, sumando nueve puntos. ¿Será el primer triunfo del Rojo?