Una vez visto el fixture que fue sorteado el miércoles en la Liga, no cabe duda que las tres primeras fechas decidirán para que está Kennedy Universitario al final del torneo.

Jugar los primeros tres partidos con quienes fueron compartiendo y alternando la punta durante casi todo el año, y que en este momento la diferencia sea tan solo de un punto, marca claramente que si perdemos los tres partidos nos despedimos de la pelea por el título.

Sin embargo, si ganamos los tres, ya ponemos una mano en la copa ya que tendríamos que hacer una muy mala segunda parte de esta segunda ronda para perder el título.

Como jugador, con la suerte de haber disputado la mayoría de los partidos, tengo varios sentimientos encontrados.

Primero y más importante, la calentura de la lesión que vengo acarreando desde ya hace tres fines de semana y que me pone en duda para esta domingo, por otro lado la alegría inmensa de estar con este cuadro que me recibió de la mejor manera a principio de año con la posibilidad de estar ahí arriba, prendiditos y con la chance intacta de salir campeones, depende pura y exclusivamente de nosotros.

No cabe duda que esta segunda ronda será dramática ya que la diferencia de puntaje entre el primero y el sexto es de tan solo de cinco puntos, por lo que las chances de ascenso y de título están vigentes para varios, y nadie va a querer dejarla escapar.

Se viene la parte más linda, se espera con ansias y con la esperanza de que el trabajo y lucha que tuvimos que poner, dé sus frutos al final de la temporada.

Esperemos que junto a la gente que nos acompañó partido tras partido, independientemente de las condiciones climáticas y geográficas, podamos allá, por fines del mes de noviembre o principios de diciembre, levantar la copa de la Divisional F.