El rumano Ciprian Marica, jugador que actualmente defiende a Gefate, sufrió las consecuencias del cambio de idioma y una sociedad discriminatoria.

Cansado de ser objeto de burlas en el fútbol español por su apellido, decidió que su camiseta cuente con su nombre de pila.

“En Rumanía el apellido no significa nada”, dijo el jugador a medios españoles consultado sobre el cambio de camiseta de “Marica” a “Ciprian”.

El jugador tuvo un paso por Alemania, Stuttgart y Schalke 04, y anteriormente jugó en Dinamo Bucarest. Además de ser parte del primer equipo de Getafe, Marica defiende a la selección de su país.