En el partido disputado el sábado ante Liverpool, se lo pudo ver al DT de Sud América, Alejandro Apud, tremendamente nervioso y ofuscado.

Es que el arbitraje de Esteban Ostojich fue realmente contraproducente para los intereses “buzones”, siendo la falta al golero Javier Irazún previo al gol de Liverpool el punto de ebullición para la calentura de la hinchada naranja, y especialmente para Apud.

El enojo desencadenó la expulsión de Apud, por lo que tuvo que ver el partido desde la hinchada de Sud América, y promediando el segundo tiempo, se pudo ver un problema entre Apud y algunos parciales “buzones” que increpaban al DT por lo mal que el equipo jugaba.

Al día siguiente del triste episodio, Apud envío una carta a los hinchas de Sud América pidiendo disculpas por su reacción, pero también dejando claro que la reacción fue, no solo por el mal arbitraje y lo que el considera “mala suerte” por las lesiones que abundan en el plantel buzón, sino por las provocaciones que recibió por parte de algunos hinchas.

Apud fue ratificado en su cargo por parte de quienes toman las decisiones en materia económica y deportiva, la SAD (Sociedad Anónima Deportiva), aunque pudo saber PDA que parte de la directiva (es decir, los que votan los socios) no están de acuerdo con que el DT continúe en su cargo. Al igual que lo hace el tiempo, los resultados venideros pondrán cada cosa en su lugar.
 
A continuación, la carta publicada en el sitio www.iasa1914.com:

A través de este breve mensaje quisiera expresar mi pesar por lo sucedido en el partido de ayer frente a Liverpool, en relación a mi intercambio con algunos hinchas de Sud América durante el encuentro.

Sinceramente siento que mi reacción no estuvo adecuada y que los acontecimientos no colaboraron al respecto, pero lo que honestamente deseo expresar es que puedo explicar esta reacción por la impotencia que me invadió a raíz de situaciones injustas que se fueron dando: un arbitraje tendencioso, las lesiones de nuestros jugadores que no tenían  consecuencias para el adversario y a esto se sumó la animosidad de críticas destructivas que partían de un grupo de hinchas desde las gradas.
 
Siempre estuve convencido que la hinchada de Sud América era por esencia una hinchada humilde, fiel, sufrida y perseverante y que alentaba positivamente más allá de la adversidad…porque se trataba de construir desde lo que se tenía, desde lo que el cuadro inspiraba… y eso me generaba y me genera respeto.

Y en lo que en lo personal me ha tocado acompañar la historia de este glorioso cuadro así lo compartí con toda la hinchada en momentos tan inolvidables como al abrazarnos al ansiado objetivo cumplido de volver a pertenecer a 1ª División. Y fue así como asumí el compromiso de poner todo el pulmón en orientar a este plantel en el importante desafío de seguir perteneciendo a 1ª División, sabiendo por supuesto que no  era un camino fácil.

Y en eso estuvimos desde el primer día, poniendo en el pienso toda la energía de nuestro cuerpo técnico, ajustándonos a las realidades del Club y sacando el mejor partido posible de las mismas, siempre con la honestidad, el esfuerzo y el compromiso de trabajo como banderas.
 
En este tramo algunas cosas han salido bien y nos encargamos de  reforzarlas, otras, a pesar de un gran esfuerzo de todos los integrantes del plantel  no gozaron de buena suerte (factor siempre presente en el fútbol) y otras, aún con toda la intención positiva, no tuvieron el resultado que esperábamos.

Pero lo que siempre estuvo y está presente es la convicción y la adhesión al trabajo responsable, aquel que entusiasma, motiva y empuja a los seres humanos a crecer, a anhelar ser mejores y conquistar los logros soñados… De allí que en este momento, en esta racha en que las cosas no están rodando como todos, ustedes y nosotros, quisiéramos, necesitamos más que nunca del apoyo, del sostén de la hinchada incondicional de siempre.

Y, contrariamente a las críticas lapidarias y las vociferaciones que desprestigian gratuitamente, este plantel de muchachos (la mayoría de ellos hacen su debut en 1ª División) necesita que vuelvan a creer en ellos, que les transmitan confianza y la sensación de que se puede.
 
Es por esto  que en estas breves líneas traté de ilustrarles cual es mi ánimo y el porqué de mi reacción tan vehemente y equivocada, que lejos de querer ofender a nadie, transparentó un pedido de apoyo, no hacia mí, sino hacia todos estos futbolistas que, con sus errores y aciertos están apostando a lo mejor…

Y es por esto también que hago explícito mi pedido de disculpas por el mal momento que vivimos todos, y mi palabra y mi deseo de no volver a repetirlo. Por el respeto al trabajo de todo este plantel, por el esfuerzo y la perseverancia del seguimiento de esta hinchada a la que el equipo necesita solidaria y positiva como siempre.
 
Con afecto respetuoso,
                                             Alejandro Apud