Cría halcones...
La crónica y el análisis de lo que pasó en la final del Súper Bowl, ganada por Seattle Seahawks en cifras de 43 - 8.
Un partido que estaba precedido por las estadísticas de ambos equipos, sobre todo los primeros lugares en ofensiva de Denver y en defensiva de Seattle, se iba a desarrollar de forma poco usual para lo esperado.
En el arranque del partido, en una decisión que no parecía muy clara, Seattle ganaba el sorteo y prefería patear. En 15 segundos de partido, Denver arrancaba con dos errores que anticipaban una noche difícil para Manning y compañía.
Una devolución de 15 yardas y el error de Manny Ramírez que efectuó el centro mientras Peyton Manning ordenaba la ofensiva, propiciaron un safety y un comienzo con un 0 - 2 abajo y sin el balón.
La primera ofensiva de Seattle culminaba con un gol de campo, con la defensiva de Denver logrando parar una ventaja mayor (5 - 0). En su segunda posesión, aun arrancando en la yarda 35 por falta de Seattle, Denver no logró concretar una primera oportunidad.
En su siguiente posesión, Seattle empezó a desarrollar la estrategia de estirarla, avanzar lento pero seguro, y mantener a Manning frustrado en la banca. Nuevamente la defensiva de Denver logró que el daño fuera menor (gol de campo y 8 - 0). Hasta aquí, manteníamos la esperanza de un partido peleado.
En la siguiente ofensiva de Denver, se desató el infierno para Peyton Manning, con la primera intercepción por parte de Chancellor que le permitía a Seattle terminar el primer cuarto con el balón y la ventaja. Aun había esperanza para Denver.
En el segundo cuarto, a pesar de que la defensiva de Denver la peleó para frenar a Lynch, la posesión de Seattle terminó con el primer touchdown del partido (15 - 0). La diferencia de 14 minutos de posesión de Seattle frente a solamente tres de Denver, marcaba que la estrategia de Seattle parecía funcionar.
Y el infierno para Manning regresó. Tras una ofensiva larga y costosa, de más de 8 minutos y estando solamente a 35 yardas de lograr descontar, el pase a Moreno fue interceptado por Malcom Smith y con una carrera de 69 yardas marcaba el touchdown que ponía el marcador 22 - 0.
En la última ofensiva del cuarto, Denver lograba llegar rápidamente a la yarda 19 de Seattle, pero no lograba concretar una cuarta oportunidad. Con un minuto para el final de la primera mitad, Seattle gastaba el tiempo para ir al descanso con una ventaja impensada al comienzo del partido.
Tras un show del medio tiempo que, a opinión de este cronista, fue el más flojito de los últimos años, todos esperábamos la reacción de Denver a través de todas las armas ofensivas con las cuales se manejó Peyton Manning durante la temporada regular.
Percy Harvin recibía el balón por Seattle y, ante la mirada atónita de los fanáticos de Denver y la imposibilidad de detenerlo por parte de los Broncos, corría 87 yardas y lograba el touchdown con apenas 12 segundos de comenzado el tercer cuarto.
Con un marcador negativo de 29 - 0, Denver no levantaba cabeza. Manning no lograba concretar pases largos, con pases cortos llegaba a la yarda 38 de Seattle, pero tenía que despejar, quizás en un intento de lograr robar el balón cerca de la línea final de los Seahawks.
Luego de que Seattle tuvo que despejar el balón, llegaba el capítulo final. Tras solo tres jugadas ofensivas de Denver, una nueva pérdida de balón de los Broncos, esta vez resbalando de las manos de Demaryius Thomas, culminaba en una nueva ofensiva de Seattle y touchdown de Jermaine Kearse.
A tres minutos del final del tercer cuarto, Seattle festejaba con un marcador de 36 - 0. El touchdown de Denver al final del cuarto y toda la acción del cuarto cuarto fueron solamente una anécdota. 15 minutos de juego no iban a cambiar lo sucedido en los anteriores 45.
Los Seahawks se llevaron el trofeo para Seattle.
¿Dudas despejadas?
Mucha tinta correrá en los próximos días sobre dos afirmaciones: “Peyton Manning es un quarterback de temporada regular” y “las defensas ganan campeonatos”. Para confirmarlo, tendremos que esperar a una nueva temporada. ¡Ah! Y el MVP debería haber sido para toda la defensiva de Seattle.
Si no lo viste, poné play
Seguramente si estás leyendo este articulo, te interesa la NFL y ayer estuviste frente al televisor. Por lo menos en los primeros 3 cuartos. ¿Qué mejor, entonces, que repasar las mejores jugadas, con especial énfasis en el retorno de Percy Harvin y la habilidad de Jermaine Kearse para sacarse a 5 defensas de encima?
Mirá:
En el arranque del partido, en una decisión que no parecía muy clara, Seattle ganaba el sorteo y prefería patear. En 15 segundos de partido, Denver arrancaba con dos errores que anticipaban una noche difícil para Manning y compañía.
Una devolución de 15 yardas y el error de Manny Ramírez que efectuó el centro mientras Peyton Manning ordenaba la ofensiva, propiciaron un safety y un comienzo con un 0 - 2 abajo y sin el balón.
La primera ofensiva de Seattle culminaba con un gol de campo, con la defensiva de Denver logrando parar una ventaja mayor (5 - 0). En su segunda posesión, aun arrancando en la yarda 35 por falta de Seattle, Denver no logró concretar una primera oportunidad.
En su siguiente posesión, Seattle empezó a desarrollar la estrategia de estirarla, avanzar lento pero seguro, y mantener a Manning frustrado en la banca. Nuevamente la defensiva de Denver logró que el daño fuera menor (gol de campo y 8 - 0). Hasta aquí, manteníamos la esperanza de un partido peleado.
En la siguiente ofensiva de Denver, se desató el infierno para Peyton Manning, con la primera intercepción por parte de Chancellor que le permitía a Seattle terminar el primer cuarto con el balón y la ventaja. Aun había esperanza para Denver.
En el segundo cuarto, a pesar de que la defensiva de Denver la peleó para frenar a Lynch, la posesión de Seattle terminó con el primer touchdown del partido (15 - 0). La diferencia de 14 minutos de posesión de Seattle frente a solamente tres de Denver, marcaba que la estrategia de Seattle parecía funcionar.
Y el infierno para Manning regresó. Tras una ofensiva larga y costosa, de más de 8 minutos y estando solamente a 35 yardas de lograr descontar, el pase a Moreno fue interceptado por Malcom Smith y con una carrera de 69 yardas marcaba el touchdown que ponía el marcador 22 - 0.
En la última ofensiva del cuarto, Denver lograba llegar rápidamente a la yarda 19 de Seattle, pero no lograba concretar una cuarta oportunidad. Con un minuto para el final de la primera mitad, Seattle gastaba el tiempo para ir al descanso con una ventaja impensada al comienzo del partido.
Tras un show del medio tiempo que, a opinión de este cronista, fue el más flojito de los últimos años, todos esperábamos la reacción de Denver a través de todas las armas ofensivas con las cuales se manejó Peyton Manning durante la temporada regular.
Percy Harvin recibía el balón por Seattle y, ante la mirada atónita de los fanáticos de Denver y la imposibilidad de detenerlo por parte de los Broncos, corría 87 yardas y lograba el touchdown con apenas 12 segundos de comenzado el tercer cuarto.
Con un marcador negativo de 29 - 0, Denver no levantaba cabeza. Manning no lograba concretar pases largos, con pases cortos llegaba a la yarda 38 de Seattle, pero tenía que despejar, quizás en un intento de lograr robar el balón cerca de la línea final de los Seahawks.
Luego de que Seattle tuvo que despejar el balón, llegaba el capítulo final. Tras solo tres jugadas ofensivas de Denver, una nueva pérdida de balón de los Broncos, esta vez resbalando de las manos de Demaryius Thomas, culminaba en una nueva ofensiva de Seattle y touchdown de Jermaine Kearse.
A tres minutos del final del tercer cuarto, Seattle festejaba con un marcador de 36 - 0. El touchdown de Denver al final del cuarto y toda la acción del cuarto cuarto fueron solamente una anécdota. 15 minutos de juego no iban a cambiar lo sucedido en los anteriores 45.
Los Seahawks se llevaron el trofeo para Seattle.
¿Dudas despejadas?
Mucha tinta correrá en los próximos días sobre dos afirmaciones: “Peyton Manning es un quarterback de temporada regular” y “las defensas ganan campeonatos”. Para confirmarlo, tendremos que esperar a una nueva temporada. ¡Ah! Y el MVP debería haber sido para toda la defensiva de Seattle.
Si no lo viste, poné play
Seguramente si estás leyendo este articulo, te interesa la NFL y ayer estuviste frente al televisor. Por lo menos en los primeros 3 cuartos. ¿Qué mejor, entonces, que repasar las mejores jugadas, con especial énfasis en el retorno de Percy Harvin y la habilidad de Jermaine Kearse para sacarse a 5 defensas de encima?
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