Peñarol sumó su segunda derrota consecutiva en la Copa Libertadores y quedó muy comprometido para clasificar a la siguiente fase. Fue un 1 - 0 contra Arsenal, en Buenos Aires, que lo deja con un solo punto sobre nueve disputados, mientras que Santos Laguna tiene 7, Arsenal 6 y Anzoátegui 2.

Y lo peor es que, además del mal resultado, volvió a dejar otra pobre imagen futbolística. Capaz que no mereció perder, ya que Arsenal no fue nada del otro mundo y el gol se dio por una jugada fortuita, pero igual jugó mal.

El partido se condicionó desde temprano con el increíble gol de Arsenal, a los 3' del primer tiempo. El arquero Campestrini sacó desde su arco, tan fuerte que la pelota llegó al área de enfrente. Allí salió Castillo para agarrarla, pero le rebotó en el pecho y cayó en la cabeza de Furch, quien fácilmente la mandó a guardar.

Para colmo, Castillo al cometer ese error se chocó con Bizera, provocando la lesión del zaguero y su sustitución. O sea que de pique Peñarol arrancaba perdiendo y con un cambio menos para hacer.

Arsenal, un equipo que se caracteriza más por defender que por atacar, estaba en su salsa. Con la ventaja rápidamente obtenida, se tiró atrás a bancar el resultado y, en una de esas, si salía algún pelotazo, intentar aumentar el marcador.

De esas tuvo solo una en toda la primera parte: un fuerte remate de Furch que Castillo, no sin antes dar rebote y casi metérsela adentro él solo, controló.

Peñarol fue algo más prolijo y dominó la pelota. Con Aguiar manejando los hilos, más buenas las apariciones del "Japo" y Albín por las bandas, los aurinegros generaron bastante buen fútbol y crearon chances de gol.

Zalayeta tuvo una en el área chica que -desacomodado- tiró afuera. Albín tuvo un par: un centro que se cerró y pegó en el palo, y un cabezazo que pegó en la mano de un rival y que debió haberse sancionado como penal para Peñarol.

Los aurinegros merecieron mejor suerte en ese primer tiempo, pero no la pudieron mandar a guardar. 

En el segundo, cambió totalmente: Peñarol fue una lágrima, sus hombres de buen pie se apagaron y las jugadas colectivas desaparecieron. Volvió aquel Peñarol entreveradísimo en ataque, que solo atinó a tirar pelotazos sin sentido y, cada vez que intentaba jugar, le salía mal.

Arsenal no cambió su libreto: siguió defendiendo, bancó y se llevó los tres puntos por aquel gol increíble del primer tiempo. Hasta tuvo para hacer el segundo con un bombazo de Caraglio que pegó en el palo. Lo único que hubo en el complemento.

La imagen del final de Peñarol fue la peor: Darío Rodríguez expulsado por una falta descalificadora, pelotas aventadas sin sentido, casi nula conexión colectiva y ninguna chance de gol en todo el segundo tiempo.

La hinchada insultó a los jugadores en el final, en lo que parece ser una nueva Copa -la tercera consecutiva- en la que Peñarol se tendrá que despedir en la fase de grupos. Todavía no está eliminado, pero la gran irregularidad del equipo la hace ver muy complicada.

Ficha del partido:

ARSENAL: Cristian Campestrini; Martín Nervo, Leandro González Pírez, Diego Braghieri, Damián Pérez; Franco Zuculini (69' Fausto Montero), Matías Sánchez (73' Matías Zaldivia), Iván Marcone, Ramiro Carrera; Milton Caraglio y Julio Furch (80' Mauricio Sperduti). DT: Gustavo Alfaro

PEÑAROL: Juan Castillo; Carlos Valdez, Joe Bizera (10' Jonathan Sandoval), Darío Rodríguez; Emiliano Albín, Marcel Novick (68' Antonio Pacheco), Luis Aguiar, Jorge Rodríguez; Paolo Hurtado; Marcelo Zalayeta y Javier Toledo (56' Jonathan Rodríguez). DT: Jorge Fossati

Gol: 3' Furch (Arsenal)

Amarillas: Carrera, Campestrini y Nervo (Arsenal); Aguiar, Novick, Valdez y Albín (Peñarol)

Roja: 90' D. Rodríguez (Peñarol)

Jueces: Sandro Ricci, Emerson De Carvalho y Marcelo Van Gasse

Estadio Julio Humberto Grondona

Mirá el gol de Furch: