“¡Este es mi barrio, qué lindo que lo veo, flor de Montevideo, orgullo nacional!”. Los jugadores se unen en ese grito con la tribuna repleta del Parque Capurro. Villa Española, el “Villa”, volvió a las canchas después de 5 años para ser campeón y volver a la B.
 
La tribuna visitante de la cancha de Fénix estaba desbordada de hinchas aurirrojos; no era para menos, con el empate Villa Española sería campeón y, tras muchos años sin competir, volvería al fútbol profesional.
 
Sabedor de la ventaja obtenida en la primera final, Villa Española se paró firme atrás, sin dar chance alguna a un Oriental que tenía que ganar sí o sí para estirar la definición. Aun así, al “Villa” le faltaba precisión en los últimos metros para abrir el marcador. “Bigote” López salió gritando el primero, pero su derechazo pegó en el ángulo y cruzó frente a la línea del arco.
 
Pero tuvo su revancha sobre el final del primer tiempo. Una gran jugada por zurda encontró a Pablo Silva por zurda, “Bigote” puso un taco sublime en el corazón del área y Ronald Ramírez, de frente al arco, la puso contra el palo. 1 – 0 a los 41’; Villa Española saboreaba el título.
 
Para el complemento el celeste debía salir a buscar rápidamente el empate, pero los de Líber Vespa aguantaban bien atrás, con gran tarea de Javier Tetes en la zaga y el trabajo a destajo del “Ceja” González en el medio. Quedaban espacios para la contra villera; Cañarte desperdició una de manera increíble y en la recarga llegó el empate.
 
Oriental encontró por primera vez espacios en la última línea rival, el centro pasado llegó desde la zurda y Álex Silva, el goleador celeste, cruzó una volea de derecha para vencer a Nanni. Promediaba el segundo tiempo y Oriental revivía.
 
Con más fuerza que fútbol los de La Paz empujaron para dar vuelta la historia, pero con uñas y dientes Villa Española defendió el resultado. Y cerca del cierre Gerardo Acosta, en una patriada tremenda por derecha, se fue de cara al gol, sirvió el centro atrás y Pablo Silva, el goleador, definió mordido pero convirtió. 2 – 1 y partido liquidado.
 
Villa Española es campeón de la “C” y sus hinchas lo festejan como se merece, después de tantas noticias amargas que dejaron al club fuera del ruedo por mucho tiempo. Campeón en buena ley, venciendo al otro gran equipo de la divisional en cuatro de los cinco partidos en los que lo enfrentó. Mención para Oriental, que dio pelea en todos los partidos demostrando un altísimo nivel futbolístico.
 
Un barrio entero festeja el título y el ascenso. Villa Española es campeón.