Se supone que lo lógico, y mucho más en una final de Champions League, es festejar más el primer gol que el cuarto. Sobre todo si el primero es en la hora y es tan importante como el que le anotó Sergio Ramos a Atlético Madrid.

Sin embargo, Cristiano Ronaldo no festejó ese gol, al menos no lo expresó hacia afuera. El portugués no se inmutó y se fue caminando tranquilo hacia la mitad de la cancha, como muestra este video:



Luego se sucedieron los goles de Bale (2 - 1), Marcelo (3 - 1) y finalmente Cristiano Ronaldo (4 - 1), de penal. Ese último tanto si fue gritado eufóricamente por CR7.

Dicen que lo gritó así, a lo Hulk, porque había una cámara registrando imágenes para una futura película que se hará sobre él.

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