Faltan 33 días
Hoy, en la cuenta regresiva para el Mundial, recordamos el codazo de Tassotti a Luis Enrique en Estados Unidos 1994.
Foto: storiedicalcio.it
Durante la década de los noventa una gran generación de jugadores españoles (Zubizarreta, Hierro, Luis Enrique, entre otros) esperanzó a sus compatriotas con la posiblidad de ponerle fin a una racha increíble sin títulos internacionales.
Con varios de estos jugadores a tope de su forma llegaron a Estados Unidos 1994 con el mote de candidatos. A pesar de que empataron el primer partido ante Corea del Sur, un empate con Alemania y una victoria ante Bolivia lo depositaron en la segunda fase.
En octavos de final se cruzó con Suiza, a la cual aplastó con un 3 - 0 condunente, comenzando a consolidarse defintivamente como uno de los favoritos a ganar el título.
Su rival por un lugar en semifinales fue Italia. El equipo tano bajo la dirección técnica de Arrigo Sacchi gozaba de una línea defensiva muy fuerte (Maldini y Costacurta era la pareja de centrales), acompañado por grandes jugadores como Dino o Roberto Baggio.
Estos no habían tenido un gran Mundial y llegaron al duelo de cuartos sembrando muchas dudas. Apenas un empate con Noruega y una victoria ante México, los clasificó como uno de los mejores terceros, ya que en la primera fecha habían perdido ante Irlanda.
En octavos se habían medido con Nigeria, que le hizo pasar varias zozobras, pero gracias a un gol de Roberto Baggio llevó el partido a alargue. En la prórroga se acabaron todos los sueños del conjunto africano cuando el delantero anotó el segundo tanto del partido, esta vez de penal.
A pesar de todo lo anteriormente dicho, la selección italiana se plantó bien ante su rival español y le complicó bastante las cosas. Un gol tempranero de Dino Baggio puso las cosas a favor de los tanos, que fieles a su estilo decidieron defenderse de los embates españoles.
En el segundo tiempo, España empató con gol de Caminero y la emoción reinó sobre el estadio de Boston. España fue a buscar la victoria heroica, apostó con todo y tuvo varias chances pero el golero italiano, Gianluca Pagliuca, mantuvo el empate.
Sobre el final del partido un contragolpe permitió a Roberto Baggio quedar mano a mano con Zubizarreta, a quien eludió con facilidad y anotó el gol de la victoria.
Con el partido cuesta arriba, los españoles fueron con mayor ímpetu aún a buscar el empate para ir a la prórroga. En una de las últimas jugadas se instaló la polémica cuando un centro cruzado sobre el área italiana terminó con Luis Enrique en el suelo debido a un presunto codazo del italiano Mauro Tassotti.
Automáticamente todo el equipo español comenzó a protestar la existencia de un penal, pero el juez mantuvo su postura. La imagen de Luis Enrique con sangre cayendo de su nariz mientras le pedía explicaciones al juez fue simbólica para una generación de españoles que sufría la impotencia de no poder definir los grandes campeonatos internacionales.
En semifinales Italia derrotó con claridad a Bulgaria y pasó a la final donde cayó por penales con Brasil. Mientras que Luis Enrique sufrió una triple fractura de caballete nasal, Tassotti fue sancionado de oficio con 20 partidos afuera de las canchas.
Con varios de estos jugadores a tope de su forma llegaron a Estados Unidos 1994 con el mote de candidatos. A pesar de que empataron el primer partido ante Corea del Sur, un empate con Alemania y una victoria ante Bolivia lo depositaron en la segunda fase.
En octavos de final se cruzó con Suiza, a la cual aplastó con un 3 - 0 condunente, comenzando a consolidarse defintivamente como uno de los favoritos a ganar el título.
Su rival por un lugar en semifinales fue Italia. El equipo tano bajo la dirección técnica de Arrigo Sacchi gozaba de una línea defensiva muy fuerte (Maldini y Costacurta era la pareja de centrales), acompañado por grandes jugadores como Dino o Roberto Baggio.
Estos no habían tenido un gran Mundial y llegaron al duelo de cuartos sembrando muchas dudas. Apenas un empate con Noruega y una victoria ante México, los clasificó como uno de los mejores terceros, ya que en la primera fecha habían perdido ante Irlanda.
En octavos se habían medido con Nigeria, que le hizo pasar varias zozobras, pero gracias a un gol de Roberto Baggio llevó el partido a alargue. En la prórroga se acabaron todos los sueños del conjunto africano cuando el delantero anotó el segundo tanto del partido, esta vez de penal.
A pesar de todo lo anteriormente dicho, la selección italiana se plantó bien ante su rival español y le complicó bastante las cosas. Un gol tempranero de Dino Baggio puso las cosas a favor de los tanos, que fieles a su estilo decidieron defenderse de los embates españoles.
En el segundo tiempo, España empató con gol de Caminero y la emoción reinó sobre el estadio de Boston. España fue a buscar la victoria heroica, apostó con todo y tuvo varias chances pero el golero italiano, Gianluca Pagliuca, mantuvo el empate.
Sobre el final del partido un contragolpe permitió a Roberto Baggio quedar mano a mano con Zubizarreta, a quien eludió con facilidad y anotó el gol de la victoria.
Con el partido cuesta arriba, los españoles fueron con mayor ímpetu aún a buscar el empate para ir a la prórroga. En una de las últimas jugadas se instaló la polémica cuando un centro cruzado sobre el área italiana terminó con Luis Enrique en el suelo debido a un presunto codazo del italiano Mauro Tassotti.
Automáticamente todo el equipo español comenzó a protestar la existencia de un penal, pero el juez mantuvo su postura. La imagen de Luis Enrique con sangre cayendo de su nariz mientras le pedía explicaciones al juez fue simbólica para una generación de españoles que sufría la impotencia de no poder definir los grandes campeonatos internacionales.
En semifinales Italia derrotó con claridad a Bulgaria y pasó a la final donde cayó por penales con Brasil. Mientras que Luis Enrique sufrió una triple fractura de caballete nasal, Tassotti fue sancionado de oficio con 20 partidos afuera de las canchas.