¡Wanderful!

Bohemio sensacional, como dice su himno, y además, histórico. Wanderers venció 1 – 0 a El Tanque y se coronó campeón del Clausura y la Anual.

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Sensacional la ruta 5 rumbo a Florida. Sensacional los más de 5000 hinchas bohemios que colmaron el estadio floridense. Sensacional la caravana de regreso, con la copa en la mano. Y sensacional, aunque sufrido, muy sufrido, el equipo en la cancha. El nudo en la garganta se desató con suspenso en el gol de Olivera, pero volvió a aparecer hasta que finalmente se desató con el pitazo final. Wanderers campeón.
 
En el primer tiempo, la historia fue la que en la previa se pensaba: El Tanque bien parado atrás, con dos líneas muy compactas y sin dar espacios a un Wanderers que, con la pelota en su poder, intentaba sin renunciar a su estilo pero no podía.
 
Con Guzmán Pereira como abanderado en el medio, el bohemio buscaba por abajo; la cancha invitaba a hacerlo, pero la férrea marca de los de Moller era más fuerte. Salvo por un par de bolas largas a Blanco, que no logró definir bien, los de Arias estaban atados.
 
Y en ese panorama El Tanque, que parecía olvidarse del arco de enfrente, mostró que había que tener cuidado. Mello se fue por la derecha y sacó un tiro cruzado que Cristóforo, notablemente, contuvo para evitar el gol. Se iba el primer tiempo con un partido trabado, casi sin chances de gol, y con un Wanderers que, con la victoria de Peñarol, perdía una chance bárbara para acercarse al título del Uruguayo.
 
Para el complemento la cosa no cambiaba. El Tanque seguía su plan a la perfección, y Wanderers no le encontraba la vuelta. Aparicio era el estandarte defensivo del fusionado y ni Riolfo, ni Gastón ni Pastorini lograban zafar del muro.
 
Hasta que a los 52’ llegó un córner para Wanderers. Gastón Rodríguez eligió tocar por bajo al área, Guzmán Pereira pivoteó y Maxi Olivera, cerca del vértice del área, logró darle de zurda. La pelota se desvió y con un raro efecto se metió contra el palo más lejano de Nicola Pérez. El gol más feo de su vida, quizá, pero el más gritado también. 1 – 0 bohemio y delirio de más de 5000 almas.
 
Y de ahí en más, del delirio al martirio. Colombino, Díaz y Rivas a la cancha, para conformar una línea de 5 con el pibe Colombino de lateral derecho, tres zagueros y Rivas como lateral. Pastorini y Blanco quedaron muy solos arriba y El Tanque, a puro impulso, se vino arriba, con Gastón Martínez por la banda derecha como abanderado.
 
Un centro del 4, tras pase del ingresado Machado, de buenos minutos, terminó en el pie de Acuña, que solo en el área chica se lo perdió. Los corazones se detuvieron por primera vez. Y por segunda cuando Bueno cortó un centro y casi la manda a guardar en su propio arco.
 
Wanderers no salía del asedio, y de hecho no salió hasta que terminó el partido. Cristóforo se vistió de héroe negándole el gol a Machado, y en el rebote Martín Rivas, cuando la pelota se metía después de pegar en Olivera, la salvó en la línea. Otra vez Acuña, más tarde, no pudo conectar un cabezazo en el área chica, y la última la tuvo Junior Arias, que sacó un bombazo tremendo que Cristóforo, notablemente, mandó al córner.
 
Con uñas y dientes y, como nunca en el torneo, colgado del travesaño, Wanderers aguantó. El partido se terminó y las lágrimas de jugadores e hinchas se fundieron en un festejo histórico. Los únicos que se empañan son los ojos de miles de bohemios, porque a pesar del sufrimiento de este último partido, es un más que merecido campeón.
 
Ahora resta esperar la semifinal ante Danubio, en lo que será la primera definición en la historia del fútbol uruguayo, al menos en el profesionalismo, sin Nacional ni Peñarol. Y si de historia hablamos, Wanderers intentará, por primera vez en la era profesional, sumar una estrella de campeón uruguayo.
 
Ficha del partido:
 
EL TANQUE SISLEY: Nicola Pérez; Sergio Felipe, Bruno Piano, Joaquín Aguirre, Yefferson Moreira; Gastón Martínez, Andrés Aparicio, Jonathan Iglesias (78’ Maximiliano Borges); Alejandro Mello (63’ Gastón Machado); Federico Laens (63’ Junior Arias) y Matías Acuña. DT: Raúl Moller.
 
WANDERERS: Federico Cristóforo; Mauricio Gómez (58’ Emiliano Díaz), Gastón Bueno, Martín Díaz, Maximiliano Olivera; Guzmán Pereira, Santiago Martínez; Gastón Rodríguez (58’ Adrián Colombino), Diego Riolfo (67’ Martín Rivas), Rodrigo Pastorini; y Sergio Blanco. DT: Alfredo Arias.
 
Goles: 52’ Maximiliano Olivera (Wanderers)
 
Amarillas: Mello, Iglesias, Felipe y Aparicio (El Tanque Sisley); Pereira (Wanderers)
 
Jueces: Roberto Silvera, Carlos Pastorino y Raúl Hartwig
 
Cancha: Campeones Olímpicos de Florida