El equipo alemán Borussia Dortmund decidió iniciar una campaña de responsabilidad social en la ciudad. El lema "No hay cerveza para los racistas" fue impreso en un millón de posavasos. Sabiendo lo que les gusta la cerveza a los muchachos alemanes, parece que buscan entrarle al problema por donde más les duele. 

“Borussia Dortmund, el departamento de fans y todos los hinchas del BVB, se hacen responsables de dar un claro paso adelante en contra de la xenofobia y los slogans inhumanos en vez de no escucharlos. Por la tolerancia y un colorido BVB; contra el racismo y la xenofobia”, dijo Reinhard Rauball, presidente del club.

Muchos podemos pensar que hay cosas ya superadas con el tiempo, pero la realidad en Alemania nos demuestra que la capacidad de asombro no tiene límites. La escalada racista y xenófoba, hace temer a las autoridades por los actos violentos y la reaparición de grupos neo nazis.

Por esta razón, el club exige en su campaña que todos los hinchas se comporten de manera respetuosa y sancionará a aquellos que profesen cánticos racistas. Quienes lo hagan deberán pagar las consecuencias y se les prohibirá la entrada al estadio. Otros gestos pasibles de sanción serán el saludo nazi y el grito "Seig Heil!". 

Una demostración muy saludable de parte de Borussia Dortmund, que demuestra que las insitituciones deportivas pueden ser agentes del cambio social, o al menos intentarlo con propuestas, ganas y voluntad.