Uruguay finalizó el campeonato de rugby seven de los Juegos Panamericanos en la cuarta ubicación (ver nota). Tras el partido, PDA tuvo la posibilidad de conversar en el estadio con algunos de los jugadores celestes. 

Rodrigo Silva aseguró que el objetivo estaba cumplido. "Queriamos ganarle a Chile y a Brasil, logrando eso, podríamos apuntar luego a las medallas", expicó. Sin embargo resaltó que las realidades son muy distintas comparando con otras selecciones y que por eso no se pudo subir al podio.

Juan Ormachea coincidió con esta visión. "Perdimos solo contra los profesionales, e incluso a Brasil, que está muy profesionalizado, le supimos ganar", resaltó. Las diferencias entre amateurismo y profesionalismo se notan en el entrenamiento por ejemplo, según explicó el nº3 de los Teros.

Otro punto a destacar es que el rendimiento contra los Estados Unidos mejoró mucho desde el sábado para el domingo. Con respecto a eso, Silva contó lo siguiente: "Más allá del resultado podemos salir de la cancha con la frente en alto. El partido fue disitnto al anterior, metimos mucho más".

Por su parte Ormachea se lamentó por el try recibido a último momento en el primer tiempo. "Si ellos no nos meten ese try era otro partido", aseguró.

Con respecto al espíritu de estos Juegos y a la convivencia en la villa, ambos rugbiers coincidieron en que es algo único. "La verdad que es increíble. No te lo imaginás hasta que estás en la villa con los demás atletas", dijo Rodrigo.

Mientras que Juan sentenció: "Es la primera vez que veo algo así en el sentido de que hay un espíritu de unión. Aunque sean rivales, termina el partido y con todos los chicos hay muy buena onda".

El rugby seven de Uruguay ya perdió una posibilidad de llegar a Río 2016, los primeros JJOO en los que este deporte dirá presente. En aquella ocasión, la final del preolímpico la ganó Argentina en su país.

Ahora los Teros tienen una chance más. En junio del año que viene deberán jugar un repechaje mundial, muy complicado, en el que varios equipos se repartirán un solo boleto. "Me imagino una chance, hay una chance, no estamos muertos", remató Ormachea.