El Tour de France es una competencia tan grande y exigente que incluso algunos de los ciclistas que no se visten de amarillo en París pueden considerarse ganadores, o por lo menos tener motivos para alegrarse.

André Greipel, con sus cuatro etapas ganadas, evidencia que fue el mejor sprinter por destrozo de este Tour. Una y otra vez se impuso ante Cavendish (salvo en la séptima etapa donde ganó el británico), Coquard o Kristoff.

Peter Sagan vuelve a ganar el maillot verde de puntos, otra vez sin ganar una sola etapa, pero lo gana por haber peleado la mayoría de los sprints finales y haberse metido en alguna que otra fuga, aunque sabe a poco para un ciclista de su talla.

Alejandro Valverde logra meterse en el podio y, aunque tiene un palmarés de lo más cargado, las lágrimas derramadas en el Alpe d'Huez dejan claro que es un logro muy importante para el ciclista español, sabiendo que el año pasado dejó escapar quizá la mejor chance de su vida para ganar un Tour.

Esa fue otra de las conclusiones que dejó este Tour. El 2014 fue una extraña posibilidad: Nairo Quintana no lo corrió, mientras Froome y Contador quedaron fuera luego de importantes caídas. Los tres primeros ciclistas del año pasado: Nibali, Peraud y Pinot, fueron este año 4°, 61° y 16° respectivamente.

Nairo Quintana fue segundo y se llevó el maillot blanco de líder entre los menores de 25 años por segunda vez en su carrera (y última, por su edad).

El colombiano volvió a quedar detrás de Froome, como en el Tour 2013, pero a menor distancia. Fueron solamente 1:12 lo que lo separaron del británico.

Tiempo similar al que perdió aquel segundo día en Utrecht, cuando el viento de costado hizo que se crearan abanicos de ciclistas y Quintana quedó cortado.

En esa etapa perdió casi un minuto y medio. Nairo fue el más fuerte en los Alpes y le recortó varios minutos al líder, pero pagó ese mal día en Holanda. Igual queda claro que en carreras con mucha montaña siempre será candidato.

Chris Froome ganó su segundo Tour porque fue el más fuerte en la segunda semana de los Pirineos, porque pegó primero cuando en el primer final en alto, en la décima etapa, le sacó más de un minuto a Nairo, y -sobre todo- porque tuvo un equipo que lo respaldó durante la última semana.

Froome fue clave en el Tour 2012 que ganó su compañero Wiggins, y en esta ocasión tuvo a Porte haciendo el trabajo que él supo hacer. Pero también Geraint Thomas o Wout Poels supieron sostener a su líder durante muchos ascensos.

El ciclista nacido en Kenia pero de nacionalidad británica es muy completo. A pesar de que no hizo una gran contrarreloj individual, donde generalmente le saca diferencia a los otros candidatos a la general, supo pegar primero y luego dedicarse a defender y administrar la carrera, algo que el Sky sabe hacer muy bien.

Vincenzo Nibali fue cuarto y quizá tenga que correr la Vuelta a España para tratar de salvar una temporada donde se jugaba todo al Tour de France. Alberto Contador hizo lo que pudo, pero correr Giro y Tour el mismo año (y ser protagonista) es una tarea de las más complicadas.

El francés mejor ubicado fue Romain Bardet (9°), quien también ganó la etapa con final en St Jean de Maurienne, una de las tres ganadas por los locales (las otras fueron Vuillermoz y Pinot).

Posiciones finales del Tour de France 2015:


Con el Tour finalizado, el ranking mundial individual lo sigue liderando Valverde con 482 puntos, seguido ahora por Froome con 422 y Alberto Contador con 407. El mejor latino es Nairo Quintana en la cuarta ubicación con 365 puntos.

En el ranking por equipos, Sky (1219), Movistar (1092) y Katusha (1038) tienen varios puntos de ventajas sobre el resto. El ranking por equipos es importante porque los peores rankeados podrían tener problemas para mantener su categoría en caso de que otros equipos quieran obtener la licencia World Tour.