El plato fuerte
Baurú y Real Madrid se verán las caras en San Pablo el viernes 25 y el domingo 27, para definir al nuevo campeón intercontinental de clubes.
Foto: FIBA Américas
En dos preciosos partidos que se jugarán en San Pablo, Baurú y Real Madrid definirán quien es el nuevo campeón intercontinental FIBA. El equipo español ya está en suelo brasilero y buscará devolver el trofeo al viejo continente.
Desde que se retomó la disputa de esta copa, en el año 2013, es la tercera vez que el campeón de la Euroliga se enfrentará al campeón de la Liga de las Américas. Las dos oportunidades anteriores también se jugaron en Brasil (2013 - San Pablo, 2014 - Río de Janeiro) y tuvieron las victorias de Olympiacos y Flamengo, respectivamente.
Esta edición, tendrá la particularidad de que retorna el equipo más campeón, el Real Madrid. El club español ganó tres copas intercontinentales consecutivas (1976, 77 y 78) y un mundial de clubes (1981), antes de que estas competencias dejaran de realizarse en 1996 para luego retomarse dos años atrás.
En su llegada a San Pablo, el argentino Andrés "Chapu" Nocioni, mejor jugador del final four de la Euroliga, aseguró que es un duro reto. "Ahora venimos con la chapa de campeones europeos, con el equipo que ha sido imbatible toda la temporada pasada y tenemos que asumir la responsabilidad", explicó el argentino, consciente de lo que les espera.
Por su parte el DT del equipo merengue, Pablo Laso, aseguró que Baurú no será un rival fácil y hará sentir el peso de la localía. “Jugar allí será complicado porque es una cancha grande y habrá mucho ambiente. Sabemos la importancia que se le da a la Copa Intercontinental en Brasil desde que el Real Madrid fue campeón de la Euroliga. Para nosotros también es importante”, tiró.
En Brasil, reconocen que no será fácil poder retener el trofeo en nuestro continente, pero igual son optimistas. El pivot Rafael Hettsheimeir lo explicó así: "Tenemos que hacer dos partidos perfectos. Yo sé que es difícil, pero hay que centrarse en el juego perfecto, tener pérdidas lo menos posible, ese es el detalle que realmente va a hacer la diferencia. El Real Madrid es un equipo que pierde poco, así que tenemos que jugar juntos para conseguir este título".
La forma de definición de esta copa es por partidos ganados. Si al término de dos partidos, hay una victoria por bando, se desempatará por diferencia de puntos. Los partidos se jugarán el viernes 25 a las 21 horas y el domingo 27 a mediodía.
Desde que se retomó la disputa de esta copa, en el año 2013, es la tercera vez que el campeón de la Euroliga se enfrentará al campeón de la Liga de las Américas. Las dos oportunidades anteriores también se jugaron en Brasil (2013 - San Pablo, 2014 - Río de Janeiro) y tuvieron las victorias de Olympiacos y Flamengo, respectivamente.
Esta edición, tendrá la particularidad de que retorna el equipo más campeón, el Real Madrid. El club español ganó tres copas intercontinentales consecutivas (1976, 77 y 78) y un mundial de clubes (1981), antes de que estas competencias dejaran de realizarse en 1996 para luego retomarse dos años atrás.
En su llegada a San Pablo, el argentino Andrés "Chapu" Nocioni, mejor jugador del final four de la Euroliga, aseguró que es un duro reto. "Ahora venimos con la chapa de campeones europeos, con el equipo que ha sido imbatible toda la temporada pasada y tenemos que asumir la responsabilidad", explicó el argentino, consciente de lo que les espera.
Por su parte el DT del equipo merengue, Pablo Laso, aseguró que Baurú no será un rival fácil y hará sentir el peso de la localía. “Jugar allí será complicado porque es una cancha grande y habrá mucho ambiente. Sabemos la importancia que se le da a la Copa Intercontinental en Brasil desde que el Real Madrid fue campeón de la Euroliga. Para nosotros también es importante”, tiró.
En Brasil, reconocen que no será fácil poder retener el trofeo en nuestro continente, pero igual son optimistas. El pivot Rafael Hettsheimeir lo explicó así: "Tenemos que hacer dos partidos perfectos. Yo sé que es difícil, pero hay que centrarse en el juego perfecto, tener pérdidas lo menos posible, ese es el detalle que realmente va a hacer la diferencia. El Real Madrid es un equipo que pierde poco, así que tenemos que jugar juntos para conseguir este título".
La forma de definición de esta copa es por partidos ganados. Si al término de dos partidos, hay una victoria por bando, se desempatará por diferencia de puntos. Los partidos se jugarán el viernes 25 a las 21 horas y el domingo 27 a mediodía.