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Uruguay estuvo fuera de sintonía y no repitió lo hecho contra Brasil. La celeste perdió frente a Panamá.
Foto: FIBA Américas
Uruguay no repitió lo hecho en el primer partido frente a Brasil. Esta vez, tras dominar el primer tiempo y no conseguir una buena ventaja, las desatenciones defensivas en la segunda mitad le costaron una derrota contra Panamá que terminó dominando por 78 - 71.
A priori, este era el equipo a vencer en el grupo, y una nueva victoria hubiera dejado a Uruguay muy bien posicionado y ya virtualmente clasificado a segunda fase. Sin embargo la historia no se repitió.
El primer tiempo, sin ser una máquina, Uruguay lo dominó y tuvo jugadores como Fitipaldo con 15 puntos y Borsellino llegando desde el banco con 7 puntos, que mantuvieron al equipo celeste arriba. Los aportes de estos dos decayeron en la segunda mitad y ni Osimani ni Aguiar pudieron mantener el ritmo ofensivo.
Además la defensa celeste flaqueó y el equipo centroamericano anotó 44 puntos en los últimos dos cuartos. Ni la zona puesta por Capelli, ni algunos pasajes de tibia presión, pudieron detener a Panamá. El rival cambió rotundamente su estilo de juego en el entretiempo. Luego de comenzar con mucho apuro y tiros muy rápidos que le daban comodidad a Uruguay en la defensa, la segunda mitad la jugaron con inteligencia.
Panamá movió la pelota, aprovechó las ventajas donde estuvieran (Pomare, Hicks y Lloreda a la cabeza), y comenzó a seleccionar muy buenos tiros. Incluso errando, la movilidad y agresividad del ataque panameño en la segunda mitad, generó el dominio del rebote ofensivo. El equipo blanco finalizó con 16 rebotes de ataque y 12 puntos provenientes de esos rebotes.
Uruguay repartió su goleo, pero más como consecuencia de no encontrar un camino claro para anotar, que como virtud colectiva. Fitipaldo terminó con 18 puntos, liderando la estadística. Tanto Aguiar, como Calfani, Osimani y Borsellino sumaron 11 puntos cada uno. En Panamá Hicks puso 21 tantos y Pomare 17.
Estadísticas completas
Uruguay descansará el miércoles y jugará nuevamente el jueves contra República Dominicana, a las 14 horas de nuestro país.
Mejores jugadas del partido
A priori, este era el equipo a vencer en el grupo, y una nueva victoria hubiera dejado a Uruguay muy bien posicionado y ya virtualmente clasificado a segunda fase. Sin embargo la historia no se repitió.
El primer tiempo, sin ser una máquina, Uruguay lo dominó y tuvo jugadores como Fitipaldo con 15 puntos y Borsellino llegando desde el banco con 7 puntos, que mantuvieron al equipo celeste arriba. Los aportes de estos dos decayeron en la segunda mitad y ni Osimani ni Aguiar pudieron mantener el ritmo ofensivo.
Además la defensa celeste flaqueó y el equipo centroamericano anotó 44 puntos en los últimos dos cuartos. Ni la zona puesta por Capelli, ni algunos pasajes de tibia presión, pudieron detener a Panamá. El rival cambió rotundamente su estilo de juego en el entretiempo. Luego de comenzar con mucho apuro y tiros muy rápidos que le daban comodidad a Uruguay en la defensa, la segunda mitad la jugaron con inteligencia.
Panamá movió la pelota, aprovechó las ventajas donde estuvieran (Pomare, Hicks y Lloreda a la cabeza), y comenzó a seleccionar muy buenos tiros. Incluso errando, la movilidad y agresividad del ataque panameño en la segunda mitad, generó el dominio del rebote ofensivo. El equipo blanco finalizó con 16 rebotes de ataque y 12 puntos provenientes de esos rebotes.
Uruguay repartió su goleo, pero más como consecuencia de no encontrar un camino claro para anotar, que como virtud colectiva. Fitipaldo terminó con 18 puntos, liderando la estadística. Tanto Aguiar, como Calfani, Osimani y Borsellino sumaron 11 puntos cada uno. En Panamá Hicks puso 21 tantos y Pomare 17.
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Uruguay descansará el miércoles y jugará nuevamente el jueves contra República Dominicana, a las 14 horas de nuestro país.
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