"Me quería ir de la NBA"
Esteban Batista contó que durante su paso por la NBA a veces llegaba a su casa, se ponía a llorar y pensaba: "¿Qué mierda hago acá?".
Esteban Batista, único jugador uruguayo en haber jugado en la NBA, contó que durante las dos temporadas que estuvo en Estados Unidos, pasó buenas pero también malas, y al final se quiso ir. En su visita al programa radial La Venganza de los Perdedores -que se emite por mediarte.com.uy- el basquetbolista uruguayo concedió una larga entrevista en la que, entre bromas y anécdotas, reveló varios aspectos de su vida y su carrera profesional.
La NBA
Recordó que apenas llegó a Atlanta para jugar con los Hawks (a los que defendió entre 2005 y 2007), lo sorprendieron los lujos con los que contaban. "Cuando llegué me estaban esperando en una limusina", dijo. Además, durante la temporada se quedaban en los mejores hoteles y viajaban en aviones privados desde aeropuertos de carga a los que llegaban y estacionaban el auto al lado del avión. Sus compañeros se daban grandes lujos: "Uno tenía siete autos, otro casa con ascensor, otro casa con cine; una locura".
Sin embargo no todas fueron buenas. Batista reveló que durante su segundo año en la liga se quería ir. No importó que Boston le ofreciera un contrato para la temporada siguiente, en la que los Celtics resultaron campeones. Tampoco importó que si permanecía una temporada más en la liga, se aseguraría cobrar una jubilación luego de su retiro. "En aquel momento estaba cansado y quería jugar; no estaba tan calculador como de repente estoy ahora", reconoció.
"Habrá decisiones buenas y otras que no tanto (...) me fui sabiendo lo que quería. Había cumplido el sueño del pibe pero no era el juego que mejor se adaptaba a mí. Mucha gente me decía que me hubiese quedado en Boston y salía campeón ese año, pero seguramente hubiese jugado muy poco y no era algo que me llenara como jugador, ni como persona", reflexionó el uruguayo.
Tal vez la NBA haya sido "el sueño del pibe" como Batista admitió, pero la segunda temporada en aquella liga no fue fácil para él: "En el segundo año de la NBA, a veces llegaba a casa y me ponía a llorar y decía -¿Qué mierda hago acá? Me quiero ir-. A veces de afuera parece mucho más fácil o pensamos distinto de lo que uno realmente está viviendo".
Viajes y amigos
De sus años recorriendo el mundo, guarda algunos recuerdos como los calzados de grandes estrellas: Shaquille O’Neal, Ginobili, Vince Carter, Elton Brand, Ben Wallace, Billups, Garnett, Pierce, LeBron James, Ray Allen. “No sean rastrillos, no me vayan a chorear”, bromeó Batista antes de revelar su interesante colección. Además en Europa consiguió camisetas de Navarro, Huertas, Varejao, Scola y Arroyo. Sin embargo Kirilenko, pese a ser muy simpático y conversar con él, le negó la camiseta dos veces. “Las dos veces me encajó la misma”, protestó Batista.
También conserva amistad con grandes basquetbolistas. Si bien solamente jugó con él un año, asegura que Marcelinho Huertas es con quien mejor se entendía. “Pensábamos exactamente de la misma manera”, explicó Esteban y contó que, este mes, Huertas visitó nuestro país y pudieron compartir algunas actividades juntos.
Otro con quien tiene amistad y estuvo en Uruguay es Josh Childress, compañero en Atlanta. “Lo traje a Uruguay y estuvo en Cimarrón”, reveló sobre las salidas nocturnas del estadounidense en nuestro país. “Era pirata, pirata”, dijo Batista entre risas, tras recordar que Childress era el compañero que le escribía los mensajes en inglés para conquistar mujeres por las redes sociales.
“Tenía my space, que era la herramienta para trillar. El moreno me había hecho una cartita de presentación que decía que estaba acá y que cualquier día podíamos salir a tomar algo. Y yo copiaba y pegaba, copiaba y pegaba”, confesó el uruguayo. Y agregó: “Después me contestaban y lo llamaba a él para que contestara y remaba. Yo robaba con el tema de la NBA, tenía un par de fotitos jugando y ta”.
Como hombre de mundo, tras vivir en Estados Unidos y varios países de Europa, Batista dejó una conclusión fundamental, aportando conocimiento para que las nuevas generaciones puedan disfrutar: Las mujeres más lindas según Esteban, están en Grecia.
La selección
El pivot celeste tocó el tema de por qué no jugó el torneo Preolímpico FIBA Américas en México recientemente. "La renuncia en mi caso es porque existe la posibilidad de perder el contrato en China (donde jugará la próxima temporada). Si pasaba algo nadie se iba a poder hacer cargo. Ya corrí ese riesgo antes y esta vez preferí no correrlo", explicó.
De todas formas no disfruta el estar lejos del seleccionado uruguayo: "Es una situación incómoda porque obviamente quería jugar en Uruguay. Me cuesta mucho ver los partidos ahora, porque me gustaría estar ahí. A veces pienso por qué no fui, pero con la cabeza fría entiendo que no tiene sustento".
A su vez, Batista argumentó contra la campaña que a su entender se hace desde el periodismo, perjudicando a los jugadores: "Acá si no vas una vez a la selección sos un culo roto, un desertor, un vende patria. En otros países pasa y nadie dice nada. Acá pasa y los periodistas se encargan de seguir manijeando (...) quieren vender el tirarse a trancar con la cabeza y matarse. Eso de lo ganamos con garra para mí no existe más".
Por último, Esteban reveló que le gustaría volver a Welcome antes del retiro. "Mi idea es tratar de cerrar el círculo donde lo empecé", aseguró.
Escuchá la entrevista completa a Esteban Batista
La NBA
Recordó que apenas llegó a Atlanta para jugar con los Hawks (a los que defendió entre 2005 y 2007), lo sorprendieron los lujos con los que contaban. "Cuando llegué me estaban esperando en una limusina", dijo. Además, durante la temporada se quedaban en los mejores hoteles y viajaban en aviones privados desde aeropuertos de carga a los que llegaban y estacionaban el auto al lado del avión. Sus compañeros se daban grandes lujos: "Uno tenía siete autos, otro casa con ascensor, otro casa con cine; una locura".
Sin embargo no todas fueron buenas. Batista reveló que durante su segundo año en la liga se quería ir. No importó que Boston le ofreciera un contrato para la temporada siguiente, en la que los Celtics resultaron campeones. Tampoco importó que si permanecía una temporada más en la liga, se aseguraría cobrar una jubilación luego de su retiro. "En aquel momento estaba cansado y quería jugar; no estaba tan calculador como de repente estoy ahora", reconoció.
"Habrá decisiones buenas y otras que no tanto (...) me fui sabiendo lo que quería. Había cumplido el sueño del pibe pero no era el juego que mejor se adaptaba a mí. Mucha gente me decía que me hubiese quedado en Boston y salía campeón ese año, pero seguramente hubiese jugado muy poco y no era algo que me llenara como jugador, ni como persona", reflexionó el uruguayo.
Tal vez la NBA haya sido "el sueño del pibe" como Batista admitió, pero la segunda temporada en aquella liga no fue fácil para él: "En el segundo año de la NBA, a veces llegaba a casa y me ponía a llorar y decía -¿Qué mierda hago acá? Me quiero ir-. A veces de afuera parece mucho más fácil o pensamos distinto de lo que uno realmente está viviendo".
Viajes y amigos
De sus años recorriendo el mundo, guarda algunos recuerdos como los calzados de grandes estrellas: Shaquille O’Neal, Ginobili, Vince Carter, Elton Brand, Ben Wallace, Billups, Garnett, Pierce, LeBron James, Ray Allen. “No sean rastrillos, no me vayan a chorear”, bromeó Batista antes de revelar su interesante colección. Además en Europa consiguió camisetas de Navarro, Huertas, Varejao, Scola y Arroyo. Sin embargo Kirilenko, pese a ser muy simpático y conversar con él, le negó la camiseta dos veces. “Las dos veces me encajó la misma”, protestó Batista.
También conserva amistad con grandes basquetbolistas. Si bien solamente jugó con él un año, asegura que Marcelinho Huertas es con quien mejor se entendía. “Pensábamos exactamente de la misma manera”, explicó Esteban y contó que, este mes, Huertas visitó nuestro país y pudieron compartir algunas actividades juntos.
Otro con quien tiene amistad y estuvo en Uruguay es Josh Childress, compañero en Atlanta. “Lo traje a Uruguay y estuvo en Cimarrón”, reveló sobre las salidas nocturnas del estadounidense en nuestro país. “Era pirata, pirata”, dijo Batista entre risas, tras recordar que Childress era el compañero que le escribía los mensajes en inglés para conquistar mujeres por las redes sociales.
“Tenía my space, que era la herramienta para trillar. El moreno me había hecho una cartita de presentación que decía que estaba acá y que cualquier día podíamos salir a tomar algo. Y yo copiaba y pegaba, copiaba y pegaba”, confesó el uruguayo. Y agregó: “Después me contestaban y lo llamaba a él para que contestara y remaba. Yo robaba con el tema de la NBA, tenía un par de fotitos jugando y ta”.
Como hombre de mundo, tras vivir en Estados Unidos y varios países de Europa, Batista dejó una conclusión fundamental, aportando conocimiento para que las nuevas generaciones puedan disfrutar: Las mujeres más lindas según Esteban, están en Grecia.
La selección
El pivot celeste tocó el tema de por qué no jugó el torneo Preolímpico FIBA Américas en México recientemente. "La renuncia en mi caso es porque existe la posibilidad de perder el contrato en China (donde jugará la próxima temporada). Si pasaba algo nadie se iba a poder hacer cargo. Ya corrí ese riesgo antes y esta vez preferí no correrlo", explicó.
De todas formas no disfruta el estar lejos del seleccionado uruguayo: "Es una situación incómoda porque obviamente quería jugar en Uruguay. Me cuesta mucho ver los partidos ahora, porque me gustaría estar ahí. A veces pienso por qué no fui, pero con la cabeza fría entiendo que no tiene sustento".
A su vez, Batista argumentó contra la campaña que a su entender se hace desde el periodismo, perjudicando a los jugadores: "Acá si no vas una vez a la selección sos un culo roto, un desertor, un vende patria. En otros países pasa y nadie dice nada. Acá pasa y los periodistas se encargan de seguir manijeando (...) quieren vender el tirarse a trancar con la cabeza y matarse. Eso de lo ganamos con garra para mí no existe más".
Por último, Esteban reveló que le gustaría volver a Welcome antes del retiro. "Mi idea es tratar de cerrar el círculo donde lo empecé", aseguró.
Escuchá la entrevista completa a Esteban Batista
