“Me sentí juzgado”. Esas fueron las primeras palabras de Andrés Silva al ser consultado sobre cómo vivió este proceso que todavía sigue adelante tras un control antidopaje adverso.

Luego de que el Laboratorio Tecnológico de Pando analizara el suplemento vitamínico que el atleta ingirió y detectara la presencia de “6-oxo androsten”, misma sustancia que apareció en un control en junio pasado, la Comisión de Disciplina de la Organización Nacional Antidopaje (ONAU) pidió que se estudiara el mismo suplemento pero tomando una muestra “virgen”, de un frasco sin abrir, para corroborar que se repitiera el resultado.

Solo falta la confirmación oficial del laboratorio, pero fuentes del entorno del deportista manejan la información de que el nuevo frasco del suplemento vitamínico estaba también contaminado. Se induciría por lo tanto que todos los productos del lote del que provenía el complemento consumido por Silva, están contaminados. Este no es un dato más, ya que confirmaría la versión de la defensa y sería un gran atenuante, clave en la resolución del proceso. 

“En el momento que sucedió todo esto, fue muy difícil para mí”, contó el atleta quien considera que se manejó muy mal la situación. Tras un prolongado tiempo sin hablar con la prensa, Andrés Silva rompió el silencio y concedió una entrevista a PDA. 

"Los medios generaron una expectativa de que todo era muy drástico, pese a que yo llevo casi 18 años en esto, sin ninguna mancha, con una conducta intachable. Me pareció que fue algo agresivo para la imagen de un deportista, afectando a familia, amigos, colegas y empresas que están detrás mío desde hace tanto tiempo”, expresó con enfado.

Silva explicó que sufrió de inmediato la condena. “El mensaje que se transmitió fue mal interpretado por las personas, dejando una mancha en mi carrera”. Como principal afectado, criticó el proceder del periodismo: “Hay gente bien y de la otra, eso siempre va a existir, pero me sentí juzgado desde el primer momento. Miraba el informativo y se hablaba de un examen positivo, de que me iban a suspender por años y se me acababa la carrera. Todo eso se decía cuando la sustancia que apareció ni siquiera mejora el rendimiento deportivo y nunca hubo intención de mi parte de ingerirla. Es un producto contaminado que fue comprado en una farmacia, como cualquiera puede comprar un suplemento o algo para el dolor de cabeza”. 

En opinión de Andrés Silva, no solo fue juzgado de forma prematura por los medios de comunicación. Esta situación complicada que vive tocó de cerca a sus relaciones personales y profesionales. “Por momentos me sentí agredido y en realidad me sirvió para saber quién está cerca, confía, apoya y quiénes no", aseguró. "Algunos son máscaras y otros mascaritas, por lo que de futuro hay que saber cómo manejarse con los que no estuvieron y desconfiaron del proceso y de lo que estaba pasando. Hay gente que pensé que conocía; lo que pasó me sirvió para darme cuenta de que no es así”. 

Ahora espera la confirmación del resultado tras el análisis de la muestra “virgen” del suplemento. Entonces la ONAU dará el dictamen final. “Estamos cerca del cierre del proceso, porque los testigos declararon, se habló lo que se tenía que hablar, se planteó la defensa en el momento oportuno y es una cuestión de días. Esto me interesa mucho, porque ya estoy entrenando hace cuatro semanas y media con miras al año que viene, y no cuento con un objetivo claro por depender de esta resolución”. 

Por último en referencia a lo deportivo, Silva señaló: “A veces las cosas suceden por algo. Siempre estoy presionado por los tiempos y las marcas y si hay que hacer un esfuerzo más para clasificar a los Juegos Olímpicos lo voy a hacer. Venimos de un buen descanso, pero ya estamos entrenando a full para preparar los Juegos Iberoamericanos de Río y  una gira por Europa”.

Los Iberoamericanos serán en la misma pista donde se realizarán los Juegos Olímpicos, y tanto allí como en Europa, Silva aspira a conseguir las marcas que lo clasifiquen a Río 2016.