La primera vez fue algo trivial, después de la segunda y la tercera pasó a ser algo peculiar, a partir de la cuarta empezó a llamar mucho la atención, pero ahora, que ya van más de diez, ya estamos temiendo que sea real.

Nos referimos a la maldición de Aaron Ramsey, el volante galés de Arsenal que "mata" famosos con sus goles. Suele suceder que, horas después de que él convierte un gol, fallece una personalidad famosa.

Todo comenzó en el 2011, cuando Ramsey le hizo un gol a Manchester United y al día siguiente se anunciaba la muerte de Osama Bin Laden. Al poco tiempo pasó lo mismo con Steve Jobs y casi enseguida volvió a ocurrir con Muamar Al Gadafi.

Con el transcurrir de los años siguieron los goles de Ramsey y, casi inmediatamente después, los fallecimientos de Whitney Houston, Chavela Vargas, Bebo Valdés, Jorge Rafael Videla, Ken Norton, Paul Walker, Robin Williams y Günter Grass, por nombrar solo algunos.

En el arranque del 2016, cuando la maldición parecía apaciguarse, se reflotó con todo: primero David Bowie y a los pocos días el actor Alan Rickman (el que hacía de Snape en Harry Potter), ambos fallecidos tras goles del galés.

Los más escépticos se aferran a que también ha habido varios goles de Ramsey que no precipitaron la muerte de un famoso, y que las que ocurrieron fueron mera casualidad. Otros, los más supersticiosos, sufren cada vez que juega Arsenal y rezan para que este galés maldito no la emboque.