Se hicieron públicas las contraprestaciones que la Intendencia de Montevideo le exige al Club Atlético Peñarol para renovar la habilitación del Campeón del Siglo luego de dos años.

PDA, en un gran esfuerzo de investigación, logró hackear la computadora desde donde salió el mail (la contraseña era AguanteAdeom1234) y te cuenta las otras prestaciones que no salieron a la luz.

Peñarol deberá lograr:

Construir una cancha de basket, una pista de patinaje y una sucursal de Carlos Gutiérrez en el estacionamiento.

Un centro de primeros auxilios donde Guruceaga pueda atender jugadores tranquilamente.

Que Nahitan Nández no reciba tarjetas amarillas en dos partidos seguidos (una cláusula considerada abusiva por varios dirigentes mirasoles).

Un salón multiuso donde los vecinos de la zona (¿hay vecinos en la zona?) asistan a clases de lenguaje con Luis Aguiar; peluquería con Marcel Novick; lógica, filosofía y pensamiento deductivo con Peñarol Inteligencia; y canto, reggaeton y ortodoncia con el Lolo Estoyanoff.

Una pista de 100 metros llanos para que Luque pueda correr sin tener que doblar ni tirar un centro.

Una zona para practicar lanzamiento de butaca.

Un pulmón en la sala de conferencias de prensa para que periodistas de Tenfield y canal 4 no se crucen.

Un dormitorio para que Marcos Lacaze pueda dormir tranquilamente y no tenga que trasladarse cada vez que Peñarol entrene o juegue.

Una antena que inhabilite la señal de celular luego de cada derrota, para proteger la fuente laboral de los entrenadores.

Un consulado de Panamá.