Danubio y Defensor pelearán hasta el final por el dudoso honor de haber sido la sorpresa negativa de la temporada. Ambos estuvieron lejos de pelear posiciones de copa internacional y tienen una perspectiva clara de aparecer en la Fatídica la próxima temporada.

En el caso de Danubio, luego de un Apertura correcto, tuvo un Clausura para el olvido. El franjeado ganó en la primera fecha y no lo hizo más. Este semestre vio como la mala campaña se comió dos técnicos: Luis González y Pablo Gaglianone. El año futbolístico vio a Danubio comenzar con Jorge Castelli, que sucedía a Leo Ramos, técnico campeón uruguayo.

Tres entrenadores durante un año en que los resultados no se dieron, y por eso la dirigencia decidió finalizar el torneo y comenzar lo que viene con una fórmula conocida y exitosa.

Por eso, a menos de un año de su partida, Leonardo Ramos volvió a lugar en donde logró lo que todos sueñan y muy pocos logran: salir campeón con el equipo del que uno es hincha. Y en el futbol uruguayo ser campeón con una institución en desarrollo es doble o triple mérito.

Del triunfo ante Liverpool por goleada y luego de diez partidos sin conocer la victoria, de lo que pasó y lo que se viene en Danubio y de su experiencia en Chile, Leo Ramos conversó con PDA.

¿Cómo viste el partido? Un 3 a 0 contundente...
Estoy contentísimo porque el equipo mejoró mucho. Tuvimos pocos días de entrenamiento y fue más bien un "refresca memoria" de lo que hicimos con los muchachos en nuestra primera etapa. También hicimos hincapié en algunas cosas que para nosotros son importantes. Y hay otras que no se trabajan pero igual laS pedimos porque deben estar a flor de piel, como la actitud.

¿La actitud es lo más urgente a recuperar en este final del Clausura? Se vio a un Danubio con mucha intensidad.
Sí, y tenemos que seguir apuntando a eso porque hay jugadores de muy buen pie a los que hay que agregarle otro tipo de cosas. Hoy sacaron todo eso que tienen dentro y por eso creo que se jugó muy bien. Cuando tuvo que aguantar, aguantó, cuando hubo que meter se metió y cuando hubo que jugar, jugamos.

Tus llegadas al equipo siempre son con un Danubio que empieza a complicarse en el descenso...
Es que es muy difícil que traigan a un técnico cuando el equipo está por salir campeón. Esta vuelta es distinta porque aquello fue nuevo y esto es como nunca haberme ido porque conozco al club, conozco a muchos de los chicos y los que no conocía personalmente los tenía visto de inferiores. Tenemos un plus con respecto a cualquier otro entrenador.

¿Tenías previsto volver tan pronto?
Un poco sí y un poco no, pero las dos partes queríamos la vuelta. Yo soy hincha de este club, y uno siempre quiere volver a lo que considera su casa.

La última vez Danubio se dejaba ver en la tabla del descenso y lo terminaste sacando campeón. ¿Soñas con el mismo final que en el 2014?
Como decía Mostaza Merlo, paso a paso.

Pero la última te tenías fe para campeón y tenías razón...
Bueno, pero había pasado más de la mitad del campeonato y el equipo me demostraba cada fin de semana que estaba para cosas importantes, no lo decía para vender humo o porque estuviera loco. Ahora recién estoy llegando, te repito, paso a paso.

La hinchada también te pide ser campeón.
En un club como este la mentalidad siempre debe ser la de pelear lo más arriba posible.

¿Qué sentiste cuando te ovacionaron?
Tengo un aprecio muy grande por la hinchada de Danubio, y ellos saben que además soy un hincha más. Eso ayuda muchísimo.

¿Qué podés contar de tu experiencia en Chile con Union La Calera?
¿En serio me vas a hacer hablar de eso?

En números fríos, te fue mal...
Me fue mal porque terminamos descendiendo, pero yo agarré el equipo faltando ocho partidos para el final del campeonato y la cosa ya estaba juzgada. Hasta que fuimos nosotros La Calera tenía 9 goles a favor y 45 en contra en un torneo y medio, y en medio torneo hicimos 13 goles, aunque en defensa no le pudimos encontrar la vuelta porque seguimos recibiendo muchos goles.

Viste que de lo malo siempre se saca algo positivo. ¿Pensás que algo de tu experiencia en Chile podes emplearlo acá?
La verdad... absolutamente nada.