Nole toca la corona
Murray derrotó a "Nole" Djokovic y cerró la temporada como nº1.
Después de otra semana de ensueño, y ante su público, Andy Murray festejó por partida doble y se quedó con el Masters de fin de año, ratificando su status de número uno del mundo. En la final venció a Novak Djokovic, quien solo fue una sombra del tenista imbatible que supo ser.
Andy Murray se coronó este domingo como el nuevo campeón del Masters de Londres, luego de derrotar en el match decisivo al serbio Novak Djokovic con parciales de 6-3 y 6-4. De esta forma, el escocés cerró el año como el número uno del ranking mundial, posición que había alcanzado por primera vez en su carrera hace dos semanas atrás en el torneo de Paris-Bercy. El ganador de la final le puso el broche de oro a una temporada inolvidable que redondeó con su noveno título del 2016.
En una hora y 42 minutos de juego, Andy se sacó de encima sin mayores inconvenientes a un "Nole" que estuvo demasiado errático como para recuperar el lugar de honor perdido hace 15 días.
De esta forma, el flamante monarca de las raquetas reaparecerá en el 2017 con un invicto de 24 partidos sobre sus hombros; racha que comenzó en Pekín y aún continúa luego de finalizado el último certamen del año.
La cima del planeta tenis estaba en juego y todo parecía estar a pedir de Djokovic, por cómo llegaban ambos desde el punto de vista físico. Mientras el serbio había estado en cancha solo 1 hora y 6 minutos frente al japonés Nishikori en semifinales, el británico de 29 años jugó el partido más largo en la historia del Masters frente al canadiense Milos Raonic. Una maratón de 3 horas y 38 minutos que lo dejaba malherido de cara a lo que prometía ser un cotejo hiper complicado.
Sin embargo, en la final fue el propio "Nole" quien allanó el camino del escocés, cometiendo la cantidad inusual de 30 errores no forzados y ratificando una vez más que su confianza ya no es la misma de aquel competidor invencible que nos maravilló desde el 2014 hasta Roland Garros de este año.
Murray no exhibió el mejor nivel de su vida, ni mucho menos, pero la regularidad (15 errores, la mitad de su oponente) y el contragolpe letal al que nos tiene acostumbrados fueron suficientes para terminar con las esperanzas de un rival totalmente desconocido.
Como viene sucediendo a lo largo de toda la temporada en canchas de carpeta y bajo techo, el gran arma de Andy Murray fue su primer saque ya que ganó el 84% de los puntos jugados; lo que significó la suma de 27 puntos ganados en 32 disputados.
Djokovic no pudo alcanzar al suizo Roger Federer como máximo ganador del torneo de maestros y se quedó con cinco conquistas en su haber. Por su parte, el escocés concretó todo lo que venía insinuando en los últimos años y abandonó finalmente su eterno status de número 2, para ponerse la corona de Rey que le había sido tan esquiva a lo largo de estos últimos tiempos.
Murray, quien cosechó 12685 puntos en el ranking (905 más que el serbio), es el primer tenista diferente a Roger Federer, Rafael Nadal o Novak Djokovic que termina la temporada subido al pedestal desde el año 2003, cuando lo había conseguido otro Andy, de apellido Roddick.
El británico llegó a 44 títulos en su carrera y termina este extenuante 2016 con un impresionante record de 78 partidos ganados de 87 posibles. Algunos ya hablan de una nueva era; otros preferimos ser más cautelosos y estamos a la espera de saber si ese flaco desgarbado y boca sucia que ayer tocó el cielo con las manos, mañana logrará sostenerse y perdurar en lo más alto.
Por lo pronto el objetivo se alcanzó y el sueño de mirar a todos desde arriba es realidad; ahora se vienen unas merecidas vacaciones, pero no por mucho tiempo. A principios de enero los emperadores vuelven al ruedo y la puja por el cetro se trasladará al calor de tierras australianas, donde nos espera el primer Grand Slam del 2017.
Murray campeón del torneo de maestros
Andy Murray se coronó este domingo como el nuevo campeón del Masters de Londres, luego de derrotar en el match decisivo al serbio Novak Djokovic con parciales de 6-3 y 6-4. De esta forma, el escocés cerró el año como el número uno del ranking mundial, posición que había alcanzado por primera vez en su carrera hace dos semanas atrás en el torneo de Paris-Bercy. El ganador de la final le puso el broche de oro a una temporada inolvidable que redondeó con su noveno título del 2016.
En una hora y 42 minutos de juego, Andy se sacó de encima sin mayores inconvenientes a un "Nole" que estuvo demasiado errático como para recuperar el lugar de honor perdido hace 15 días.
De esta forma, el flamante monarca de las raquetas reaparecerá en el 2017 con un invicto de 24 partidos sobre sus hombros; racha que comenzó en Pekín y aún continúa luego de finalizado el último certamen del año.
La cima del planeta tenis estaba en juego y todo parecía estar a pedir de Djokovic, por cómo llegaban ambos desde el punto de vista físico. Mientras el serbio había estado en cancha solo 1 hora y 6 minutos frente al japonés Nishikori en semifinales, el británico de 29 años jugó el partido más largo en la historia del Masters frente al canadiense Milos Raonic. Una maratón de 3 horas y 38 minutos que lo dejaba malherido de cara a lo que prometía ser un cotejo hiper complicado.
Sin embargo, en la final fue el propio "Nole" quien allanó el camino del escocés, cometiendo la cantidad inusual de 30 errores no forzados y ratificando una vez más que su confianza ya no es la misma de aquel competidor invencible que nos maravilló desde el 2014 hasta Roland Garros de este año.
Murray no exhibió el mejor nivel de su vida, ni mucho menos, pero la regularidad (15 errores, la mitad de su oponente) y el contragolpe letal al que nos tiene acostumbrados fueron suficientes para terminar con las esperanzas de un rival totalmente desconocido.
Como viene sucediendo a lo largo de toda la temporada en canchas de carpeta y bajo techo, el gran arma de Andy Murray fue su primer saque ya que ganó el 84% de los puntos jugados; lo que significó la suma de 27 puntos ganados en 32 disputados.
Djokovic no pudo alcanzar al suizo Roger Federer como máximo ganador del torneo de maestros y se quedó con cinco conquistas en su haber. Por su parte, el escocés concretó todo lo que venía insinuando en los últimos años y abandonó finalmente su eterno status de número 2, para ponerse la corona de Rey que le había sido tan esquiva a lo largo de estos últimos tiempos.
Murray, quien cosechó 12685 puntos en el ranking (905 más que el serbio), es el primer tenista diferente a Roger Federer, Rafael Nadal o Novak Djokovic que termina la temporada subido al pedestal desde el año 2003, cuando lo había conseguido otro Andy, de apellido Roddick.
El británico llegó a 44 títulos en su carrera y termina este extenuante 2016 con un impresionante record de 78 partidos ganados de 87 posibles. Algunos ya hablan de una nueva era; otros preferimos ser más cautelosos y estamos a la espera de saber si ese flaco desgarbado y boca sucia que ayer tocó el cielo con las manos, mañana logrará sostenerse y perdurar en lo más alto.
Por lo pronto el objetivo se alcanzó y el sueño de mirar a todos desde arriba es realidad; ahora se vienen unas merecidas vacaciones, pero no por mucho tiempo. A principios de enero los emperadores vuelven al ruedo y la puja por el cetro se trasladará al calor de tierras australianas, donde nos espera el primer Grand Slam del 2017.
Murray campeón del torneo de maestros