Como la primera vez
Atenas de San Carlos, el primer campeón de campeones en OFI.
Foto: Edgardo de León
El Club Atlético Atenas de San Carlos, hoy parte del fútbol profesional participando de la Divisional B, es protagonista de la más rica historia de la Organización del Fútbol del Interior por ser el primer campeón de la historia a nivel de clubes. El conjunto carolino nació un 1º de Mayo de 1928, y curiosamente surge de una llegada tarde a una práctica.
Héctor Páez y Rubén Borges se demoraron en una comida y no llegaron al entrenamiento de su club, el Excelsior. Producto de esta situación, no fueron tenidos en cuenta, la rebeldía llevó a los jugadores a salir a recolectar compañeros y amigos para formar una nueva institución, y así nació el glorioso Atenas. Ernesto Machado García fue su primer presidente.
La gloria deportiva ha estado por siempre muy emparentada con el club, en su palmarés figuran veinticuatro títulos en la Liga Carolina de Fútbol, doce torneos ganados en el Torneo Departamental de Maldonado y tres de Liga Mayor de Maldonado. A nivel interdepartamental, son cuatro las estrellas correspondientes a las obtenciones del Campeonato Nacional de Clubes (1965, 1975, 1976 y 2001), de esta forma junto a Wanderers de Artigas y Estudiantil de Paysandú comparte el honor de ser los máximos ganadores de este torneo.
Por si todo lo anterior fuera poco, la Supercopa de Clubes Campeones del Interior también se quedó cuatro veces en su poder (1971, 1972, 1974 y 1985). De todos estos trofeos, hoy elegimos el primero para destacar.
Campeonato de Clubes Campeones del Interior 1965:
Fundada el 14 de julio de 1946, la Organización del Fútbol del Interior estaba a punto de cumplir veinte años de existencia al momento de crear su primer torneo interdepartamental de clubes. Desde el año 1952 se jugaba a nivel de selecciones, Durazno fue el primer campeón, en 1965 y con creación del periodista de “El País” Efraín Martínez Fajardo se comenzó a jugar a nivel clubista.
Los dieciocho departamentos del interior del país estuvieron representados, jugaron San Eugenio (Artigas), Juanicó (Juanicó), Armiño (Melo), Plaza (Colonia), Plaza (Nueva Helvecia), Unión Juvenil (Durazno), Peñarol (Trinidad), Quilmes (Florida), Las Delicias (Minas), Atenas (San Carlos), Paysandú Wanderers (Paysandú), Fray Bentos (Fray Bentos), Oriental (Rivera), River Plate (Rocha), Salto Uruguay (Salto), Universal (San José), Con Los Mismos Colores (Mercedes), Oriental (Paso de los Toros), Ferrocarril (Tacuarembó) y San Lorenzo (Treinta y Tres).
Alcides Britos (Arquero): “El plantel que encaró la Copa era corto, no tenía demasiados jugadores de primera división. Se fue manejando, con el cambio de entrenador vino Paolucci que era muy estudioso y sabía mucho. Fuimos ganando partido a partido, no pudimos seguir contando con Cirilo Icatt, pero se nos dio igual”.
Atenas tomó la responsabilidad de representar en la primera edición del Campeonato a un departamento que a la postre resultó ser el más ganador de la historia, los clubes de Maldonado llevan seis torneos de ventaja por sobre los de Paysandú, son trece contra siete. Bajo la dirección técnica de Walter Rodríguez Págola, los carolinos formaron parte de Grupo 2 del Este, junto a Las Delicias y River Plate. El debut se dio en la ciudad de Minas, y allí el equipo sufrió un duro revés, al caer 1-0.
La derrota golpeó, y el entrenador no siguió en su cargo, asumiendo el salteño Arnoldo Paolucci la conducción del plantel. Enderezó su camino el equipo y ganó los tres encuentros restantes, para conseguir el único puesto de clasificación. Fue triunfo 4-0 sobre River Plate (Cirilo Icatt x2, Ángel Arambillet y Édinson Amoroso), 2-0 ante Las Delicias (Berto Aparicio y Cirilo Icatt), y en el partido definitorio por el pasaje se impuso sobre River Plate por 4-1 (Ángel Arambillet x2, Walter San Martín y Berto Aparicio). Con seis unidades, una más que Las Delicias, los de San Carlos estaban en la siguiente fase.
Curiosidad: Antes de jugarse el partido definitorio del grupo, el Club Rausa de Maldonado presentó un recurso por presunta habilitación incorrecta de Cirilo Icatt que había jugado a préstamo en Rampla Juniors de Montevideo la temporada anterior. De esta manera, y ante la duda, una de las figuras del equipo no fue tenido en cuenta por el resto del campeonato.
La próxima instancia marcaba la chance de un primer título, en este caso zonal, enfrentando por el Este a San Lorenzo de Treinta y Tres. En otro elemento curioso, el azulgrana del Olimar llegó a esta fase sin jugar, ya que Armiño de Melo desistió días antes del inicio de la competencia de participar. Fue empate uno a uno el juego de ida, en Treinta y Tres con gol de Pedro Hernández, mismo resultado que en la revancha, esta vez en tierras de San Carlos donde anotó Pedro Hernández. El reglamento marcaba que para definir el ganador se debía recurrir a un tercer partido, fijado en la ciudad de Rocha, donde Atenas ganó 1-0 con gol de Édison Amoroso de tiro penal.
Desde el Sur llegó el campeón zonal para encarar las semifinales, Unión Juvenil de Durazno sería el siguiente rival. Como locales, los carolinos vencieron en el primer partido 2-1, con goles de Pedro Hernández y Édison Amoroso. La revancha, en lares duraznenses, terminó con triunfo del equipo azulgrana sobre el lagartija por tres a dos, convirtieron Ángel Arambillet en dos oportunidades y Berto Aparicio en la restante. Con una campaña de nueve partidos jugados, seis de ellos ganados, dos empatados y uno perdido, Atenas puso proa rumbo a su primer título del interior.
Alcides Britos: “En lo previo a la segunda final, como no conseguía guantes de arquero en San Carlos, le pedí a Roberto Sosa si me traía guantes desde Buenos Aires, en un partido que el jugó contra Independiente. Guantes no consiguió, pero sí una goma que llevé a una casa de deportes en Montevideo y me la pegaron. Con esos guantes atajé en Paysandú”.
Finales: Paysandú Wanderers llegó a la instancia como un rival de temer, ya que el fútbol del litoral aparecía como el más fuerte en esas épocas. Salto Uruguay, San Eugenio, Con los Mismos Colores y Oriental habían quedado por el camino, el sueño de una final del interior a nivel de clubes se había concretado. El 13 de junio de 1965, tres mil quinientos espectadores abarrotaron las tribunas del estadio ateniense para el partido de ida, dirigido por el olimareño Rubén Riaño.
Los dirigidos por Arnoldo Paolucci formaron con Alcides Britos, Amado Galván, Evannoy Pereira; Claudio Bonilla, Claudio Silva, Honorio Castro, Berto Aparicio, Angel Arambillet, Pedro Hernández, Édison Amoroso y Walter San Martín. Dos veces corrió de atrás el azulgrana, y terminó consiguiendo un importante empate 2-2 con goles de Berto Aparicio y Pedro Hernández.
Siete días después, la fiesta del fútbol del interior se mudó al Parque Rodolfo Cairo Cosio de Paysandú, donde Horacio Bonazzola de Río Negro dirigió un encuentro que observaron cuatro mil espectadores. La tarde en que la gloria abrazó fuerte a los de San Carlos, los mismos once que jugaron la ida fueron elegidos por el salteño Paolucci para ser titulares, y no fallaron en la histórica cita.
Juan Petrella puso muy temprano en el juego a los sanduceros en ventaja, pero en el amanecer del complemento Pedro Hernández y Walter San Martín pusieron cifras finales de 2-1. Atenas de San Carlos, desde tierras carolinas y pa´ todo el país, era el primer campeón del interior.
Alcides Britos: “La caravana en el pueblo a la vuelta fue impresionante, se trató de llegar cerca del mediodía. No hubo clase ni en escuelas ni liceos, estaban todos en la calle. Se puso una red de parlantes en la calle donde se repetían los goles”.
Fuentes:
Programa Sport 7 de Gustavo Rodríguez (Testimonios)
Giefi.com.uy (Estadísticas)
Artículo “Atenas dueño del interior” de Edgardo De León
Héctor Páez y Rubén Borges se demoraron en una comida y no llegaron al entrenamiento de su club, el Excelsior. Producto de esta situación, no fueron tenidos en cuenta, la rebeldía llevó a los jugadores a salir a recolectar compañeros y amigos para formar una nueva institución, y así nació el glorioso Atenas. Ernesto Machado García fue su primer presidente.
La gloria deportiva ha estado por siempre muy emparentada con el club, en su palmarés figuran veinticuatro títulos en la Liga Carolina de Fútbol, doce torneos ganados en el Torneo Departamental de Maldonado y tres de Liga Mayor de Maldonado. A nivel interdepartamental, son cuatro las estrellas correspondientes a las obtenciones del Campeonato Nacional de Clubes (1965, 1975, 1976 y 2001), de esta forma junto a Wanderers de Artigas y Estudiantil de Paysandú comparte el honor de ser los máximos ganadores de este torneo.
Por si todo lo anterior fuera poco, la Supercopa de Clubes Campeones del Interior también se quedó cuatro veces en su poder (1971, 1972, 1974 y 1985). De todos estos trofeos, hoy elegimos el primero para destacar.
Campeonato de Clubes Campeones del Interior 1965:
Fundada el 14 de julio de 1946, la Organización del Fútbol del Interior estaba a punto de cumplir veinte años de existencia al momento de crear su primer torneo interdepartamental de clubes. Desde el año 1952 se jugaba a nivel de selecciones, Durazno fue el primer campeón, en 1965 y con creación del periodista de “El País” Efraín Martínez Fajardo se comenzó a jugar a nivel clubista.
Los dieciocho departamentos del interior del país estuvieron representados, jugaron San Eugenio (Artigas), Juanicó (Juanicó), Armiño (Melo), Plaza (Colonia), Plaza (Nueva Helvecia), Unión Juvenil (Durazno), Peñarol (Trinidad), Quilmes (Florida), Las Delicias (Minas), Atenas (San Carlos), Paysandú Wanderers (Paysandú), Fray Bentos (Fray Bentos), Oriental (Rivera), River Plate (Rocha), Salto Uruguay (Salto), Universal (San José), Con Los Mismos Colores (Mercedes), Oriental (Paso de los Toros), Ferrocarril (Tacuarembó) y San Lorenzo (Treinta y Tres).
Alcides Britos (Arquero): “El plantel que encaró la Copa era corto, no tenía demasiados jugadores de primera división. Se fue manejando, con el cambio de entrenador vino Paolucci que era muy estudioso y sabía mucho. Fuimos ganando partido a partido, no pudimos seguir contando con Cirilo Icatt, pero se nos dio igual”.
Atenas tomó la responsabilidad de representar en la primera edición del Campeonato a un departamento que a la postre resultó ser el más ganador de la historia, los clubes de Maldonado llevan seis torneos de ventaja por sobre los de Paysandú, son trece contra siete. Bajo la dirección técnica de Walter Rodríguez Págola, los carolinos formaron parte de Grupo 2 del Este, junto a Las Delicias y River Plate. El debut se dio en la ciudad de Minas, y allí el equipo sufrió un duro revés, al caer 1-0.
La derrota golpeó, y el entrenador no siguió en su cargo, asumiendo el salteño Arnoldo Paolucci la conducción del plantel. Enderezó su camino el equipo y ganó los tres encuentros restantes, para conseguir el único puesto de clasificación. Fue triunfo 4-0 sobre River Plate (Cirilo Icatt x2, Ángel Arambillet y Édinson Amoroso), 2-0 ante Las Delicias (Berto Aparicio y Cirilo Icatt), y en el partido definitorio por el pasaje se impuso sobre River Plate por 4-1 (Ángel Arambillet x2, Walter San Martín y Berto Aparicio). Con seis unidades, una más que Las Delicias, los de San Carlos estaban en la siguiente fase.
Curiosidad: Antes de jugarse el partido definitorio del grupo, el Club Rausa de Maldonado presentó un recurso por presunta habilitación incorrecta de Cirilo Icatt que había jugado a préstamo en Rampla Juniors de Montevideo la temporada anterior. De esta manera, y ante la duda, una de las figuras del equipo no fue tenido en cuenta por el resto del campeonato.
La próxima instancia marcaba la chance de un primer título, en este caso zonal, enfrentando por el Este a San Lorenzo de Treinta y Tres. En otro elemento curioso, el azulgrana del Olimar llegó a esta fase sin jugar, ya que Armiño de Melo desistió días antes del inicio de la competencia de participar. Fue empate uno a uno el juego de ida, en Treinta y Tres con gol de Pedro Hernández, mismo resultado que en la revancha, esta vez en tierras de San Carlos donde anotó Pedro Hernández. El reglamento marcaba que para definir el ganador se debía recurrir a un tercer partido, fijado en la ciudad de Rocha, donde Atenas ganó 1-0 con gol de Édison Amoroso de tiro penal.
Desde el Sur llegó el campeón zonal para encarar las semifinales, Unión Juvenil de Durazno sería el siguiente rival. Como locales, los carolinos vencieron en el primer partido 2-1, con goles de Pedro Hernández y Édison Amoroso. La revancha, en lares duraznenses, terminó con triunfo del equipo azulgrana sobre el lagartija por tres a dos, convirtieron Ángel Arambillet en dos oportunidades y Berto Aparicio en la restante. Con una campaña de nueve partidos jugados, seis de ellos ganados, dos empatados y uno perdido, Atenas puso proa rumbo a su primer título del interior.
Alcides Britos: “En lo previo a la segunda final, como no conseguía guantes de arquero en San Carlos, le pedí a Roberto Sosa si me traía guantes desde Buenos Aires, en un partido que el jugó contra Independiente. Guantes no consiguió, pero sí una goma que llevé a una casa de deportes en Montevideo y me la pegaron. Con esos guantes atajé en Paysandú”.
Finales: Paysandú Wanderers llegó a la instancia como un rival de temer, ya que el fútbol del litoral aparecía como el más fuerte en esas épocas. Salto Uruguay, San Eugenio, Con los Mismos Colores y Oriental habían quedado por el camino, el sueño de una final del interior a nivel de clubes se había concretado. El 13 de junio de 1965, tres mil quinientos espectadores abarrotaron las tribunas del estadio ateniense para el partido de ida, dirigido por el olimareño Rubén Riaño.
Los dirigidos por Arnoldo Paolucci formaron con Alcides Britos, Amado Galván, Evannoy Pereira; Claudio Bonilla, Claudio Silva, Honorio Castro, Berto Aparicio, Angel Arambillet, Pedro Hernández, Édison Amoroso y Walter San Martín. Dos veces corrió de atrás el azulgrana, y terminó consiguiendo un importante empate 2-2 con goles de Berto Aparicio y Pedro Hernández.
Siete días después, la fiesta del fútbol del interior se mudó al Parque Rodolfo Cairo Cosio de Paysandú, donde Horacio Bonazzola de Río Negro dirigió un encuentro que observaron cuatro mil espectadores. La tarde en que la gloria abrazó fuerte a los de San Carlos, los mismos once que jugaron la ida fueron elegidos por el salteño Paolucci para ser titulares, y no fallaron en la histórica cita.
Juan Petrella puso muy temprano en el juego a los sanduceros en ventaja, pero en el amanecer del complemento Pedro Hernández y Walter San Martín pusieron cifras finales de 2-1. Atenas de San Carlos, desde tierras carolinas y pa´ todo el país, era el primer campeón del interior.
Alcides Britos: “La caravana en el pueblo a la vuelta fue impresionante, se trató de llegar cerca del mediodía. No hubo clase ni en escuelas ni liceos, estaban todos en la calle. Se puso una red de parlantes en la calle donde se repetían los goles”.
Fuentes:
Programa Sport 7 de Gustavo Rodríguez (Testimonios)
Giefi.com.uy (Estadísticas)
Artículo “Atenas dueño del interior” de Edgardo De León