"Suerte que Forlán no se casó con Zaira"
Arruabarrena habla de su amistad con Palermo y Riquelme, su vínculo con Forlán y el problema entre Sorín y Verón.
Amigo de Riquelme y de Palermo le tocó estar en el medio de su conflicto. Compañero de Sorín y de Verón en momentos distintos, también compartió entre ellos un conflicto en plena Champions League. Según cuenta Arruabarrena dicha pelea fue mucho peor de lo que se vio en la cancha. Compañero de Forlán durante varios años el "Vasco" nos contó su opinión sobre el matrimonio de Diego. Sobre esto, sobre los vínculos que generó en todos sus años de carrera y también sobre la publicidad de cerveza que filmó hace algunos años, hablamos con el DT de Nacional en esta segunda parte.
- Fuiste compañero de Verón en Boca, ¿te sorprendió su actitud frente a Sorín en el partido de Champions?
Fui compañero de la "Bruja" en juveniles de la Selección y tengo una relación con él. En el partido de Champions se vió poquito y nada, no se bien cual fue el conflicto, ni me interesa. Son dos muy buenos jugadores con los cuales yo tengo una relación pero son roces que después quedan en la cancha.
-¿El conflicto dentro de los vestuarios fue mucho mayor?
Sí, en el entretiempo hubo lío entre todos. Entre españoles, italianos y terminó una vez que finalizó el partido.
- Tanto en ese partido como en la fase anterior frente a Rangers te tocó darle la clasificación al equipo, ¿que significó para vos?
He dicho que he tenido suerte en momentos importantes. Esos cuatro son así. En Villareal tuve una étapa que estornudaba y convertía un gol, y para un lateral convertir nueve goles en una Liga, más en la española, es díficil. Para nosotros la Champions fue algo muy bonito; para el club, la localidad y para el equipo, por mas que eramos veintidos jugadores generalmente jugábamos catorce. No habíamos hecho una gran pretemporada, habíamos estado por China y ni bien volvimos jugamos la previa de Champions; en Sudamérica se habla que un jugador no puede jugar dos partidos por semana, pasa mucho por la cabeza y mentalizar al jugador que sí puede. Los traslados aquí son más grandes que en Europa pero pasa por el cuidado del jugador, el entrenamiento y el descanso que tenga.
- La semifinal contra el Arsenal, ¿fue la peor decepción que te tocó vivir en el fútbol?
No. Es una espinita clavada, en su momento cuando me lo hacen recordar también. En Tigre tuve el triangular con Boca y San Lorenzo, en el que habiamos sido el mejor equipo y perdimos por un gol. En el '96 con el "Bambino", por un punto quedamos segundos abajo de River. Son espinitas clavadas, ¿qué me hubiese gustado en este caso? a pesar de haber sido superiores y no haber podido concretarlos, haber jugado la final con el Barcelona.
- ¿Como es el vestuario después de un partido así?
Nada. Si no dejas todo, te podés reprochar. En este caso fuiste superior pero sabés que diste todo lo que tenías, podés sentir bronca o frustración pero en horas tenés que salir.
- ¿Fueron injustos con Román por el penal que erró?
No, el hincha de Villareal demostró en seguida su aprecio hacia Román, hacia el equipo y hacia el desgaste que había tenido el equipo. Después de haber quedado eliminados, nos quedaban cuatro partidos de liga y teníamos que clasificar a UEFA, lo que se logró. Era bastante atípico para un equipo denominado "chico", en España tenés el caso de Real Sociedad o el Celta que trás jugar Champions habían terminado descendiendo, el Villareal había llegado a semifinal pero había terminado sexto. Te repito con veintidos jugadores, pero que Manuel utilizaba dieciseis.
- Te tocó ser compañero de Martín Palermo y Juan Román Riquelme, ¿son mas fáciles de tratar de lo que parece?
Sí. En la actualidad lo han dicho ellos, no son amigos; yo soy amigo de los dos. Tanto uno como el otro han hecho demasiado por terceros, en temas económicos o personales que no salen a la luz. A mí me podés ver en la calle o en un lugar, si no tenemos confianza me podés encontrar antipático. Mi señora dice que tengo doble personalidad, ellos por ahí también y parecen antipáticos. Son buenos pibes, muy buenos amigos y dentro de la cancha se matan. Después cada uno elige.
- ¿Las diferencias son más una presión de afuera que lo que ellos mismos sienten? ¿Alguna vez tuviste algún problema por ser amigo de los dos?
Sí. Tenés periodistas de un lado y de otro, amigos, entorno familair y generan un clima que no es beneficioso para un relación. En algún momento después de haber visto un partido pensé que habían resuelto las diferencias, no era así y tuve que hacer dos asados aparte. No me he metido en esos problemas, son situaciones de ellos, yo no voy a perder una relación por intentar resolver problemas de ellos.
- ¿Como se dio la salida de Román del Villareal?
Estamos lejos de allá, han llegado situaciones que están ajenas a la realidad. Problemas, en su momento con el presidente, este decidió no contar más con Román y volvió a Boca. Estuve en Chile y también se decían cosas, que aparcaba el auto en otro estacionamiento lejos de los demás. Nada es cierto
-¿Hubo problemas con Pellegrini o Forlán?
Pregúntenle a Diego, todos los jugadores estábamos en constante contacto y comíamos asados todos juntos: españoles, frances, sudamericanos. Lo que pasa es que cuando no se dan los resultados hay un roce entre el presidente y Román, surge todo lo que puede surguir de allá hasta acá. Algunas serán ciertas, la mayoría no.
- En Tigre fuiste dirigido por Caruso Lombardi, ¿cómo es y cúal es su principal virtud?
Lo tuve después de Diego Cagna, que es mi amigo. Ricardo tenía o tiene problemas con Diego Cagna. Yo era amigo de Cagna pero pusimos las pautas de trabajo y me ha respondido como yo le respondí como jugador. El sabe leer, plantear bien los partidos tácticamente, el mismo día de partido. Sabe hacer los trabados cuando enfrentás un equipo superior.
- Habiendo alcanzado la Libertadores, ¿cúal creés que es la clave para lograr un título continental?
Soy de los que cree que primero tenés que hacer un buen grupo para tener un buen equipo. Después depende de los jugadores y de tener buenos jugadores. Es así de fácil pero muy díficil de lograrlo. Trabajar, tener jugadores con hambre, con ganas de prestigio, jugadores con sentido de pertencia; hoy en Nacional hay varios jugadores que lo tienen. Necesitás orden institucional, y mucho trabajo.
- ¿Vas a incursionar en la publicidad como en Argentina? ¿Barrena bien Arruabarrena?
No. Lo de la publicidad me dejó una pileta hecha y parte del quincho. Fue una situación que se me presentó, la analicé con las cosas positivas y las negativas. Las negativas se ven hoy que un jugador puede ver un video y decir algo. La única toma que salió bien fue la primera, después tragué agua como loco. Hoy tengo que ver el tipo de publicidad, si es una publicidad de cerveza, nunca he tomado alcohol; también hay que ver un aspecto económico y mi señora es la que manda en casa.
- Concidiste con Diego Alonso, hoy técnico de Peñarol, en algunos partidos en Argentina o España. ¿Qué recordás de él?
Es un delantero cargoso que siempre estaba ahí. He concidido con él en el Valencia-Villareal y supongo que acá con Gimnasia, no recuerdo partido a partido. Hemos estado en algún partido de las eliminatorias para el Mundial 2002, en el cual al volver a Europa hacíamos todo el trayecto juntos. Al bajarme en Valencia, yo me iba para el Villareal y él se quedaba por ahí. Tenías que estar atento de no dejarle un espacio, sobre todo en el área.
- ¿Tenés relación con Forlan? ¿Lo saludaste por su casamiento?
Sí, sí . No lo saludé, lo había saludado cuando supuestamente se iba a casar. Había llegado a Argentina, abrí una revista y lo vi con otra señorita. Le expresé mi opinión y menos mal que no se casó en ese momento. Ahora lo veo con una piba sencilla, ojalá que pueda hacer una buena familia. Es el candidato de toda chica, lo peor que hace es jugar al fútbol, juega al golf, al tenis, cocina, limpia.