Vitor Borba Ferreira Gómez: O mejor conocido como Rivaldo, nació en Pernanbuco el 19 de abril de 1972. Debido a problemas económicos, tuvo una infancia dura, llegando al punto de perder parte de la dentadura por falta de alimentación. Lejos de achicarlo, sirvió para fortalecer su personalidad, ya que lucharía hasta poder cumplir el sueño de ser una estrella.

Físico endeble: Debido a su complexión física, consecuencia de la mala alimentación, no fue tenido en cuenta por varios técnicos. Sin embargo comenzó a triunfar a los 19 años en Santa Cruz Futebol Clube, y tras un pasaje por Mogi Mirim Esporte Clube, el club Conrinthians dejó de lado todo prejuicio posible y lo fichó.

Comienzo del éxito: Sus buenas actuaciones en el equipo de Conrinthians -anotó 17 goles en 41 partidos- le valieron que muchos pusieran los ojos en él. Entre ellos figuraba Zagallo, técnico de la selección, que comenzó a citarlo. A pesar de eso, el técnico lo dejaría de lado para el Mundial de Estados Unidos 94, lo que el jugador considera el golpe más duro de su carrera.

Palmeiras: En verano del 94 el equipo de Palmeiras desembolsó 3 millones de dólares para hacerse con los servicios del jugador. En este equipo Rivaldo rindió al máximo nivel, convirtiéndose en la máxima figura de un plantel que logró dos campeonatos brasileros seguidos y un campeonato paulista.

Juegos Olímpicos 96: Dos años después Rivaldo tuvo revancha con el scratch brasileño. Frente a los números puestos como refuerzos mayores de Bebeto y Aldair, el hincha pedía a gritos la citación de Romario. Zagallo comparó a Rivaldo con Pelé y dejó de lado el llamado popular. El mediapunta perdió la pelota que dio nacimiento al tercer gol de Nigeria, decisivo para la eliminación de la selección, y lo que pintaba para ser una gran experiencia, terminó por formar una mala relación entre Rivaldo y el hincha brasilero. "En todo el mundo se habla mejor de mí que en Brasil", dijo.

Europa: Buscando escapar de la crítica de todo un país por el fracaso olímpico, a medidados del 96 decidió emigrar a España para jugar por Deportivo La Coruña. El equipo estaba buscando un reemplazo a Bebeto, y Rivaldo le vendría como anillo al dedo. En la única temporada en el equipo anotó 21 goles en 41 partidos.

Nuevamente sustituto: Barcelona andaba buscando reemplazo a Ronaldo, que había emigrado a Inter de Milán, y encontró en Rivaldo el sustituto perfecto. En un fichaje polémico, ya que fue en el último día del período de pases y complicó la planificación que el equipo de Galicia había hecho, el Barça pagó las 4 mil millones de pesetas que valía la clausula de recisión y contrató al brasilero, que pasó a cobrar 150 millones de pesetas.

Balón de oro: En sus dos primeras temporadas en el Barcelona logró el bicampeonato de Liga y una Copa del Rey. Gracias a sus 43 goles en dos temporadas y a formar parte de la Copa América que logró Brasil en Paraguay, a fines del 99 ganó el Balón de Oro como mejor jugador de Europa. En sus siguientes tres temporadas no tuvo el mismo nivel, llegando a tener algún cruce con Van Gaal, técnico del club, acerca de la posición en la que jugaba. También hay que tomar en cuenta que el club no estaba pasando por su mejor momento, teniendo una crisis institucional y económica que agravaba todo problema.

"A mi me gusta el Rivaldo de antes de su elección como mejor del mundo. No ha demostrado compromiso con el club", dijo Van Gaal.

Coronación Mundial: En uno de los peores momentos de su carrera contó con la confianza y el apoyo de Scolari para ser pieza clave del equipo brasilero que ganó el Mundial de Corea y Japón. Con la diez en la espalda jugó todos los partidos de ese torneo y anotó 5 goles, todos en partidos distintos. A pesar de haber logrado el título, Barcelona le concedería la carta de libertad y viajó a Italia para fichar por Milan.

Liga de Campeones: En Milan siguió ganando títulos. En su primera temporada logró la Liga de Campeones, y al año siguiente a pesar de no jugar ganó la Liga italiana. Tras un año y medio no tan bueno, sería cedido al Cruzeiro por seis meses. Este pase sería catalogado de fiasco debido a lo poco que pudo jugar. De regreso a Europa viajó a Grecia para fichar por Olympiakos.

Nueva juventud: En Grecia volvió a vivir sus mejores momentos logrando actuaciones memorables en un equipo que logró un tricampeonato de Liga y un bicampeonato de Copa Nacional. Entretanto se retiró de la selección brasilera frente a Uruguay en un recordado partido que finalizó 3 - 3. Debido a falta de pagos y discrepancia con los directivos del club griego -Rivaldo reclamaba 390 mil euros- abandonó Olympiakos y fichó por su rival, el AEK de Atenas.

Uzbekistán: La temporada en el AEK de Atenas no fue existosa, perdió la Liga gracias a que su ex equipo ganó en los tribunales, por un doping positivo, dos puntos de un partido que había perdido. Finalizada la temporada decidió emigrar a Uzbekistán para jugar por el PFC Bunyodkor. El equipo asiático invirtió 10 millones de euros en el fichaje del jugador, sumamente redituables ya que logró un bicampeonato de Liga y una Copa Nacional.

Presidente: En noviembre del 2010 volvió a Brasil para jugar por el Mogi Mirim, equipo del cual es también presidente, y dos meses después fichó por el San Pablo. Debido a problemas con diversos entrenadores que no lo tuvieron en cuenta, a pesar de haber tenido buenos rendimientos cuando le tocó jugar, en diciembre de ese año anunció que no renovaría contrato.

Angola y Brasil: En uno de los fichajes más caros de la historia del futbol africano, 5 millones de dólares, emigró al fútbol angoleño para jugar por el Kabuscorp. Luego de un año, decidió no renovar contrato y volver a Brasil para jugar por el Sao Caetano en la segunda divisón. Practicamente un año después rescindió el contrato ya que las lesiones lo persiguieron desde su llegada al club impidiéndole jugar.

Hoy es una duda si su carrera va a seguir, aunque todo parece indicar que la magia del crack brasilero poco a poco se ha esfumado.

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