Yo soy uno de los ocho

Un fin de semana de rechupete, donde en doble tanda pudimos saber quiénes hicieron valer su campeonato y quiénes su comodín.

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Andrew Luck (Foto: huffingtonpost.com)

Una vez mas quedó demostrado: de nada vale una excelente temporada regular y un campeonato a la hora de enfrentar los play-off. Si no, vean lo que pasó en este fin de semana.

Kansas City Chiefs en Indianapolis Colts

Los Chiefs estaban en la disyuntiva de probar si su campaña en la temporada regular había sido casualidad o el potencial de llegar al Super Bowl estaba ahí. Ambos quarterbacks llegaban con números similares (60% de pases completados y 23 touchdowns).

Al inicio del partido, los Chiefs perdían a Jamaal Charles, pero Alex Smith parecía compensar esta pérdida con diversas armas ofensivas que le permitían conseguir 4 touchdowns con cuatro jugadores ofensivos distintos en la primera mitad.

Se iban al descanso ganando 31 - 10. Pero en la segunda mitad todo cambió. La agresividad de los Colts, logrando 4 touchdowns en cuatro ataques de menos de dos minutos marcó esta mitad. Todo se coronó con el último pase de touchdown de 64 yardas que le dio la victoria a los Colts 45 - 44.

New Orleans Saints en Philadelphia Eagles

Los Saints resignaron el campeonato divisional en las últimas semanas y se tuvieron que conformar con el último lugar en los play-off. Enfrentaban a los Eagles que contaban con una ofensiva balanceada, frente a la ofensiva predominantemente aérea de los Saints.

El primer cuarto mostró predominancia de las defensas, con avances muy cortos que terminaban en despejes y una intercepción a Drew Brees. El panorama no cambió mucho en el segundo cuarto, que terminó 7 - 6.

La emoción se apoderó del juego en la segunda mitad, donde luego de cuatro cambios de liderazgo en el marcador, los Eagles le dieron demasiado tiempo a Drew Brees para que, consumiendo poco a poco el reloj del último cuarto, le entregara a Graham la posibilidad del gol de campo que enmudeció al estadio y les dio la victoria a los Saints 26 - 24.

San Diego Chargers en Cincinatti Bengals

Los Chargers podrían ser considerados los convidados de piedra en estos play-off. En una arremetida final de cuatro partidos ganados y, ante la caída de Miami y Baltimore, lograron hacerse con la última plaza de la AFC en la última fecha. Los Bengals llegaban con hambre de gloria luego de 23 años sin poder ganar en post-temporada.

La primera mitad fue pareja, con un marcador de 10 - 7 a favor de los Bengals. Pero en la segunda mitad ocurrió el desastre. Cincinatti cometió varios errores y en dos oportunidades arriesgó a completar un cuarto down que no concretó.

Phillip Rivers y sus Chargers aprovecharon estas circunstancias y con 20 puntos dieron vuelta la historia (27 - 10). Los convidados de piedra siguen adelante, los Bengals seguirán esperando.

San Francisco 49ers en Green Bay Packers

En este enfrentamiento teníamos a otro de los que se subieron a último momento. Los Packers ganaron la división en su último partido y obligaron a San Francisco, que con campaña bastante regular y con una arremetida final de seis partidos ganados no lograron arrebatarle la división a Seattle, a visitarlos.

La nota del último partido de la jornada parecía que iba a ser el frío. En los primeros dos cuartos ambos equipos intercambiaron posesiones y, salvo por un pase interceptado por parte de Green Bay, no hubo mayores errores, terminando con un parcial de 13 - 10 a favor de San Francisco.

El tercer cuarto fue todo de las defensivas que no dejaron que hubieran ni anotaciones ni posesiones largas. Todo se definió en el último cuarto y San Francisco repitió el libreto marcado por los Saints: estiró la última posesión y ganó con un gol de campo.

Ahora ... ¡semifinales!

En la NFC, Seattle recibe a New Orleans y Carolina a San Francisco. En la AFC, Denver recibe a San Diego y New England a Indianapolis.

Qué cul... digo, ¡qué suerte!

Andrew Luck ha tenido que llevar la cruz de tener que remplazar a alguien tan importante para los Indianapolis Colts como Peyton Manning. Podemos afirmar que luego de 2 años, Andrew tiene ganado su lugar en el corazoncito de los fanaticos de Indiana. Y si no lo creen, vean cómo no da nada por perdido cuando su compañero pierde la pelota a centímetros del touchdown: