Alberto "Danny" Bergara fue un delantero desapercibido para muchos en Uruguay. Debutó en Racing con 16 años, jugó solamente cuatro años y a los 20 emigró a España. En el país peninsular jugó para Mallorca, Sevilla y Tenerife con gran suceso, siendo el principal goleador de los equipos.

El destino quiso que en Mallorca conociera al amor de su vida, una guía turística inglesa por la que, una vez terminada la carrera deportiva, decidió mudarse a Inglaterra.

La mudanza al Reino Unido no disminuyó la pasión por el fútbol. Instalado en tierra inglesa, aprovechó las conexiones de los primos de su esposa para ser el técnico de las juveniles de Luton Town.

Sin poder conseguir el permiso de trabajo, el dueño del equipo comunica al gobierno que su empleado iba a cargar camiones. Una pícara mentira que permitió al uruguayo comenzar su carrera como técnico.

Su éxito en las juveniles del equipo lo llevan a ser asistente técnico de las selecciones inglesas sub 18 y sub 20 por dos años, obteniendo singular suceso. Luego de dos años de trabajo no fue llamado por la Federación Inglesa, pero la situación no le preocupaba, él pretendía ser técnico de un equipo.

Ayudante técnico en Sheffield United y en Middlesbrough, en 1988 llegó a ser el técnico principal de un equipo cuando Rochdale, de la cuarta división, decidió contratarlo. En esa primera experiencia como entrenador principal no le fue bien, y unos meses después fue cesado. Rápidamente Bergara se hizo cargo de Stockport Country.

En su nuevo equipo estuvo cerca de seis años, volviéndose referente de una institución muy opacada por los equipos de Manchester. En 1991 logró ascender al equipo a Tercera División, la mejor posición de la institución en casi 20 años, mientras en las siguientes temporadas logró llevar al equipo a la fase final de la Football League Trophy, teniendo el lujo de jugar en Wembley.

A pesar que perdió todas las copas que disputó, se ganó el respeto de los hinchas por ser el técnico que había levantado de las cenizas al humilde Stockport. Durante la temporada 94-95, un cruce con el presidente del club lo llevó a la inmediata destitución sin más motivos, situación que la Justicia subsana al permitirle cobrar la debida indeminización.

Destituido del equipo al cual le dio todo, fue invitado por David Pleat para ser asistente en Sheffield Wednesday, equipo de la Premier League. Luego de la inmerecida destitución del equipo que había logrado armar a su antojo, tiene la chance de trabajar en la máxima categoría del país.

Estuvo una temporada como asistente de Pleat, consiguiendo que Sheffield Wednesday no descendiera. Al cabo de la misma decidió partir a dirigir dos equipos menores y, sobre fines de 1998, su carrera como entrenador principal terminó.

Durante el nuevo milenio fue scout de equipos importantes como Sunderland o Tottenham.

El mito de que Danny fue el primer entrenador extranjero en dirigir un cuadro inglés de Primera División está instalado. Hay registros previos de técnicos de otros países dirigiendo cuadros ingleses. La realidad es que el uruguayo fue el primero en no poseer el inglés como primera lengua y ser el primero en llevar un equipo a Wembley.

Más allá de quién posea la primacía, en una liga actual súper globalizada en la que dominan técnicos como Wegner, Mourinho o Pellegrini, entre otros, está nuestro compatriota Gustavo Poyet. Sin duda "Danny" Bergara fue un precursor. El único capaz de romper con la tradición de restricciones de un país acostumbrado a mirar para adentro.

Falleció durante 2008 con la frustración de no haber sido llamado para volver a dirigir. A pesar de ser un referente histórico, un país entero se olvidó de él, excepto el pequeño pueblo de Stockport, que no olvida lo realizado por él y lo despidió con gran homenaje.

El año pasado, una pequeña calle de la localidad pasó a llamarse Danny Bergara.