Armó Bardo
Marco Canola, del equipo Bardiani, se robó los aplausos al ganar la etapa 13 del Giro de Italia sacando provecho de la fuga.
Foto: gazzetta.it
El equipo italiano Bardiani, que corre este Giro de Italia por invitación, está de parabienes con la victoria de su corredor Marco Canola. El ciclista de 26 años aprovechó que el pelotón le dio posibilidades a los fugados de disputarse la etapa y no lo dudó.
Fue el más activo de los escapados intentando atacar varias veces para cortar a alguno de los seis ciclistas que lo acompañaron desde el primer kilómetro y para medir a su dos rivales que quedaron hasta el final de la etapa.
Jacskon Rodríguez (Androni Giocattoli) y Angelo Tlik (Europcar) lo siguieron hasta el final, pero no pudieron ante la potencia del italiano, que consiguió la victoria más importante de su carrera.
Si bien su actuación fue sobresaliente, el pelotón tuvo mucho que ver con su victoria. El desorden generalizado y las pocas ganas de liderar que tuvieron algunos equipos hicieron imposible descontar el tiempo perdido.
El FDJ, con Nacer Bouhanni comandando las acciones para llegar a un sprint final, fue el encargado de trabajar durante todo el recorrido, pero llegó un momento en que dejaron de tirar y ningún equipo salió a su ayuda. Tal vez preparando lo que se vendrá este sábado y domingo con etapas de alta montaña.
La general no sufrió modificaciones y Rigoberto Uran (Omega Pharma Quick-Step) sigue liderando la general, 37 segundos por delante del australiano Cadel Evans (BMC).
La próxima etapa promete y mucho, ya que contará con un puerto de segunda categoría y dos de primera (uno de ellos para finalizar). Serán 164 kilómetros entre Aglié y Oropa.
Fue el más activo de los escapados intentando atacar varias veces para cortar a alguno de los seis ciclistas que lo acompañaron desde el primer kilómetro y para medir a su dos rivales que quedaron hasta el final de la etapa.
Jacskon Rodríguez (Androni Giocattoli) y Angelo Tlik (Europcar) lo siguieron hasta el final, pero no pudieron ante la potencia del italiano, que consiguió la victoria más importante de su carrera.
Si bien su actuación fue sobresaliente, el pelotón tuvo mucho que ver con su victoria. El desorden generalizado y las pocas ganas de liderar que tuvieron algunos equipos hicieron imposible descontar el tiempo perdido.
El FDJ, con Nacer Bouhanni comandando las acciones para llegar a un sprint final, fue el encargado de trabajar durante todo el recorrido, pero llegó un momento en que dejaron de tirar y ningún equipo salió a su ayuda. Tal vez preparando lo que se vendrá este sábado y domingo con etapas de alta montaña.
La general no sufrió modificaciones y Rigoberto Uran (Omega Pharma Quick-Step) sigue liderando la general, 37 segundos por delante del australiano Cadel Evans (BMC).
La próxima etapa promete y mucho, ya que contará con un puerto de segunda categoría y dos de primera (uno de ellos para finalizar). Serán 164 kilómetros entre Aglié y Oropa.