El campeón uruguayo tenía, a priori, el cruce más accesible en la Copa Sudamericana. Danubio debía enfrentar a Deportivo Capiatá de Paraguay, un modesto equipo paraguayo que hacía su debut internacional. Pero en el fútbol no hay a priori que valga, y vaya si la franja lo comprobó.
 
Con el partido todavía sin armarse, los paraguayos avisaron por arriba con un cabezazo de Paredes que pasó cerca, pero rápidamente Danubio respondió con una buena contra de Sosa, que de zurda probó al arquero Vargas.
 
Pero minutos más tarde un centro pasado sin mayores pretensiones terminó en un tonto penal. Cotugno quiso despejar de cabeza pero puso el brazo, el juez pitó y Escobar no dudó para poner en ventaja a los paraguayos. 1 - 0.
 
Con la ventaja, los locales manejaron la pelota, sin demasiada profundidad pero manteniendo lejos de su arco a un Danubio que no daba dos pases seguidos. El debutante Ghan no hacía pie en el medio y Formiliano quedaba solo en la contención, y la franja mostraba algunas fragilidades defensivas, sobre todo por el centro.
 
Sin encontrar fútbol por afuera, con un “Nacho” González desconocido y buscando en largo a Castro y a Santiago González en punta, la zaga local no pasaba zozobras. Solo intervino el arquero cuando el argentino Castro sacó un tiro de 30 metros que se metía en el arco.
 
Variante cantada para el complemento: Canobbio por el juvenil Ghan, para darle más juego y un poco más de experiencia al equipo. Pero no pasaron cinco minutos cuando Ruiz corrió una bola larga y Ricca, en el afán de ganarle la posición, la tocó con la mano al borde del área. Una jugada muy rápida, y si bien la mano fue afuera el juez pitó penal. Otra vez Escobar la puso fuerte contra el palo para el 2 - 0.
 
Ni el ingreso de Canobbio ni el del pibe Silvera cambiaban las cosas en un Danubio tremendamente inoperante en ofensiva y dubitativo en defensa. Para colmo, en un córner llegaba el tercero de Capiatá; Irala, sin marca casi en el área chica, puso el pie para poner el 3 – 0 a los 68’.
 
Los de Ramos eran una lágrima, y Capiatá, sin ser nada del otro mundo, casi sentenciaba la serie. Pero Sosa ejecutó bien por primera vez una pelota quieta para que Zunino, con la nuca, la peinara y la mandara a guardar. El descuento le daba esperanza a los de la curva.
 
Si bien Formiliano casi pone el 2 - 3 sobre el cierre, hubiera sido demasiado premio para un Danubio que fue una sombra en la cancha. Muchas cosas para corregir de cara a la revancha, aunque el gol de Zunino -de buen ingreso dentro de un panorama chato- da algo de aire para lograr clasificar a la segunda ronda de la Sudamericana, algo que el equipo franjeado no logró nunca en sus seis presentaciones anteriores.
 
Ficha del partido:
 
DEPORTIVO CAPIATÁ: Tobías Vargas; Ángel Martínez, Néstor González, Jorge Paredes, Arturo Aquino; Derlis Ortiz, Ricardo Ortiz (65’ Víctor Ayala); Carlos Ruiz Peralta (78’ Arnaldo Pereira), Blas Irala, Óscar Ruiz (83’ Raúl Román); y Fabio Escobar. DT: Héctor Marecos.
 
DANUBIO: Salvador Ichazo; Guillermo Cotugno, Matías De Los Santos, Emiliano Velázquez, Federico Ricca; Fabricio Formiliano; Ignacio González (55’ Martín Silvera), Emiliano Ghan (45’ Fabián Canobbio), Leandro Sosa; Santiago González (64’ Matías Zunino) y Matías Castro. DT: Leonardo Ramos.
 
Goles: 16’ y 51’ Fabio Escobar -ambos de penal- (Dep. Capiatá), 68’ Blas Irala (Dep. Capiatá), 82’ Matías Zunino (Danubio)
 
Amarillas: Ayala (Dep. Capiatá); Velázquez y Ricca (Danubio)
 
Jueces: Roberto Tobar, Marcelo Barraza y Christian Schiemann
 
Estadio: Feliciano Cáceres, Luque

Mirá el segundo penal del equipo paraguayo: