Cada vez que se desarrollan los Juegos Olímpicos, el rating de cualquier transmisión televisiva tiene como punto de referencia la gimnasia artística. El público disfruta de un deporte que tiene mucho de destreza pero también de arte en acción digno de apreciar.

Y es en esta disciplina donde Uruguay encuentra una de sus grandes realidades y promesas de futuro como Cristhian Meneses, un joven de 19 años que supo romper las barreras y la historia representando a nuestro país.

En su historial cuenta con haber conseguido, a los 17 años, ganar la primera medalla en la historia de la gimnasia masculina uruguaya, obteniendo el bronce en la categoría mayor del Sudamericano de Santiago en el aparato salto.

Un año después mejoró su propio logro: ganó la medalla de plata en el Sudamericano de Cochabamba 2014. Pero lejos de quedarse y conformarse con ello, viajó a los Juegos Panamericanos y volvió a quebrar la historia al ser el primer uruguayo en llegar a una final all-around y finalizar además en la vigésimoprimera posición.

Ahora el celeste va por un nuevo hito: en octubre participará del Mundial de gimnasia en Glasgow (Escocia), donde buscará medirse con los mejores del mundo.

¿Qué balance hacés de este año 2015 y la buena actuación en los Juegos Panamericanos?
Viene siendo un muy buen año, donde vengo teniendo los compromisos más importantes de mi carrera. Creo que la cita de Toronto dio un gran impulso para la gimnasia en general y personalmente me impulsa para llegar mejor a mi primera actuación en un Mundial.

¿Y qué tanto influye lo conseguido allí para lo que se viene?
Influye bastante, ya que me pude medir con gente que es considerada gimnasta de clase internacional, que están en el top 15 mundial y, quieras o no, te sirve como para dar un panorama de cómo nos puede ir en dicha cita, que creo que va a ser muy bueno.

¿A qué se puede soñar y aspirar con la gimnasia en nuestro país, teniendo en cuenta el nivel actual?
Soy de los que cree que se pueden lograr tantas cosas como uno se proponga y de la magnitud que se busque, siempre y cuando paguemos el precio para ello. Ahora con la instalación del nuevo gimnasio en Canelones (se inauguró meses atrás) creo que esa lucha de poder alcanzar el sueño olímpico será mucho más accesible. En lo personal sueño con podios sudamericanos y panamericanos por ahora y, ¿por qué no?, con llegar a los Juegos también.

¿Pensás en Río de Janeiro 2016?
Sí, claro que lo hago, aunque el objetivo principal es la clasificación al Preolímpico. Nunca me medí a nivel mundial, pero quiero hacer lo posible para llegar, aunque sea difícil.

¿Cuáles son las próximas apuestas?
Tenemos el Mundial en Glasgow. Viajaríamos para allí el 17 de octubre con el objetivo de buscar un puesto para el Preolímpico de Río de Janeiro y de ahí tener la posibilidad de luchar por la clasificación a los Juegos Olímpicos.

¿Se hace complicado ser un gimnasta varón en nuestro país?
No es fácil desde el punto de vista competitivo ya que somos muy pocos los que estamos a nivel internacional en Uruguay. Eso nos da un escaso margen para medirnos entre nosotros, por ello debemos hacerlo directamente en el exterior.

¿Te ves como un referente de este deporte?
No soy el tipo de persona que me considere referente de algo, o por lo menos el único referente. Por el momento, quizás lo que logré sirvió para sacar cara por la gimnasia, pero sin duda que tenemos gente que estará conmigo, defendiendo más y mejor el deporte todavía. Ser una referencia es una sensación muy linda ya que sos agasajado por los demás, pero también es una responsabilidad porque hace que siempre debas ser un ejemplo. Espero transformarme en un referente dentro de un equipo de gimnasia como lo seremos dentro de unos años.