"Nos sentimos los responsables"
Diego García, el base de Aguada, habló con PDA y fue autocrítico respecto a la actuación de los jugadores en el Clasificatorio.
El comienzo aguatero en el torneo estuvo lejos de ser el esperado. Bajos rendimientos individuales y colectivos llevaron al cambio del cuerpo técnico, tener que luchar por salvarse del descenso y, en el mejor de los casos, jugar un playoff reclasificatorio.
Diego García, el armador aguatero, analizó para PDA el momento del equipo, la asunción de Javier Espíndola como técnico, lo que les dejó Segura y más.
¿Qué balance haces del Clasificatorio? ¿Su objetivo era clasificar entre los ocho?
Sin dudas el objetivo era entrar, pero siendo realistas y autocríticos, estuvimos lejos del rendimiento esperado y no estamos para nada conformes. Que nos cueste al comienzo, por habernos armado muy sobre la marcha, quizás era entendible; pero en el correr de los partidos tampoco logramos jugar buen básquetbol, lo que motivó la salida de un cuerpo técnico, y la realidad es que nosotros nos sentimos los responsables. Ojalá que el Reclasificatorio pueda unirnos como grupo, hacernos encontrar de una vez por todas una química de equipo, lograr salvarnos del descenso, e ir lo más fuerte que podamos a un posible playoff para clasificar a cuartos de final.
¿Por qué crees que le costó tanto a Segura encontrar el equipo?
No sé si el problema fue que a Segura le haya costado encontrar el equipo. La idea estaba, simplemente los resultados no se dieron, y quizás los que no pudimos adaptarnos a los roles fuimos nosotros, los jugadores. El último partido del "Curro" ante Urunday, por ejemplo, erramos tiros solos y eso no es culpa del entrenador. Quizás si esos tiros hubiesen entrado, hoy en día seguiría con nosotros. Lamentablemente el básquetbol es así.
¿Qué explicación tiene el cambio de actitud mostrado el último juego del Clasificatorio ante Biguá?
Antes que nada hay que reconocer que Bigúa estaba diezmado, pero más allá del cambio de entrenador, sabíamos que había que ganar como sea. Antes de la llegada de Javier (Espíndola), tuvimos una reunión con los compañeros donde asumimos el mal momento y nos propusimos de ahora en más mirar hacia adelante y cambiar la pisada. El aporte de Javier hasta el momento ha sido actitudinal, ya que el partido contra Biguá lo dirigió con dos prácticas arriba y no pudo inculcarnos mucho concepto. Sin dudas ayuda mucho que conozca el club y realmente tiene una muy buena llegada con los jugadores.
En lo personal es tu primera Liga afuera de Defensor Sporting y tu primera como titular, ¿cómo te venís sintiendo?
El club me ha hecho sentir muy cómodo desde el primer momento, pero no puedo estar conforme con mi rendimiento personal si al grupo le va mal. Más allá de que personalmente me siento bien, sé que tengo mucho más para dar, y hasta que Aguada no logre una estabilidad y podamos encontrar el camino de la victoria, no voy a estar feliz.
¿Cuán diferente es para un jugador jugar en un equipo como Aguada que en uno como Defensor?
Más allá de que Aguada es el club de los que jugué que tiene la hinchada más numerosa, ya jugué Metropolitano en equipos con hinchada bullanguera como Atenas, donde además teníamos la presión de ascender. Personalmente tomo la hinchada como una motivación extra.