
Ojo con los chinos
El mercado chino crece que da miedo. En este período de pases fueron la segunda liga del mundo que más invirtió en contrataciones.

Jackson Martínez, Ramires y Gervinho, las tres nuevas estrellas que llegaron a China
Ya más que insinuación o amenaza, es una realidad: los chinos se están comiendo al mundo. En todo sentido, pero también en el futbolístico. A tal punto que en este período de pases rompieron todo y se transformaron en el segundo país que más plata gastó en jugadores.

Esta gráfica, elaborada por Transfertmark, lo muestra claramente. La liga que más invirtió en este período de pases fue la Premier, seguida muy de cerca por la Super League, que no es otra que la Primera División de China.
Pero la cosa no queda ahí. La China League One (la B de ese país) está cuarta en la tabla de posiciones. Sí, la B de China gastó más que las ligas de España, Alemania y Francia. Fuerte.
42 millones por Jackson Martínez (del Atlético Madrid al Guangzhou Evergrande), 28 millones por Ramires (del Chelsea al Jiangsu Suning), 18 millones por Gervinho (de la Roma al Hebei Fortune) y 11 milones por Fredy Guarín (del Inter de Milán al Shanghai Shenhua) fueron los desembolsos más importantes.
Y esto no es nuevo. En Shanghai, el equipo de Guarín, ya estaban Tim Cahill, Demba Ba y Gio Moreno; y en Guanghzou, donde desembarcó Jackson, ya hay otros brasileños de nivel como Robinho y Paulinho, bajo la batuta de Luiz Felipe Scolari.
Porque aparte no es que un equipo centralice todo. Son varios. En otro, por ejemplo, están Asamoah Gyan, Darío Conca y Elkeson. con Sven Goran Eriksson como técnico. Y en otros cuadros están Diego Tardelli, Miller Bolaños y Marcelo Martins, por nombrar más jugadores de selección.
La apuesta al fútbol en China es total. Y no es solo algo superficial, sino que están invirtiendo mucho en las bases, para que empiecen a surgir futbolistas chinos de nivel. Tanto es así que desde el año pasado el fútbol es una asignatura obligatoria en todas las escuelas.
Los niños chinos van a empezar a estudiar teoría, táctica y estrategia del fútbol desde muy chicos, con libros de texto específicos. Tarde o temprano van a salir buenos.
"Lo que necesitan es salir de un modelo basado en la simple repetición mecánica de los gestos. Les falta nuestro 'know how'. No saben cómo empezar a desarrollar la inteligencia en el fútbol, cómo mejorar su toma de decisiones en el campo. Eso es lo que necesitan", explicó José Marcet, un occidental que dirige una de las tantas nuevas escuelas de fútbol en China.
Para el 2017, dicen los medios que el gobierno chino tiene previsto construir 20.000 nuevas escuelas de fútbol. La apuesta es cada vez más fuerte. Jackson Martínez y Gervinho son la punta del iceberg, pero la cosa parece ser bastante más grande. Y todos sabemos que con los chinos no se jode.
Esta gráfica, elaborada por Transfertmark, lo muestra claramente. La liga que más invirtió en este período de pases fue la Premier, seguida muy de cerca por la Super League, que no es otra que la Primera División de China.
Pero la cosa no queda ahí. La China League One (la B de ese país) está cuarta en la tabla de posiciones. Sí, la B de China gastó más que las ligas de España, Alemania y Francia. Fuerte.
42 millones por Jackson Martínez (del Atlético Madrid al Guangzhou Evergrande), 28 millones por Ramires (del Chelsea al Jiangsu Suning), 18 millones por Gervinho (de la Roma al Hebei Fortune) y 11 milones por Fredy Guarín (del Inter de Milán al Shanghai Shenhua) fueron los desembolsos más importantes.
Y esto no es nuevo. En Shanghai, el equipo de Guarín, ya estaban Tim Cahill, Demba Ba y Gio Moreno; y en Guanghzou, donde desembarcó Jackson, ya hay otros brasileños de nivel como Robinho y Paulinho, bajo la batuta de Luiz Felipe Scolari.
Porque aparte no es que un equipo centralice todo. Son varios. En otro, por ejemplo, están Asamoah Gyan, Darío Conca y Elkeson. con Sven Goran Eriksson como técnico. Y en otros cuadros están Diego Tardelli, Miller Bolaños y Marcelo Martins, por nombrar más jugadores de selección.
La apuesta al fútbol en China es total. Y no es solo algo superficial, sino que están invirtiendo mucho en las bases, para que empiecen a surgir futbolistas chinos de nivel. Tanto es así que desde el año pasado el fútbol es una asignatura obligatoria en todas las escuelas.
Los niños chinos van a empezar a estudiar teoría, táctica y estrategia del fútbol desde muy chicos, con libros de texto específicos. Tarde o temprano van a salir buenos.
"Lo que necesitan es salir de un modelo basado en la simple repetición mecánica de los gestos. Les falta nuestro 'know how'. No saben cómo empezar a desarrollar la inteligencia en el fútbol, cómo mejorar su toma de decisiones en el campo. Eso es lo que necesitan", explicó José Marcet, un occidental que dirige una de las tantas nuevas escuelas de fútbol en China.
Para el 2017, dicen los medios que el gobierno chino tiene previsto construir 20.000 nuevas escuelas de fútbol. La apuesta es cada vez más fuerte. Jackson Martínez y Gervinho son la punta del iceberg, pero la cosa parece ser bastante más grande. Y todos sabemos que con los chinos no se jode.