
Día 15: Compromiso
Este es el Mundial de lo sicológico primando sobre lo futbolístico. PDA hace un análisis de lo que dejó el último día la fase de grupos.

Se cerró la fase de grupos de Brasil 2014 con un mensaje claro: este es el Mundial del compromiso. Es un torneo donde -por ahora- predomina lo sicológico por sobre lo técnico. Muchas selecciones han emparejado duelos y competido a base de aprenderse un guión y ejecutarlo sin desviarse.
Eso explica tener a Chile, Costa Rica, Uruguay y Grecia en segunda fase. A todos ellos se suman Estados Unidos y Argelia, ambos como segundos de grupo.
El país del norte africano vive el fútbol como pocos en ese continente, pero nunca con actuaciones destacadas en los Mundiales. En este torneo los “zorros del desierto” han superado la fase de grupo a base de un equipo que tira parejo.
Pierde apenas con Bélgica en su debut y le gana bien a Corea del Sur. Su juego se basa en una sólida defensa y un mediocampo bastante técnico. Individualmente no son más que Rusia, pero ayer remontaron el 1 - 0 y defendieron ese empate con mucha energía.
En ese mismo grupo Bélgica avanzó gracias a algunos destellos individuales. Le falta ese actuar de grupo, esa asociación para jugar. El tema es que esta generación belga tiene tanta calidad que por ahora le basta. En octavos tendrá un cruce contra un equipo que funciona como tal, será su primera prueba de fuego.
Ese rival será el Estados Unidos de Klinsmann, que como buen alemán moderno basa su juego en una versátil línea de volantes. Un equipo generoso a la hora de defender y veloz a la hora de atacar, que pudo haber sellado su participación en el partido con Portugal, pero un gol recibido en los descuentos estiró la agonía.
Estados Unidos no es -ni por asomo- más que Portugal si comparamos jugador por jugador. El problema fue que los lusos jamás jugaron a algo parecido al fútbol. Una pobre imagen la que dejaron los portugueses.
Por último, Alemania es Alemania. La jugada de Lahm barriéndose sobre el final del partido para evitar el gol de Estados Unidos es un buen resumen del equipo de Löw. Ghana mostró algunas de sus debilidades, pero es la esperanza europea junto a Holanda.
Como vuelta del destino deberá enfrentar a Argelia en octavos, rival al cual perjudicó conscientemente arreglando un empate con Austria en España 1982. Para los argelinos será un partido con mucho significado, porque siempre es mejor que las cosas se resuelvan dentro del campo de juego.