Gente en obra
La Villa Olímpica de Río de Janeiro abrió sus puertas. Algunos están como en casa, otros denunciaron problemas edilicios.
La Villa Olímpica de Río 2016 ya abrió sus puertas.
El dato que nunca falta: Hay 450.000 condones en la Villa Olímpica para recibir a los deportistas que competirán en Río 2016. Algo así como 42 por persona. Los edificios que recibirán atletas de todo el mundo, abrieron sus puertas este domingo, pero tal vez sean demasiados preservativos, porque algunos países ya anunciaron que no se quedarán en esos edificios.
El Comité Olímpico Australiano fue el primero en tomar la drástica decisión de sacar a todos sus atletas de la Villa Olímpica. Ninguno se quedará ahí, al menos hasta que no se solucionen los problemas que denuncian. "Los problemas incluyen sanitaria, cables expuestos, escaleras a oscuras y suelos sucios con la necesidad de una limpieza masiva. Hay graves problemas con el agua y se ven charcos en el suelo y en zonas con cables", dijo la jefa de misión de Australia.
La verdad es que los canguros fueron bastante exigentes. Hiceron pruebas que no resultaron satisfactorias: "Decidimos hacer un estrés-test, utilizando todas las canillas, los inodoros, la luz. Pero el sistema falló. El agua bajó por las paredes y había un fuerte olor a gas en algunos departamentos de la Villa", explicaron. Gran Bretaña y Nueva Zelanda sufrieron problemas similares.
En la web oficial de Río 2016, no permanecieron en silencio. "El domingo por la tarde, la jefa de la misión australiana, Kitty Chiller, se mostró confiada en que su equipo podrá ingresar el miércoles (27 de julio) a la villa y resaltó que toda villa tiene problemas iniciales", dice el artículo oficial. También allí se destaca la palabra del Comité de EEUU: “Como pasa en cada Juego, estamos trabajando con los organizadores locales para solucionar problemas pequeños y asegurarnos de que la villa está lista para los atletas del equipo de EEUU”.
Por su parte, el equipo británico, que también sufrió contratiempos, lanzó un comunicado optimista: “Confiamos en que nuestros cuartos estarán listos para recibir a los atletas y la villa tendrá los estándares más altos. Aunque nos encontramos con algunos problemas de mantenimiento, esto no es poco común en estructuras recién construidas de este tipo y hemos trabajado duramente para superarlos”.
Las autoridades del Comité Organizador, ya mandaron mano de obra para solucionar cuanto antes todos estos detalles. Más de 600 personas trabajan en ello.
La residencia de los atletas está en el barrio Recreio dos Bandeirantes en el oeste de Río. Los apartamentos tienen 13.000 inodoros, 275.000 perchas de ropa y 18.500 camas.
El Comité Olímpico Australiano fue el primero en tomar la drástica decisión de sacar a todos sus atletas de la Villa Olímpica. Ninguno se quedará ahí, al menos hasta que no se solucionen los problemas que denuncian. "Los problemas incluyen sanitaria, cables expuestos, escaleras a oscuras y suelos sucios con la necesidad de una limpieza masiva. Hay graves problemas con el agua y se ven charcos en el suelo y en zonas con cables", dijo la jefa de misión de Australia.
La verdad es que los canguros fueron bastante exigentes. Hiceron pruebas que no resultaron satisfactorias: "Decidimos hacer un estrés-test, utilizando todas las canillas, los inodoros, la luz. Pero el sistema falló. El agua bajó por las paredes y había un fuerte olor a gas en algunos departamentos de la Villa", explicaron. Gran Bretaña y Nueva Zelanda sufrieron problemas similares.
En la web oficial de Río 2016, no permanecieron en silencio. "El domingo por la tarde, la jefa de la misión australiana, Kitty Chiller, se mostró confiada en que su equipo podrá ingresar el miércoles (27 de julio) a la villa y resaltó que toda villa tiene problemas iniciales", dice el artículo oficial. También allí se destaca la palabra del Comité de EEUU: “Como pasa en cada Juego, estamos trabajando con los organizadores locales para solucionar problemas pequeños y asegurarnos de que la villa está lista para los atletas del equipo de EEUU”.
Por su parte, el equipo británico, que también sufrió contratiempos, lanzó un comunicado optimista: “Confiamos en que nuestros cuartos estarán listos para recibir a los atletas y la villa tendrá los estándares más altos. Aunque nos encontramos con algunos problemas de mantenimiento, esto no es poco común en estructuras recién construidas de este tipo y hemos trabajado duramente para superarlos”.
Las autoridades del Comité Organizador, ya mandaron mano de obra para solucionar cuanto antes todos estos detalles. Más de 600 personas trabajan en ello.
La residencia de los atletas está en el barrio Recreio dos Bandeirantes en el oeste de Río. Los apartamentos tienen 13.000 inodoros, 275.000 perchas de ropa y 18.500 camas.