Hristo Stoichkov es considerado el mejor futbolista búlgaro de la historia. En sus comienzos supo brillar en CSKA Sofia para luego, en la década de los 90, pasar a Barcelona y convertirse en estrella. Con el equipo culé Stoichkov consiguió cinco Ligas, la Copa de Europa, cuatro Supercopa de España, dos Copa del Rey, una Recopa de Europa y dos Supercopa de Europa entre los años 1990 y 1998.

Sin lugar a dudas el búlgaro es un entendido en lo que se refiere a Barcelona y en diálogo con el sitio Sport, reflexionó sobre la llegada de Luis Suárez al equipo catalán.

Más allá de ser crack e ídolo en el Barça, Stoichkov, al igual que Luis, se equivocó un día propinándole un pisotón a un árbitro al poco tiempo de llegar a Barcelona en 1990. Por si fuera poco fue en una Supercopa que Barcelona perdía 1 - 0 con Real Madrid.

Su sanción fue menor que la de Lucho, seis meses en un principio y luego fue reducida a dos meses, sin embargo, el búlgaro recuerda así lo ocurrido: "Fue un desastre porque yo amo al fútbol y no poder jugar fue como vivir sin respirar. Es cierto que la familia y los amigos te animan a seguir, muchos aficionados también te muestran su aprecio y los compañeros de vestuario te dan golpes en la espalda pero al final del día te echas en tu cama y te vienes abajo porque el domingo tú no vas a vestirte de corto. Y el siguiente, tampoco. Ni el siguiente. Yo acababa de llegar a Barcelona con muchos sueños por cumplir y hubo muchos momentos en que pensé que todo se iba al garete…".

Sin lugar a dudas lo que se le viene a Suárez no va ser nada fácil de afrontar pero no hay otra solución que trabajar y aprender. Como dice Stoichkov: "Yo sabía que me había equivocado y que le había fallado a todos los que habían confiado en mí".

No tengo duda que Suárez es consciente de su error, y de que no es el primero que comete. Pero también debe saber que aún queda mucho por delante en su carrera y tiene todo para seguir siendo uno de los mejores jugadores de fútbol de la actualidad.

Por si fuera poco un nuevo desafío lo espera, jugar en Barcelona. Un club que ha hecho escuela en los últimos años y en el que compartirá delantera junto con Lionel Messi y Neymar, otros dos clase A de estos tiempos.

Como ya lo manejó Felipe Fernández en La moral puertas afuera, creo que Suárez está en el décimo estadio del Viaje del Héroe, en El Camino de Regreso. Suárez va enfrentar unos meses muy difíciles, volverá a agachar la cabeza y entrenar más duro que nunca, (como ya lo hizo anteriormente en Liverpool tras su suspensión) para llegar a la Resurrección, donde usará todo lo aprendido y luego habrá lugar para el Retorno, donde llegará a la victoria, al éxito.

"Hoy todo lo ve negro, pero mañana el cielo se abrirá y, si encima este cielo es azulgrana, todavía será más bonito" se anima a aventurar Stoichkov. De todas formas, todos sabemos que a fin de cuentas mañana el cielo será Celeste y este animal, que ya es goleador histórico de la selección, volverá más fuerte que nunca.