Así es el fútbol
Se nos fue la primera fecha, fuimos más, pero los goles se hacen no se merecen. Queda esa espina clavada.
Foto: Marcelo Santa Cruz.
Comenzó un nuevo campeonato y, como en todo comienzo se tienen ciertas expectativas. Íamos al Parque Artigas a ver la mejor cara del equipo de Saralegui, sabiendo que son los primeros partidos y muchas veces no se encuentra el mejor funcionamiento.
En un primer tiempo muy malo, que se hizo trabadísimo, y el estado de la cancha que no ayudó a realizar un buen juego, las mejores chances de gol las tuvo el canario, que encontró en el golero de la visita la mejor figura de esa primera parte más allá de lo pobre que fue.
Pero como dicta la ley inexorable del fútbol “goles errados, son goles en contra”. Al no poder acariciar el balón con la red, el equipo de la IASA la primera que tuvo la mandó a guardar.
Así culminaron los primeros cuarenta y cinco, 1-0 cayendo en el marcador.
En el segundo tiempo el equipo buzón retrasó sus líneas para cuidar el resultado y nuestro equipo fue al frente en busca de la paridad, sin ideas, pero con ganas. Y eso cuenta, se intentó y se tuvo la chance cuando apenas comenzaba la segunda mitad. Tras error del golero Irazún, Blanes tuvo en sus pies la situación más clara, hasta del partido me animo a decir, solo con todo el arco a disposición. Insólitamente lo erró y creo que el balón fue a parar a la calle trasera de la tribuna de atrás de ese arco.
Minutos después se hace echar por una supuesta agresión, no la vi sinceramente, estaba mirando dónde estaba la pelota. Quiero entender que el juez lo echó por buen tipo, luego de errar ese gol necesariamente lo mandó a las duchas. Mal día para Blanes, que hasta el momento era uno de los que más quería con el balón.
El técnico mandó las variantes y hasta terminamos jugando con Chavasco, “Falucho” Silva, Jaime y Charquero, con un solo recuperador (el “Nano”) y, como es sabido, con un jugador de menos; mientras que la visita seguía firme con la idea de defender y salir de contra.
Tras un córner la pelota pega en el vertical tras gran golpe de cabeza de Rodrigo Cabrera. Otra más para el local, que luego no pudo llevarse por delante a la visita. El marcador se cerró con un mano a mano de Santiago González contra Góngora, que no pudo hacer nada.
Se nos fue la primera fecha, fuimos más, pero los goles se hacen no se merecen. Así es el fútbol. Queda esa espina clavada, aún sigo quemado, pero ya tenemos en unos días la revancha y el equipo va a dar lo mejor de sí.
Arriba, esto recién comienza, el camino es largo y este deporte tan lindo te da la revancha siempre.
En un primer tiempo muy malo, que se hizo trabadísimo, y el estado de la cancha que no ayudó a realizar un buen juego, las mejores chances de gol las tuvo el canario, que encontró en el golero de la visita la mejor figura de esa primera parte más allá de lo pobre que fue.
Pero como dicta la ley inexorable del fútbol “goles errados, son goles en contra”. Al no poder acariciar el balón con la red, el equipo de la IASA la primera que tuvo la mandó a guardar.
Así culminaron los primeros cuarenta y cinco, 1-0 cayendo en el marcador.
En el segundo tiempo el equipo buzón retrasó sus líneas para cuidar el resultado y nuestro equipo fue al frente en busca de la paridad, sin ideas, pero con ganas. Y eso cuenta, se intentó y se tuvo la chance cuando apenas comenzaba la segunda mitad. Tras error del golero Irazún, Blanes tuvo en sus pies la situación más clara, hasta del partido me animo a decir, solo con todo el arco a disposición. Insólitamente lo erró y creo que el balón fue a parar a la calle trasera de la tribuna de atrás de ese arco.
Minutos después se hace echar por una supuesta agresión, no la vi sinceramente, estaba mirando dónde estaba la pelota. Quiero entender que el juez lo echó por buen tipo, luego de errar ese gol necesariamente lo mandó a las duchas. Mal día para Blanes, que hasta el momento era uno de los que más quería con el balón.
El técnico mandó las variantes y hasta terminamos jugando con Chavasco, “Falucho” Silva, Jaime y Charquero, con un solo recuperador (el “Nano”) y, como es sabido, con un jugador de menos; mientras que la visita seguía firme con la idea de defender y salir de contra.
Tras un córner la pelota pega en el vertical tras gran golpe de cabeza de Rodrigo Cabrera. Otra más para el local, que luego no pudo llevarse por delante a la visita. El marcador se cerró con un mano a mano de Santiago González contra Góngora, que no pudo hacer nada.
Se nos fue la primera fecha, fuimos más, pero los goles se hacen no se merecen. Así es el fútbol. Queda esa espina clavada, aún sigo quemado, pero ya tenemos en unos días la revancha y el equipo va a dar lo mejor de sí.
Arriba, esto recién comienza, el camino es largo y este deporte tan lindo te da la revancha siempre.
