Después de iniciar la liga con dos derrotas el fusionado encontró su primera victoria contra el que en los papeles era el rival más difícil. El equipo parece encontrar la memoria colectiva que siempre lo caracterizó y le permitió ser protagonista. Ahora se va de copas.

Si bien los tres primeros partidos tuvieron el común denominador de contar con un trámite parejo, la capacidad de resolverlos por parte del equipo fue bien distinta. En el debut contra Aguada, aún sin jugar bien ofensivamente en ningún momento y dependiendo en exceso de lo que hacía el debutante Garcés y los aportes del capitán Castrillón, el equipo se las arregló para tener una ventaja de 8 puntos promediando el tercer cuarto. Sin embargo a partir de ahí, la falta de gol y algunos errores defensivos arrimaron al rival que en el final, a base de libres y cometiendo menos errores, se llevó el punto.

En la segunda fecha DSC enfrentó a Biguá. Aunque en la mayor parte del partido el juego colectivo no estuvo al nivel de lo que el equipo es capaz de mostrar, se sumaron a los aportes de Garcés y Castrillón que repitieron buenas actuaciones, los buenos desempeños de Collum y de Cabot. Sin embargo cuando el partido estaba casi cerrado -siete puntos arriba a falta de poco más de un minuto para el cierre- una serie de errores defensivos hicieron que Biguá lograra llevar el partido al alargue y en el mismo fuera más contundente para llevarse el punto.

Luego fue el turno de Hebraica en cancha de Bohemios. Por momentos se vio algo de la tónica defensiva que se espera del equipo. Buena presión, defensa colectiva con todos los jugadores involucrados y buen bloqueo del rebote, a pesar de las carencias debajo del aro debido a la ausencia de Izaguirre. En un partido sumamente parejo, la noche espectacular de Robby Collum más los aportes importantes de Castrillón y Garcés y la buena conducción en el cierre del partido de Diego García inclinaron la balanza a nuestro favor. El juego se cerró con un robo de Federico Álvarez y libres de Cabot que pusieron el definitivo 86 - 81.

En resumen, luego de las primeras tres fechas el equipo parece que de a poco va encontrando un mejor rendimiento colectivo sustentado en buenos trabajos defensivos y mejorando la fluidez ofensiva que en los dos primeros partidos no mostró en cancha. Si bien cuenta con la sensible baja de Izaguirre, el fusionado se llevó el punto contra probablemente la mejor tabla de la Liga y encontró a un Castrillón en buen nivel. Defensor Sporting parece empezar a acomodarse en esta nueva edición de Liga y probablemente termine siendo animador de la misma como lo ha sido en la última década.

Lo que viene…

A partir del martes 8/10 DSC disputará la fase de grupos de la Liga Sudamericana. Los rivales serán Caquetios de Venezuela, Universidad de Concepción de Chile y Baurú de Brasil, en ese orden. Como refuerzo se estará incorporando Thiago Labatte, pivot brasileño que tuviera un pasaje por el club en la temporada 2008-2009. No formará parte del plantel Sebastián Izaguirre que sigue recuperándose del desgarro y se espera retorne para la siguiente fecha de la Liga Uruguaya.