Visitábamos al líder, de antemano la mayoría creía que era un trámite para Danubio, que podía llevarse el partido sin grandes problemas. Yo creo que tan así no fue.

Si bien fue un 4 - 1, el resultado a mi parecer es mentiroso. Uno que no lo vio puede decir 'lo pasó por arriba'. Tampoco fue así, quizás fue el local quien mejor hizo las cosas, pero la diferencia parece exagerada.

Empezó mejor el conjunto de Ramos, pero sin lastimar el arco custodiado por Góngora. La primera fue un remate a media distancia de Mayada pasando los 15´ que pasó muy cerca.

El canario no tenía el balón y era intermitente y sin ideas cuando la poseía, pero en la primera clara que tuvo la mando a guardar. Marco Antonio, el brasileño que debutaba, marcó el gol de la visita de media distancia, imposible para Ichazo -de gran trabajo en los 90'-.

No se apresuraba en su juego la “franja” en busca del empate, tampoco aparecía con ideas cuando la tenía, pero tomó el balón González y se mandó contra los rivales, pero Torres lo frena limpiamente con una barrida. El línea no ve foul pero sí el juez.

A mi entender jamás lo tocó, se deja caer y el juez compra, y aparece un especialista en tiros libres y marcó el empate. El “Bola” Lima puso tablas en el marcador y así se fueron al descanso.

Los primeros veinte minutos los manejó Danubio a su placer, sin profundidad, pero luego reacciono el Juve, y así se consagró el empate en la primera mitad. Aquí no hay que hablar de merecimiento porque el empate estuvo bien por lo que se vio, pero no la forma a la que llega la franja al gol, porque sigo manteniendo que no fue foul.

El segundo tiempo arrancamos mejor  teniendo tres situaciones claras de gol, fue la de Marco Antonio la más clara cuando paso con velocidad a tres franjeados y su remate se fue apenas afuera cerca del parante derecho del guardameta.

El local no se quedaba e iba en busca de dar vuelta el marcador. En un pase profundo Mayada no la deja ir, llega antes que Góngora y la mete al medio, la defensa se duerme y Quiñones pone el 2 - 1 para los de la Curva. Mérito de ellos y error nuestro, que terminamos pagando caro.

Luego llega otro gol de tiro libre de Pablo Lima, donde hay que analizar bien toda la jugada previa para ver que se llega ahí en una pérdida de balón del canario por interposición del juez al balón, cuando la tenía dominada Latorre y antes de la falta pitada, Álvez le comete falta al defensa canario.

No son excusas pero sí realidades, por lo que no debió cobrarse. Otro error del juez que aprovechó Lima.

El partido no se pierde por culpa del juez, no supimos aprovechar las que tuvimos. Ingresa el pibe Báez y erra un gol casi cantado. El planteamiento fue muy bueno, salió casi a la perfección, pero ciertos errores te matan, y fue lo que pasó, errores nuestros y a mi entender dos incidencias claves del juez nos llevaron a perder por “goleada”.

Como decía anteriormente, quizás Danubio mereció más y se llevó los tres puntos, pero la diferencia no fue tal.

Terminó pintando el score una vez más Quiñones, luego de una gran jugada de equipo, hubo muchos toques ente sus jugadores y el delantero definió al borde del área marcando el cuarto gol locatario.

Sin remordimientos de lo que pasó, hay que dejarlo atrás y empezar a levantar cabeza, en seis fechas solo cosechamos una victoria. No hay que dormirse en el tema descenso, si bien hay muchos cuadros abajo, todos juegan y suman sus puntos.

Nos enfrentaremos a Racing en el Parque Artigas luego del receso por las Eliminatorias, hay que sumar de a tres, con la premisa de no dejar más puntos de local.