“Con mente positiva, salen mejor las cosas”

Entrevista con Luciano Parodi.

_mjm4707.jpg

Sanducero, el básquetbol lo trajo a Montevideo a los 13 años. Debutó en el primer equipo de Hebraica y Macabi con 15 años. Fue campeón de la LUB 2011/12, de la que fue electo mejor sexto hombre, con apenas 18 años.

Esa temporada, con Marcelo Signorelli como Entrenador Jefe, Hebraica contó con el trabajo del Lic. Gabriel Gutiérrez como Psicólogo del Deporte.

Sobre todo esto y más, conversamos con Luciano Parodi en nuestra columna de psicología en el deporte.

¿Cómo arranca el básquetbol en tu vida?

Empiezo de muy chiquito, a los 4 años, porque mi padre jugó al básquet y siempre estuve vinculado acompañándolo a las canchas.

Empezaste desde chico en Paysandú…

Sí, primero jugué en Wanderers que fue el equipo donde jugaba él. Me llevaba a las prácticas y siempre estaba ahí. Después pasé a Allavena y a los 13 años Hebraica se interesó por mí y me trajeron para acá a Montevideo.

¿Cómo fue tu llegada a Montevideo?

Me vine con mi familia: mi hermano, mi hermana y mi madre. Primero me vine a una casa de Hebraica que también había traído a otros chicos, y ahora ya estoy independiente.

¿Te costó la adaptación de vivir y jugar en Montevideo?

En el básquet no mucho. Sí el extrañar a la familia que quedó en Paysandú, los primeros años se extraña mucho, pero ahora ya estoy acostumbrado.

¿En qué momento decidiste querer dedicarte a esto como profesional?

No sé si fue un momento… se fue dando. Me gustaba mucho el básquet, siempre decía que quería jugar al básquet y se fue dando que estuve en el primer equipo de Hebraica. Ahora sí estoy con eso más que nada. Trato de no perder el estudio, aunque a veces es difícil con el básquet, que ahora es mi prioridad. Terminé el liceo, y estuve evaluando si entraba a la facultad o no, pero por un tema de horarios por ahora no.

Hablando sobre el jugador… ¿en qué fortalezas te destacás?

Me parece que como base leo bastante bien el juego. Me entrego todo en la defensa, y hago lo que el equipo necesita. No soy un jugador que quiera hacer los puntos de él ni jugar para él sino jugar para el equipo.

¿Cómo es tu rutina habitual de entrenamiento?

Doble horario todos los días. En los últimos años he madurado y he logrado que quedarme a tirar sea una extensión de la práctica. Y si no es a tirar, es a hacer movimientos especiales. También el tema físico, ir un rato antes para hacer pesas o cosas así.

¿Cuánto de un jugador creés que nace, y cuánto se hace con el entrenamiento?

Por decirte un porcentaje, creo que es 30% de talento y 70% de trabajo.

¿Hay algún jugador que tengas como referente?

A nivel internacional muchos, pero de la actualidad me gusta Stephen Curry. Y nacional creo que Martín Osimani es un buen ejemplo.

Te ha tocado trabajar con Psicólogo del Deporte en Hebraica. ¿Cómo fue esa experiencia?

Fue una experiencia nueva, porque nunca había trabajado. Me gustó mucho, porque yo soy de pensar que la psicología te ayuda mucho. Si vos tenés una mente positiva te salen mucho mejor las cosas. Y si no estás bien en algún punto, reforzarlo, y eso se ve reflejado en la cancha.

¿Hacés hoy día cosas que te hayan quedado de ese trabajo?

Lo hago sí. Sé que estoy mal en algo, trato de cambiarlo, de pensar positivo.

¿Sos de estar ansioso antes de los partidos?

Sí, en los partidos importantes me pongo bastante ansioso antes, pero cuando empieza el calentamiento ya se me va todo. Eso lo trabajamos mucho con Gabriel, que fue el psicólogo de Hebraica. Antes de los partidos importantes me ponía bastante ansioso y ahora estoy más calmado. Trabajamos una rutina de visualizar imágenes positivas o jugadas del partido. En vez de imaginarme perdiendo una pelota, me imagino haciendo un buen pase por ejemplo.

Un momento bastante psicológico en el básquet es el del tiro libre, ¿tenés alguna rutina?

Sí, trato antes de agarrar la pelota de pensar en hacer lo mismo de siempre. Lo mismo del entrenamiento, tratar que el afuera no me afecte. Repetir siempre la misma mecánica.

Por los planteles en que has estado, te ha tocado entrar mucho desde el banco, cuando estás allí ¿dónde está tu foco?

Trato de ver cómo está el partido y ver en qué puedo ayudar al equipo cuando entre. Por ejemplo, si el equipo está más lento, sacar la pelota más rápido.

Para los Psicólogos del Deporte, también es muy importante trabajar sobre lo grupal… ¿Cuán importante consideras que es tener un buen grupo para tener buenos resultados?

Creo que es la clave. Si no hay un buen grupo, si no se llevan bien, a la larga no llegas a ningún lado.

¿Cuáles son las claves para que un equipo funcione como tal?

Más que nada la comunicación. Hay que tener buena comunicación. Por ejemplo, si hay algún problema poder hablarlo y no dejar que pase a mayores, porque a la larga trae más problemas.

Has tenido muchos entrenadores ¿cuál es para vos el perfil de entrenador ideal?

El que tiene las ideas claras y te las sabe transmitir. Hay algunos entrenadores que tienen la idea pero no le llegan al jugador y entonces después no podés plasmarlo en la cancha.

Estás jugando Liga desde los 15 años ¿Cuáles son tus próximos objetivos?

El primer objetivo es seguir mejorando. Después seguirme afianzando en la Liga, no sé si como base titular o suplente, pero tratar de jugar varios minutos. Y a la larga si se da la salida a otro país me gustaría mucho.

¿Qué mensaje le das a los jugadores que están en formativas y que quieren llegar a ser profesionales?

Que entrenen duro y que sean pacientes, que los momentos llegan. Si les gusta el básquet, más que nada que sean pacientes, y en el momento en que les toca entrar dar todo.

Hay un momento clave para los jugadores que recién se suman a un plantel profesional, que vienen acostumbrados a jugar y tienen que esperar, muchas veces mirar los entrenamientos y partidos de afuera ¿qué mensaje le darías a los jugadores que están en esa situación?

Primero que nada que por algo están ahí. Que no se pongan ansiosos. Generalmente hay muy buenos jugadores antes, o jugadores más experientes, es por eso que no juegan. Que traten de ver las cosas buenas de esos jugadores, y traten de aplicarlas y entrenar duro para cuando les toque el momento poder estar bien.