La razón por la que mi mundo gira

Vuelve el básquetbol al barrio, vuelve la emoción a los días, vuelve Aguada para todo el mundo.

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Foto: Somos Aguada
Son solo horas lo que nos separan, solo faltan horas para verte de nuevo.

Sobra decir que ya despertar no es lo mismo, que el barrio está expectante de un nuevo encuentro, que setiembre florece y con él este amor.

Ir atrás de esos colores, volver a soñar, volver a vibrar y sentir lo que solo Aguada provoca. Es sabido que no se puede poner en palabras todo lo que significa para tantos y tantas; pero quien lo siente, lo sabe.

Ansiedad, nervios, alegrías y derrotas, sabemos de eso. Sabemos de un carnaval que dura más que un año, sabemos de una fiesta única que solo ocurre en una tribuna, sabemos de recorrer cada cancha y cada lugar donde esos colores nos llamen, sabemos de esta familia enorme que vuelve a juntarse atrás de una ilusión que nos hace uno.

La primera fecha. Un partido lindo para aquel que no recuerda derrotas frente al equipo de Palermo en por lo menos 5 años, y no se supo de un partido que se haya perdido frente a ellos en el Palacio Peñarol.

Nuestro equipo con grandes modificaciones. Nuevo cuerpo técnico y, pese a las contrariedades, finalmente Leandro García Morales podría estar habilitado para jugar la Liga Uruguaya.

Es mañana, ver salir a la cancha a Martín Osimani, Pablo Morales, Rodrigo Trelles, Nicolás Borsellino, Lucas Vasalucci, Gonzalo Iglesias, Andrés Dotti, Christopher Moss y Robert Hornsby. El equipo que va dispuesto a triunfar.

Vuelve el básquetbol al barrio, vuelve la emoción a los días, vuelve Aguada para todo el mundo. Son solo horas para que vuelva a encenderse esa razón por la que mi mundo gira.