Las mil y una manos carboneras

El arco de Peñarol no escapa a los problemas generales del club.

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Bengochea, en una entrevista brindada al programa radial “Y te digo más”, dio a entender que el rendimiento del arquero Migliore era acorde al resto del plantel. Eso es verdad, Peñarol juega muy mal. Salvo algunos minutos de algunos partidos, lo del elenco carbonero es pobre, y el arco no escapa a esa realidad.

¿Peñarol no gana por su arquero? De ninguna manera. Hay un montón de factores, y uno de esos sí es el arco.

Migliore suele ser autocrítico y él debe saber mejor que nadie que no está en un buen nivel. La prensa suele desconocer muchísimo el puesto, por eso las críticas muchas veces se basan en cosas intangibles como “no da seguridad” o “no se ha mostrado firme”.

Tampoco es que hay que tener un master en física cuántica para entender el puesto de arquero, pero que el comentario de Scelza cada vez que hay un gol sea “el arquero hizo la lógica” no ayuda.

Esto podría explicar por qué Migliore se enojó con algunos periodistas por las incesantes críticas y disparó antes del partido contra Danubio: "por ahora tengo el arco menos vencido".

Es verdad, Peñarol recibió en nueve partidos, nueve goles en contra. No es un gran número, pero solo lo supera Danubio que recibió un gol menos.

De esos nueve goles recibidos, hay por lo menos cuatro que la responsabilidad del arquero es clara y da la casualidad que son en las últimas cuatro fechas. Dicho de otra manera, el último mes de Migliore fue malo.

Las primeras cinco fechas no mostró problemas en el arco aurinegro. Contra Cerro y Defensor no recibió goles y en los convertidos por Sud América, Tacuarembó y Juventud no hubo responsabilidad del golero argentino.

En la sexta fecha, Peñarol le gana a El Tanque 2 - 1:



El gol lo convierte Zunino luego de un mal pase de Pacheco en la mitad de la cancha. El jugador de El Tanque no remata bien, el disparo no fue potente aunque sí rasante, pero Migliore no estuvo rápido para sacar el pie. La pelota termina pasando por debajo de su botín derecho.

A la fecha siguiente Peñarol vence a River, también por 2 - 1:



En el gol darsenero, más allá de si hubo mano o no del jugador que salta y termina asistiendo al “Morro”, la decisión de Migliore de salir tan lejos es errada.

Es verdad que el centro es bombeado y que si el arquero tenía un punto de partida más adelantado podría haber llegado sin complicaciones. Pero partió de muy atrás y llega tarde y con la pelota ya a baja altura. Mientras que en el gol de El Tanque hay un error de reacción, acá es de decisión.

Una semana después el rival fue Danubio, que venció a Peñarol 3 - 2:



En el tercer gol de Danubio la reacción de Migliore es -por lo menos- discutible. No creo que sea un centro fácil para salir, el jugador de Danubio cabecea un paso afuera del área chica y casi sin saltar, por lo que la pelota no venía con tanto vuelo. Y a eso le sumamos el sol en contra.

Lo que sí es discutible es la posición del arquero cuando se da el cabezazo. Migliore decide no salir (decisión que me parece acertada), pero cuando el jugador cabecea se encuentra a solamente un paso del palo derecho, lo que le hace imposible llegar al otro palo, donde finalmente fue la pelota.

Por último el partido contra Atenas, donde Peñarol empató 1 - 1:



El gol de Atenas lo convierte Rafael Acosta, que recibe un pase contra la derecha del área (si tomamos en cuenta el punto de vista del arco de Peñarol) y remata de zurda, de primera y al palo derecho de Migliore.

En este caso se vuelve a dar un problema de decisión del arquero. En vez de esperar y reaccionar, se la juega e intuye un pase al medio que nunca sucedió, por eso descuida su palo más próximo y cuando el jugador remata tiene todo el cuerpo volcado a la izquierda.

¿Todo esto justifica un cambio de arquero? No estoy ni por asomo capacitado para responder eso, Bengochea sabrá mejor que nadie si el ánimo de Migliore sigue siendo bueno, si Guruceaga todavía no está para titular. Son decisiones del DT.

También hay cierta impaciencia por el debut del último arquero de la selección sub 20, pero la trayectoria de un arquero no es igual a la de un jugador de cancha. Son contadas las excepciones de arqueros juveniles en equipos importantes que hayan salido bien.

El mal rendimiento en el arco no deje de ser un reflejo de la situación general de Peñarol. Según un informe del periodista Bassorelli de La República, por Peñarol pasaron 177 jugadores entre el 2004 y el 2013. Y del 2004 a la fecha pasaron 24 arqueros por el primer equipo.

No solo eso. En las últimas tres selecciones sub 20, hubo por lo menos un arquero mirasol: Leando Gelpi (2011), Washington Aguerre (2013) y Thiago Cardozo y Gastón Guruceaga (2015).

Si Peñarol forma arqueros que están al nivel de selecciones juveniles, ¿por qué se contratan tantos? Tal vez la respuesta la tenga el periodista Andrés Reyes: "Quizás detrás de cada Cavallero, de cada Bologna, de cada Migliore, haya un intento por crear un nuevo Chilavert”.


Los 24 arqueros desde el 2004: Federico Elduayen, Juan Obelar, Fernando González, Juan Castillo,  Sebastián Pereyra, Fernando González, “Popi” Flores, Sebastián Sosa, Adrián Berbia, Amaral Díaz, Guillermo Reyes, Nicolás Biglianti, Damián Frascarelli, Gonzalo Noguera, Gonzalo Salgueiro, Pablo Cavallero, Ernesto Hernández, Leandro Gelpi,  Fabián Carini, Danilo Lerda, Enrique Bologna, Pablo Migliore, Washington Aguerre y Gastón Guruceaga.