Pasaron siete años desde aquel 2008 cuando Nacional le ganó 4 - 0 a Defensor en el Parque Central, un estadio en plena remodelación y con una capacidad muy inferior a la actual. En Defensor era figura y goleador Seba Fernández, mientras que en Nacional hacía sus primea armas el Bocha Cardaccio, hoy rivales en los bandos opuestos.

El arco de Nacional estaba custodiado por Alexis Viera, que en este momento atraviesa una recuperación larga y dura para volver a jugar al fútbol. Algunas cosas han cambiado después de varios años, lo que no cambió fue el marcador.

En aquel partido Deivis Barone había puesto el 1 - 0 y a los pocos minutos se fue expulsado tras una criminal patada en la cabeza de Papelito. El Chengue Morales fue el encargado del segundo, mientras que el Hueso Romero y Victorino sellaron el 4 - 0 definitivo.

Una situación parecida se había dado la última vez que los tuertos visitaron La Blanqueada: se fueron con un 5 - 2 demoledor y con un Iván Alonso figura al igual que hoy. Este equipo violeta, al cual le hemos ganado de todas las formas habidas y por haber, llegó al GPC prácticamente entregado.

En los últimos partidos de Nacional en el campeonato el técnico venía realizando algunas variantes. La línea de volantes con dos medias puntas jugando bien abiertos ya casi no se utiliza, y el sistema que más le gustaba a Gutiérrez se fue esfumando con la partida de De Pena a Inglaterra y con el bajo nivel de Leandro Barcia. El argentino Barbaro no terminó de convencer y el técnico optó por buscar definitivamente otro sistema táctico.

Hasta la fecha pasada parecía que a Munúa no le daban los números. Quería jugar con cuatro atrás, doble 5, dos volantes por afuera, enganche y 2 puntas. El rendimiento de algunos jugadores le fue facilitando la tarea el DT y el equipo de ayer (más parecido al que jugó contra Cerro) parece ser el ideal.

Con Porras como 5 definido, con Rodrigo Amaral jugando como enlace pero dando una mano para el orden en la marca, más Romero y Abero jugando por afuera. La dupla ofensiva está intratable y cada día más firme. Seba Fernández e Iván Alonso son los dos goleadores del torneo y son pieza inamovible en el sistema que sea.

Tal fue el acierto del técnico que, en el cuarto gol, Amaral es quien pone una bola perfecta en cortada, el Colo manda el pase al fondo y es Abero quien termina definiendo. Los tres volantes más adelantados generaron una de las mejores jugadas de la tarde, que a la postre terminó siendo el cierre del marcador.

En el fondo, Polenta y Gorga se afirman cada día más, Munúa intento darle posibilidades a Aja y a Malvino, tal vez pensando en el semestre que viene, pero ninguno terminó de convencer y el gran nivel de Seba hizo que se quedara con el puesto.

En el lateral derecho no hay duda que si Fucile está bien es el dueño de la zona. Por izquierda Espino no termina de convencer más que nada en la culminación de las jugadas, y encima la semana pasada había tenido errores en defensa, pero sigue teniendo la confianza y parece ser titular inamovible.

Nacional sigue en búsqueda del equipo ideal, aquel equipo que mejor se adapte a la idea del técnico, una idea que se afirma con los buenos resultados y las goleadas, y por sobre todas las cosas porque da gusto ver a este Nacional jugar al fútbol.

Puede tener buenas y malas tardes pero siempre juega o intenta. Ayer fue contra el mejor equipo de la actualidad del fútbol uruguayo, que está realizado año tras año buenos papeles en la copa. Era un partido clave por la tabla y por el futuro, fue goleada y Nacional se afirma en el camino.

Va a ser un campeonato duro y hay que seguir mejorando. Se viene Fenix, un rival que siempre complica y encima intentará seguramente llevarnos a la cancha que más pueda perjudicar la buena intención de juego de este equipo.