Volverr
Fue en el mes cuarto del presente año, fue en aquel entonces cuando me dijeron que este tren de buena voluntad, puesto en marcha con el ecológico combustible de la humildad, iba a hacer una parada.
Entrada en boxes, que viví con mucha congoja, no obstante, como todo vende humo, me corresponde decir que: “Nunca dudé de este proyecto llamado PDA”.
Una vez, en seguro de paro, mi depresión se hizo notar: engordé, me dejé crecer la barba y escuché los tangos más tristes de Carlos Gardel. Me vi celebrando el 49° título de mi querido Peñarol, sin tener cómo plasmar el inexplicable sentimiento que me produce la rayada en estas tan apreciadas líneas.
Pero incluso en mis peores momentos, siempre guardé escondida una esperanza humilde, que es toda la fortuna de mi corazón. Y así como renace una flor en primavera, PDA volvió, y con PDA volví yo, bajo el burlón mirar de las estrellas…
En aquel gélido abril, el aurinegro quedaba eliminado de la Libertadores y comprometía sus posibilidades fecha a fecha en el clausura.
Hoy por suerte, la realidad que nos convoca es distinta. PDA 2.0 encuentra a un Campeón del Siglo XX fortalecido, luciendo su cinturón de campeón, y midiéndose con equipos fuertes del viejo continente.
Lo que me dejó la gira:
Creo que el carbonero, de mitad de cancha hacia adelante, tiene un plantel con muchos argumentos para pelear el torneo continental que se avecina. No obstante, a nivel defensivo hay muchas cuestiones a corregir. Aunque quizás sea muy pronto, no creo que Emiliano Albín sea el adecuado para ocupar el lateral derecho. Esperemos que el ex bohemio Sandoval pueda desempeñar un papel más aceptable.
No pude ver el partido contra Sporting Lisboa porque no lo pasaban por la tele y no lo comentaba JC (sarcasmo es mi segundo nombre). Sin embargo vi en reiteraciones a un Estoyanoff encendido y a un equipo con buen juego y capacidad goleadora.
Observaciones que reiteré luego en el encuentro ante Benfica, donde vi a un aurinegro con un buen manejo de balón, aunque con unas desatenciones defensivas alarmantes.
Párrafo aparte merece la mención que voy a hacer en párrafo aparte.
Me gustó mucho Jonathan Rodríguez, me parece un delantero que va a dar mucho de qué hablar.
Lo que se viene:
Copa sudamericana, jueves 1 de agosto ante Cobreloa en Antofagasta. Nada sería más lindo que reinaugurar este ciclo con una victoria aurinegra.
Qué felicidad me da decir: “Hasta la semana próxima”, que felicidad me da no tener el alma aferrada a un dulce recuerdo…
Salute.
Una vez, en seguro de paro, mi depresión se hizo notar: engordé, me dejé crecer la barba y escuché los tangos más tristes de Carlos Gardel. Me vi celebrando el 49° título de mi querido Peñarol, sin tener cómo plasmar el inexplicable sentimiento que me produce la rayada en estas tan apreciadas líneas.
Pero incluso en mis peores momentos, siempre guardé escondida una esperanza humilde, que es toda la fortuna de mi corazón. Y así como renace una flor en primavera, PDA volvió, y con PDA volví yo, bajo el burlón mirar de las estrellas…
En aquel gélido abril, el aurinegro quedaba eliminado de la Libertadores y comprometía sus posibilidades fecha a fecha en el clausura.
Hoy por suerte, la realidad que nos convoca es distinta. PDA 2.0 encuentra a un Campeón del Siglo XX fortalecido, luciendo su cinturón de campeón, y midiéndose con equipos fuertes del viejo continente.
Lo que me dejó la gira:
Creo que el carbonero, de mitad de cancha hacia adelante, tiene un plantel con muchos argumentos para pelear el torneo continental que se avecina. No obstante, a nivel defensivo hay muchas cuestiones a corregir. Aunque quizás sea muy pronto, no creo que Emiliano Albín sea el adecuado para ocupar el lateral derecho. Esperemos que el ex bohemio Sandoval pueda desempeñar un papel más aceptable.
No pude ver el partido contra Sporting Lisboa porque no lo pasaban por la tele y no lo comentaba JC (sarcasmo es mi segundo nombre). Sin embargo vi en reiteraciones a un Estoyanoff encendido y a un equipo con buen juego y capacidad goleadora.
Observaciones que reiteré luego en el encuentro ante Benfica, donde vi a un aurinegro con un buen manejo de balón, aunque con unas desatenciones defensivas alarmantes.
Párrafo aparte merece la mención que voy a hacer en párrafo aparte.
Me gustó mucho Jonathan Rodríguez, me parece un delantero que va a dar mucho de qué hablar.
Lo que se viene:
Copa sudamericana, jueves 1 de agosto ante Cobreloa en Antofagasta. Nada sería más lindo que reinaugurar este ciclo con una victoria aurinegra.
Qué felicidad me da decir: “Hasta la semana próxima”, que felicidad me da no tener el alma aferrada a un dulce recuerdo…
Salute.