Todo empezó bien, todo estaba tan bien cuando a los cinco minutos Rodrigo ponía el uno a cero. Después, por un rato el negro que queremos ver todos, llevándose por arriba a Danubio, llegando con la pelota en el piso.

Fueron cinco minutos letales, Danubio metió dos goles y todo cambió. Ya no pudimos proponer, nos ganó el nerviosismo y la ansiedad. Danubio ganó la mitad de la cancha e incluso con un hombre de más durante gran parte del segundo tiempo no supimos entrar al área rival.

De las causas

Jugadores

Cuesta encontrar un rendimiento bajo en algún jugador al punto de hacerlo responsable. Tal vez el sector derecho del medio campo estaba muy despoblado, ya que Barboza y Pezzolano estaban creando por izquierda y Danubio salía con mucha facilidad por esa zona.

Nervios

Muchos, jugadas mal terminadas, decisiones mal tomadas, cuando se está de espaldas al arco, con dos defensas detrás es difícil darse vuelta, los jugadores intentaron hacer esto unas doscientas veces. Tiros al arco desde muy lejos, que se iban muy lejos y el empate nos quedaba muy lejos.

Esquemas

Cuando se juega con un hombre de más se supone que la cancha abierta favorece. Nos pareció que en ese período del partido se abusó de los circuitos en corto, creemos que se pudo haber ensanchado la cancha cuando lo que hacíamos era buscar triangulaciones entre los creadores y los laterales.

El rival

Danubio hizo lo suyo, ganó casi todas las divididas y los rebotes. Cerró muy bien el medio y se intentó defender con la pelota. Fue mejor.

De las sensaciones

Bronca, mucha. El canto permanente de la hinchada, en la victoria y en la derrota emocionaba. Pero la sensación que manda es la bronca. Al punto tal que esta columna la estamos escribiendo el martes, cuando ya pasaron tres días del partido y aún dura ese sentimiento.

De lo que viene

Dos semanas para levantar el ánimo al plantel, para trabajar mucho los errores. Para esperar que Puglia se recupere del esguince, para esperar que se vayan todos los resabios de la gripe.

Dos semanas para trabajar, para encontrar una solución en la marca de la zona derecha. Porque lo que viene es River, el equipo que con un partido menos es el más goleador del torneo y hay que arreglar la defensa.

Por nuestra parte seguir alentando, confiando en el proyecto y sufriendo mucho en las malas, para disfrutar más cuando vengan las buenas.