No es fácil mantener el equilibrio

No solo el clima nos viene maltratando bastante últimamente, esta vez se sumaron otros condimentos.

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Sabíamos que iba a ser muy difícil poder mantener el equilibrio que nos tenía como punteros cómodos de este torneo. Buen goleo, una defensa muy sólida casi sin goles en contra nos venían dando una tranquilidad que hoy en día parece tambalear gracias a los últimos resultados.

Martes de venta previa en locales Abitab y ya comenzaba el caos, era la hora estipulada para el comienzo de la venta. Hasta ahí fuimos a buscar una de las mil cabeceras que nos habían dado.

Obviamente que gracias a los “curros” y “amiguismos” de los empleados, las entradas, no solo que no salieron a la hora marcada, sino que duraron menos de 20 minutos. El consuelo era pagar $350 para la tribuna del costado, cosa que esta vez decidí no hacer porque ya estoy harto de las estafas y de los precios de ópera.

Programar una buena noche de bar y birras era la alternativa y todo estaba encaminado.Pero el mal clima trajo una de arena y llovieron dos entradas, a volver a organizarse y a la cancha se a dicho.

No para de llover, son las 20:00 y paso en búsqueda de mi amiga, una de esas hinchas que no falta nunca, un buen abrigo para el aguacero y a la pista.

Al llegar al frío Franzini nos mandamos para el acceso a la tribuna marcada, pero nos mandan para la otra puerta. “Acá esta lleno”, dijeron. Pensé que la cabecera tendría dos entradas, ¡pero cuando me di cuenta ya estaba adentro de la tribuna lateral! Parecía una tomada de pelo.

¡Odio esa tribuna! ¡No la quiero ni gratis! Obviamente que esto se toma con humor, pero ¿se imaginan si esto le pasa a un cuadro chico en el Parque? Probablemente nos caiga una demanda de los derechos del consumidor como mínimo.

Cada vez que vivo estas situaciones digo: “Dame siempre el sector visitante de la Scarone”, ese del que los hinchas de algunos cuadros chicos se viven quejando, pero bueh, cosas del fóbal nuestro de cada día.

Cosa nuestra de cada día es saltar un tejido y encontrar un agujero para pasarse de tribuna a tribuna, y en busca de eso fuimos. Un par de raspones en la espalda y al fin pudimos encontrar el lugar que desde el martes se nos estaba negando. A saltar atrás del arco, como debe ser.

La banda copó el Franzini, la lluvia nos maltrató casi todo el partido, mientras que en la cancha se vio algo muy raro. Comenzamos ganando muy temprano y el trámite del primer tiempo hacía pensar que el bolso se lo llevaba sin transpirar, pero de a poco nos fuimos complicando solitos.

Alonso jugó muy lejos del arco, Mascia no estuvo en su noche y a medida que el “Vasco” mandaba cambios, la cosa parecía empeorar.

La defensa entró a dormir hasta que llegó el empate, luego un infantil penal para complicar aún más las cosas. Otra vez nos dan vuelta un resultado.

El partido se nos fue de las manos hasta que llegó el tercero y definitivo. “Fausito” de Guille De Los Santos y la pudrieron en un ángulo de tiro libre, asunto casi liquidado.

Encontramos el descuento en un confuso penal -al menos desde la tribuna- pero enseguida llegó el cuarto violeta y asunto liquidado.

Solo hubo tiempo para hacer otro penal insólito y para que el “Nano” Ramos debutara en la red de Primera.

El final fue 5 - 3. Dolorosa y preocupante derrota, como para pensar.

Lo peor

Desde que está este cuerpo técnico a la cabeza, Nacional no gana partidos importantes. Pasaron los clásicos, la Copa, Danubio y Defensor, todos con derrota, esperemos que sea solo una casualidad.

Lo que no es casualidad es que recibimos 5 goles, como hacía mucho que no recibíamos. Al menos yo no recuerdo otra derrota similar en un torneo local.

Más allá de estos datos, sigo teniendo mucha fe y confianza sobre este cuerpo técnico.

Lo mejor

“Y más te aliento, si vas perdiendo
un sentimiento, no trates de entenderlo
no se compara con otra hinchada
yo soy del bolso en las buenas y en las malas”

El partido estaba liquidado y a pesar de la lluvia y la derrota, la hinchada de Nacional volvió a dar una muestra de compromiso, amor e incondicionalidad.

En resumen

Perdimos y seguimos primeros, el domingo pasamos raya.