Los asiduos lectores de esta columna sabrán que en este espacio, y durante numerosos párrafos, lo que menos se hace es hablar de básquetbol, por lo que, en vísperas de la máxima expresión cultural de nuestro país y aprovechando que solamente jugamos un partido la semana pasada, hablaremos de Carnaval y sobre todo de un grupo compuesto por hinchas y simpatizantes de la Rojita del Mercado: nuestros amigos de Aristóphanes.

Integrados por tres ex jugadores del club como: Martín “Pollo” Perrone, Christian “Hueso” Ibarzábal y Juan “No registra apodo” Cristóbal, que en conjunto con Juan Pablo Parente, Federico Pereyra, Winston Gorgal y Martín Angiolini (se rumorea que está igual o incluso más dotado que cualquier extranjero que vienen a jugar) llevan adelante desde hace tres carnavales al conjunto de Aristóphanes, y han ido expandiendo el bichito de la Roja del Mercado entre sus compañeros e hinchas.

Es cierto que en nuestro propio club ensayan los Zíngaros, y es verdad que llevan algo más de gente y que en sí su atractivo no se encuentra tanto en el espectáculo sino en la tribuna, pero nuestro corazón (y otras partes del cuerpo también) pertenecen a Aristóphanes.

Para este Carnaval van a presentar su espectáculo “Caminar en grupo”, haciendo referencia a diferentes grupos humanos que se forman (oficina, grupos de amigos, planteles de básquetbol, etc.) y todo esto sirve de excusa para realizar las parodias de Moliere y la vida de Ricardo Espalter.

Desde este humilde espacio, y siempre y cuando sigan pagando la respectiva cuota mensual, vamos a estar apoyando a nuestros amigos de Aristóphanes.

Luego de esta breve introducción que nada tuvo que ver con el deporte, porque en la vida hay cosas mucho más importantes (como afilar a un grupo de parodistas para que me convoquen a escribir un par de textos, a cambio de fama y rédito económico), hablemos de básquetbol.

El sábado por la noche visitamos a Unión Atlética en su cancha y nos llevamos un puntazo, en cifras de 75 - 65. Las claves de la victoria pasaron por las buenas actuaciones de nuestros jugadores, en especial Andrés San Miguel (11 puntos, 18 en valoración), Brian Williams (25 puntos, 15 rebotes, 42 de valoración) y Anthony Danridge (18 puntos), más el buen cierre del juego de Leandro Taboada.

Un juego que dominamos de principio a fin, y que fue parejo solamente al comienzo y al final del mismo, cuando la UA intentó arrimarse en el score. Fue un partido duro y digno de dos equipos que se jugaron todo, y por todo se entiende en lo deportivo y en cuanto a la salud física.

Para decirlo de otra forma, se mataron a palos, golpes, rifi rafe, o como quieran llamarlo. Debemos aplaudir de pie, como buenos hinchas del básquetbol de rodillas raspadas por tirarnos en canchas con piso de bitumen, a nuestro extranjero Williams que recibió duro y parejo y se aguantó como un duque.

Perlitas televisivas

Como deberían saber, el partido fue televisado, siendo esta la segunda ocasión que nos televisan y coincidentemente ganamos ambas veces. Sin lugar a dudas, y como ya hemos dicho en esta columna, debemos agradecer al Sr. Paco Casal.

No me da vergüenza decir que somos el equipo de Paco (a pesar de que no ponga un peso en nuestro club). No importa, se nota que claramente lo somos en cuanto a lo sentimental, lo afectivo y lo emocional, y no nos interesa su dinero, su capital, sus contactos, su fortuna. Con que nos tire un vuelto, una propina o una sobra nos alcanza.

Anatomía

Corría el tercer cuarto y Anthony Danridge se encontraba en el vestuario siendo atendido por un golpe sufrido. A todo esto el Sr. Alberto Sonsol comenta: “El jugador sufrió un golpe en el posterior de su pierna, seguramente sea el tríceps”.

Emm… Una acotación fuerte la de Sonsol, en donde claramente podemos apreciar dos cosas: Sonsol seguramente haya realizado la orientación Humanística, Científica y/o Artística en el liceo; y podríamos deducir que Danridge habría jugado haciendo el paro de manos todo el partido.

El número de Tamborini

Adentrados el último cuarto, Juan Pablo Tamborini acota: “Tengo un número de Williams que los va a sorprender, pero no quiero decirlo ahora”.

Durante la transmisión televisiva finalmente no recuerdo que lo haya dicho (si alguien lo escuchó, por favor que lo comente al final de la nota), pero me quedé con la duda y a continuación escribo posibles sugerencias sobre ese número tan misterioso.

- Número de calzado de Williams
- Dotación pélvica de Williams.
- El número de celular de Williams es capicúa.
- Williams sí sabe cuáles son los números primos y los hace casarse entre ellos, como hizo Artigas.
- Williams pudo encontrar un boleto de ómnibus que sume 21.
- Williams llama al 141 por un taxi y el mismo viene en menos de 3 minutos.
- Williams usa el número 33, porque le recuerda el 133 de Cutcsa que va a la Aduana.
- Williams usa el número 33, porque le recuerda al 133 de Cutcsa que va a Pajas Blancas.
- Williams usa el número 33, porque simplemente le recuerda a Pajas Blancas.
- A Williams le cae en gracia el 33 y las palabras “Pajas Blancas”.

Entre otros…