En la tarde del domingo visitamos Jardines con la incertidumbre de cómo iba a formar nuestra querida franja negra, ya que durante la semana se había especulado en los medios que podrían realizarse variantes en cuanto a los partidos anteriores.

¡Y así fue! Como lo pedíamos, el Leo se la jugó y mandó a un equipo bastante más ofensivo que lo que venía apareciendo y con una defensa improvisada por la inesperada situación de Canobbio.

El equipo formó con una línea de cuatro en el fondo, Porras como único volante de marca, delante de su línea Camilo, Nachito y Zambrana, más dos delanteros. Creo que ahí estuvo la clave, en esos tres volantes ofensivos que fueron incontenibles para la defensa cebrita, que no sabía que hacer debido a la habilidad de los jugadores y a la constante rotación en los sectores de la cancha que ocupaban.

De pique nomás, y gracias a esa ambición ofensiva con la que Danubio salió a la cancha, se abrió el arco. Lo que más nos costaba, se dio en el comienzo del encuentro. Creo que ahí estuvo la clave, en abrir el partido de entrada, para después manejar la pelota con tranquilidad y que ellos tengan que venir a buscarla y así encontrar los espacios.

Luego nos encontramos con los espacios, con el juego y con los goles que sentenciaron un partido que por momentos se nos complicó por un juez que no estaba a la altura de un partido de Primera División.

Premio para el Indio por los partidos que venía haciendo, con su gol está sellando un campeonato redondito.

Lo mejor: El arranque. Fue clave arrancar con un gol de ventaja ante un equipo que venía a buscar un punto a Jardines.

Lo peor: El juez. Vergonzosa actuación del árbitro central, que desde un principio mostró una actitud soberbia y provocadora. Constantemente mirando a la tribuna y acercándose al talud cuando no había empezado el partido con miradas que buscaban algo. Para mi gusto, un impresentable. Todo esto sin mencionar que se dedicó a dejar pegar y se comió un penal a Álvez que solo él no vio.

Las figuras: Porras, Porras y más Porras. Una bestia, lo que hace con y sin la pelota me sorprende cada partido. El dueño de la pelota, de los tiempos y creador de los circuitos de juego.

Camilo, otro animal, un incansable. Con el partido liquidado seguía corriendo, había que avisarle que iban 90 minutos. Merecido y muy lindo gol.

Lo próximo: Defensor y en Jardines, el domingo, el lunes, no se sabe. Por ahora, parece que sería el domingo a las 16:00.

Ampliamos ventajas en la Anual, y estamos compartiendo el Clausura, primeros en todas las tablas, pero falta mucho.Ç

¡Todos el domingo a Jardines a alentar en el clásico!