Hoy por vos, mañana por mí
Caímos en un lindo partido de fútbol ante Wanderers. Por suerte, gracias a otros resultados, estamos más cerca de la salvación.
Increíblemente, las veces que ganamos no pudimos despegarnos debido a los resultados (en algunos casos increíbles) que cosecharon los rivales en la fatídica. Esta vez perdimos, y sin embargo, la permanencia se encuentra más cercana.
Lo concreto es que todos los resultados que se dieron (menos el nuestro) nos favorecieron. Peñarol terminó con la mentira de Juventud (quien igual probablemente se salve, ya que tiene dos partidos accesibles ante Miramar y Cerro Largo).
Cerró cayó claramente ante un golpeado -y alternativo- Nacional, Sud América no pudo con los suplentes de Defensor, y lo más gracioso de todo: Liverpool perdió con el descendido Miramar Misiones. Con este resultado, el equipo de Palma pone en peligro seriamente su permanencia en el círculo de privilegio.
Esta más que claro que Racing depende de sí mismo. Pero aun si no pudiéramos sacar puntos en la cancha de River, si no suman Sud América, Liverpool o Cerro, queda abrochada la estadía en la A.
Con respecto a este sábado, lo de siempre. Pero lo de siempre, bien. Mucha gente en la tribuna, por varios pasajes buen juego, y el equipo yendo hacia adelante y jugando de igual a igual contra el ahora puntero de la Tabla Anual.
A los pocos minutos tuvimos dos chances de gol claras. La segunda ya terminó en la red gracias a un excelente cabezazo de Gorocito, tras mejor centro de Lalo. El goleador de Racing volvió a ser una pesadilla para la defensa rival.
El pecado de Racing fue no saberlo mantener aunque sea unos minutos. Al toque cayó el empate y el partido se tornó parejo. A pesar de estar Cayetano en cancha, fluía el futbol en la mitad de la cancha y el partido se hacía entretenido.
Me atrevería a decir que si bien Wanderers tenía más la pelota y la manejaba mejor que nosotros, los de Larriera jugaron mejor. Ya que las jugadas más claras de gol en ese primer tiempo fueron para nosotros.
Para el segundo tiempo salimos a ganar. No nos salió del todo bien, ya que recibimos un gol a los pocos minutos. Los siguientes minutos fueron de dominio académico. Nunca perdimos la calma, intentamos empatar jugando al fútbol, pero no pudimos.
Recibimos el tercer gol y se liquidó el partido. Wanderers “sacó la pizarra” y nos costó más encontrar chances de gol.
Volvimos a perder, es verdad. Es que tampoco el Clausura ha sido espléndido en cuanto a resultados. Pero lo que tiene este Racing es nuestra identidad reflejada en la cancha. Y eso (si bien cuando se pelea por el descenso a veces hay que hacer lo posible por sumar como sea) es fundamental.
Calculo que eso es lo que hace que la gente se vaya tranquila de la cancha, aunque no nos llevemos ni un punto.
Nos encontramos este fin de semana en la cancha de River Plate, en lo que será con seguridad otro buen partido de fútbol. Esperemos rescatar puntos y sacarnos de una vez por todas la pesada mochila que cargamos.
Lo concreto es que todos los resultados que se dieron (menos el nuestro) nos favorecieron. Peñarol terminó con la mentira de Juventud (quien igual probablemente se salve, ya que tiene dos partidos accesibles ante Miramar y Cerro Largo).
Cerró cayó claramente ante un golpeado -y alternativo- Nacional, Sud América no pudo con los suplentes de Defensor, y lo más gracioso de todo: Liverpool perdió con el descendido Miramar Misiones. Con este resultado, el equipo de Palma pone en peligro seriamente su permanencia en el círculo de privilegio.
Esta más que claro que Racing depende de sí mismo. Pero aun si no pudiéramos sacar puntos en la cancha de River, si no suman Sud América, Liverpool o Cerro, queda abrochada la estadía en la A.
Con respecto a este sábado, lo de siempre. Pero lo de siempre, bien. Mucha gente en la tribuna, por varios pasajes buen juego, y el equipo yendo hacia adelante y jugando de igual a igual contra el ahora puntero de la Tabla Anual.
A los pocos minutos tuvimos dos chances de gol claras. La segunda ya terminó en la red gracias a un excelente cabezazo de Gorocito, tras mejor centro de Lalo. El goleador de Racing volvió a ser una pesadilla para la defensa rival.
El pecado de Racing fue no saberlo mantener aunque sea unos minutos. Al toque cayó el empate y el partido se tornó parejo. A pesar de estar Cayetano en cancha, fluía el futbol en la mitad de la cancha y el partido se hacía entretenido.
Me atrevería a decir que si bien Wanderers tenía más la pelota y la manejaba mejor que nosotros, los de Larriera jugaron mejor. Ya que las jugadas más claras de gol en ese primer tiempo fueron para nosotros.
Para el segundo tiempo salimos a ganar. No nos salió del todo bien, ya que recibimos un gol a los pocos minutos. Los siguientes minutos fueron de dominio académico. Nunca perdimos la calma, intentamos empatar jugando al fútbol, pero no pudimos.
Recibimos el tercer gol y se liquidó el partido. Wanderers “sacó la pizarra” y nos costó más encontrar chances de gol.
Volvimos a perder, es verdad. Es que tampoco el Clausura ha sido espléndido en cuanto a resultados. Pero lo que tiene este Racing es nuestra identidad reflejada en la cancha. Y eso (si bien cuando se pelea por el descenso a veces hay que hacer lo posible por sumar como sea) es fundamental.
Calculo que eso es lo que hace que la gente se vaya tranquila de la cancha, aunque no nos llevemos ni un punto.
Nos encontramos este fin de semana en la cancha de River Plate, en lo que será con seguridad otro buen partido de fútbol. Esperemos rescatar puntos y sacarnos de una vez por todas la pesada mochila que cargamos.