Otra fecha pasó y el importantísimo triunfo ante Rentistas parece haber sido vital para que el equipo encuentre la tranquilidad. Es que había buen juego, faltaba el resultado. Así enfrentamos al siempre difícil Fénix, y así nos hicimos de los seis puntos (guiño, guiño).

Por momentos fue un partido similar al disputado contra los bichos colorados, Rampla se replegó y buscó salir rápido. Los de Capurro tenían más el balón pero sin gran problema hasta que vino una contra frenética del Picapiedra. Aprile robó, descargó para Vega, el juvenil hizo la pausa, se la tiró a Paul quien la jugó al medio para que el rasta llegue a empujarla. Un manual de contra, todo virtud del volante izquierdo Picapiedra que no se limitó a robar la pelota sino que acompañó el ataque y llegó a definir.

Después del gol se vinieron los de Capurro y la pasamos fea. Pelotas en los palos y algún entrevero en el área fueron los peores momentos, pero logramos irnos al descanso con el triunfo parcial.
En la segunda mitad, como era de esperarse, ellos se vinieron y Rampla se plantó de contra. Tuvimos no menos de tres chances para ampliar el marcador pero las malas definiciones y buenas intervenciones de Mejía nos hicieron sufrir hasta el final.

Capítulo aparte para la actuación de Christian Ferr*yra, juez del encuentro. El citado colegiado venía de cobrarnos un penal, cuando menos discutible, en la primera fecha ante la IASA. No obstante, su actuación frente a los de Capurro fue tendenciosa. En varias ocasiones corrigió a sus asistentes -mejor ubicados- en fallos a favor de Rampla. Asimismo desestimó faltas claras que pudieron haber redundado en goles de los de Capurro. Nobleza obliga, corresponde reconocer que la expulsión de Pablo Pereira fue correcta, pero tratando de ser objetivo quedó la sensación de una actuación un tanto injusta. Errores tiene cualquiera y sé que muchos creen que uno no debe quejarse cuando gana, pero lo de este hombre fue notorio.

Lo importante es que ganamos, no sin sufrir y sacando una pelota en la línea (luego de una falta a nuestro favor no cobrada) para así seguir sumando.

El triunfo Picapiedra se sostuvo por un parejo rendimiento en general. Dentro de quienes se pusieron la camiseta más linda del mundo destaco la labor de Long, los laterales (Montero y Varas), Román (un león en la media cancha) y Dzeruvs (rápido y con mucha entrega).

Ahora viene un parate, que sirve y mucho para recuperar lesionados. Luego vendrá Peñarol y después el clásico. Pese a que un grande siempre es importante, el clásico es el clásico y además es frente a un rival directo. Este hincha cree que aquellos que tienen 4 tarjetas amarillas y vienen siendo titulares deberían ser reservados (¡vengan de a uno!), léase: García, Vargas y Aprile. Pondría una pareja de centrales “nueva” frente a los aurinegros (Piriz, Olivera, Arias y Tejera serían opción) y aquel que se desempeñen de buena forma acompañaría a García frente a nuestro tradicional rival.

¡Fuerza Rampla, a seguir metiendo!