El objetivo del nuevo entrenador mirasol es tan simple como complicado (valga la contradicción): salir campeón uruguayo. Para ello deberá disputar quince finales (valga el cliché) y hacerse con el clausura.

Luego de una pretemporada muy negativa, todo parecía indicar que sería izquierdo el pie con el que arrancaría Pablo Javier Bengoechea como técnico aurinegro. Perdiendo los dos clásicos de verano contundentemente y jugando mal, la mochila del DT parecía pesar más que nunca teniendo en cuenta los 17 puntos que había que remontar en la tabla anual.

Peñarol necesitaba orden en la mitad de la cancha y velocidad en la transición defensa-ataque, y en ese sentido fueron muy acertadas la llegadas de Luis Aguiar y de Jonathan Urretavizcaya, el segundo de estos luciéndose ya en su debut.

La primera prueba de Bengoechea fue como visitante en el Luis Troccoli ante un Cerro necesitado de puntos, y si bien el rival se sorteó con un contundente 3 a 0, no fue un debut soñado ni mucho menos.

Lo cierto es que el manya no deslumbró y menos lo hizo en la primera mitad donde se mostró desordenado y poco contundente. El equipo local parecía tener más ganas de hacerse con el encuentro.

La segunda mitad fue un poco más agradable a la vista. El ingreso de Aguiar y de Piriz ordenó la zona de volantes y al aurinegro le fue más fácil irse al ataque. Urreta fue clave por derecha (y luego por izquierda) con su velocidad y buen pié.

Los goles llegaron en el momento justo: primero sorprendió Sandoval anticipándose en el área chica rival, luego hizo lo propio Zalayeta tras gran asistencia del ya elogiado Urretavizcaya, y por último Luis Aguiar de penal anotó tras una mano de Baltasar Silva.

Así comenzó oficialmente la era de Bengoechea en Peñarol. Si bien se ganó y se goleó, no se gustó y eso no puede dejar de preocuparnos. No pretendemos tener en cancha al Chelsea de Mou ya en el primer partido, pero entendemos que es necesario que Peñarol sea protagonista en los partidos que disputa y sea respetado futbolísticamente por los rivales. Así lo marca la historia.

Esperemos que esta sea la primera de muchas victorias de este Peñarol en el 2015. Para ganar este campeonato uruguayo necesitamos un milagro y para eso trajimos a un especialista.